- ¿¡Por qué cojones hay tanto tráfico a estas horas!? – Lila grita desde el asiento trasero del coche, viendo que este se mueve lentamente en la autovía.
- La gente vuelve a casa a esta hora y los policías aprovechan para pasar el control de alcoholemia.
- ¿Tú no has bebido?
- No, estaba bebiendo una coca cola.
- Ah, no me había fijado.
- Sí, estabas ocupada en otras cosas – murmuro sin poder reprimirme, no sé cuánto voy a soportar estar con ella sin que me entre el mal humor.
Poco, muy poco.
- ¿Ya vas a empezar como mi hermano?
- Tú hermano tiene razón.
- Mira Jack, no me toques los cojones que no estoy de humor – suspira pesadamente y abre la ventanilla que tiene al lado - ¡Podéis ir más rápido! ¡Hay personas que quieren llegar este año a casa!
- ¡No grites!
- Joder, es que parece que lo hacen a propósito – observo a través del espejo retrovisor cómo se recuesta en el asiento, mi ojos se dirigen hacia ese pequeño hueco que hay entre sus piernas... Hueco que no está cubierto con nada.
- Lila.
- ¿Qué?
- Voy a hacerte una pregunta... - aparto la mirada con todo mi esfuerzo y aprieto mis manos alrededor del volante – Y espero que la respuesta no sea la que creo. Espero estar muy, pero que muy equivocado.
- ¿Qué pasa? - no se está dando cuenta de lo que estoy viendo, pero creo que sabe que algo va mal - Me estás asustando.
- Lila – aprovecho que el coche está parado para girar la cabeza y mirarla fijamente - ¿Llevas ropa interior? - confirmo mi teoría cuando ella cierra las piernas instintivamente para que ya no vea nada de lo que hay debajo del vestido.
Esto debe de ser una cámara oculta.
- No.
- Me cago en la puta – pego un bocinazo hacia los coches que me impiden continuar mi recorrido y ahora soy yo el que abre la ventanilla para gritar - ¡Avanzad de una puta vez! ¡Solo tenéis que soplar en un tubo de plástico pedazo de inútiles!
- No grites.
- ¡Cállate!
- ¡No quiero! – me grita de vuelta y, de la nada, empieza a reírse.
- ¿De qué te ríes? ¿Eres bipolar?
- Si yo soy bipolar, tú eres cuadripolar - sigue riendo, se nota que sigue algo borracha - Como Ares.
- ¿Puedes dejar de nombrar a ese personaje? - ruedo los ojos y froto mi cara -Pareces una loca idiota.
- ¿Ahora también te vas a poner celoso de un chico imaginario?
- Y la idiotez va en aumento.
- Vale sí, vamos a dejarlo que no quiero discutir – murmura y se remueve detrás de mí - ¿Me puedo poner tu sudadera? Tengo un poco de frío.
Asiento mientras ella coge una sudadera negra que tengo siempre en el coche por s acaso. Se la pone hasta que todo su vestido y manos quedan cubiertas, está preciosa hasta con algo que no deja apreciar sus curvas.
- ¿Hacemos algo? - cuestiona tras mirar la hora en su móvil.
- ¿Qué quieres hacer?
- Pues... - sonríe e intenta ponerse en el asiento de delante. Una persona normal saldría del coche y se volvería a meter, ella no – Perdón – se disculpa cuando me da un codazo antes de ponerse en el asiento, no podía haberlo hecho más complicado.
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💜 MI DESTINO 💜 #3
Novela JuvenilJack sabe que su historia siempre ha sido con mofletitos, de lo que no tiene ni idea es de si ella formará parte de su destino. Él cada vez está más confundido. Ella también. Lo único que tienen claro, es que se siguen amando. ¿Será suficiente todo...