Kiyoko
Miro por la ventana, el CP9 ya debe estar en posición, le dije a mi padre que este plan fallaría, Spandam solo hace lo que cree correcto, es un engreído que no sabe actuar bien.
—Saldrá mal —aviso, él frunce el ceño—. Te lo digo desde ahora por si aún crees que puedas cambiar el plan, no vas a matar a Iceburg ni a obtener los planos del Plutón
—¿Acaso Kiyoko-sama ha visto el futuro? —cuestiona burlón, eso no es necesario—
—No es necesario, sé identificar un plan mal estructurado y hecho por mero capricho —respondo acomodando mi vestido—. Verás, yo he aprendido de mi padre y me he inspirado de los mejores agentes del Cipher Pol para poder crear mi propia táctica, divisé las fallas que cometían y las corregí
—No puedes arreglar el pasado —miro su escritorio—
—Lucci se casará conmigo —cambio de tema, él asiente—. No estás invitado a la boda, sé cómo vas a dejar a mi marido… Confías tanto en que tu patético plan saldrá bien
—Será un éxito si continúa así —asegura Spandam, niego despacio—
—Ya te dije, el CP9 no podrá matar a Iceburg por lo que regresarán aquí con malas noticias —insisto, él niega—. Bueno, cree lo que quieras, de todas formas ya envié un informe especial a mi padre dándole todos los puntos malos de tu plan y por qué no debió confiar en alguien como tú
—Su padre me dio esto, Kiyoko-sama —frunzo el ceño, esa estupidez—. Así que no hables mucho
—¿Realmente crees que puedes amenazar a una princesa y salirte con la tuya? —cuestiono, él enciende esa máquina—. Házlo y te juro que lo próximo que pierdas, serán tus bolas
Su rostro fue severamente dañado por mí, él conoce mi fuerza, por eso lleva esa estúpida máscara, se intentó pasar de listo.
Esa máquina es mi peor pesadilla, es como un control remoto, pero tiene un amplificador de dolor, hay dos opciones, soltar o matar, cualquiera de los dos significa que mi cuerpo recibirá una descarga eléctrica y ataques desde adentro, no sé cómo lo logran, pero siempre lo usan cuando quieren que haga las cosas más rápido.
—Espero fallar en mis predicciones, quiero los planos del Plutón en mis manos antes del amanecer —advierto, sigue siendo un idiota—
Camino haciendo resonar mis tacones, los demás agentes de bajo rango están descansando, pero yo no puedo pegar un ojo, el CP9 está haciendo las cosas mal… Pero como no es mi unidad, no quiero cambiar el plan, además Spandam sería despedido.
Tuve que rebajarme a estar con los del CP9 únicamente porque mi marido está aquí y mi padre quería que me relacione un poco más con él.
Iceburg
Yune está sentada a mi lado, he puesto en peligro a esta chica que solo venía a advertirme sobre lo que pasó con los agentes del Gobierno Mundial que vinieron en la tarde.
—Todo esto no es necesario —comento, Kalifa y los demás están protegiéndome como si fuese un rey—
—Se ofrecieron voluntariamente —contesta mi secretaria, Yune se está quedando dormida—
—Es como si fuera un rey —bajo la mirada hacia mi ratón—. Deberías venir a dormir aquí
—No tengo sueño, solo estoy tratando de pensar —informa la pelinegra, no le creo—
—Por cierto, Iceburg-san, ¿por qué tiene el cartel de recompensa de Nico Robin? —consulta Kalifa, la miro de reojo—
—¿Te incomoda? —pregunto acariciando a Tiranosaurus—
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Let There Be Love || Zoro Roronoa
FanfictionSolo recuerda que estaré aquí. Realmente nadie podía estar para un desastre tan catastrófico como lo era ella, pero a pesar de todas los intentos de advertencia, Zoro solo pudo quedarse a su lado al verla tan vulnerable. Para Yune, la vulnerabilidad...