14

314 55 18
                                    

TOM

- ¿Hola?

- Tom.

- Billie, ¿cómo estás?

- Extrañandote... - fue lo único que le oí decir antes de que Heydan me arrebatara el móvil. Me sentía frustrado, no había podido llamarle cuando llegué para que no esté preocupado.

- Tom te lo vamos a pasar nada más porque eres el capitán. - el móvil se lo extendió a Julián quien había hecho la recolecta de todos los móviles y yo no dí el mío con la excusa de que no lo traje.

- Un shot solo por eso.

- No Gustav. - lo vi acercarse con una jarra donde habían mezclado de todo un poco. Mi buen amigo de por sí, ya estaba borracho.

Era el único que no había provado bocado de esa mezcla tan rara.

- Unita Tom.

- No...

- ¡Chicos! - los llamó obteniendo su atención. - ¡Tom es el único que no ha provado nada!

- Es cierto.

- Kaulitz ven aquí.

Había salido corriendo tratando de salvar mis carnes, pero la ropa que traía no cooperaba y todos se lanzaron sobre mi. Cada uno agarrando mis brazos y piernas, vi a Gustav acercarse a mi poniendo la bebida en una cantidad exagerada.

- Abre la boca, Tom.

- No. - volví a negarme. Heydan sonrió con maldad y apretó mi miembro de una forma dolorosa, sentí mi piel erizarse del dolor pero aún así no les daría el gusto.

- Abre. - apretaba con más fuerza, estaba a punto de llorar del dolor. Lentamente abrí la boca, Gustav se acercó y me hechó la bebida en la boca, ni siquiera tragué. Todo chorreó por un lado mojandome el cabello y una buena parte de la bandana.

- ¡EHHH! - se emocionaron todos dejandome caer al suelo mojado y con un dolor terrible. Estaba tieso, con las manos agarrandome la zona adolorida y en posición fetal.

- Levantate Kaulitz.

- ¡No puedo! ¡Ese cabrón me agarró el pajarito demasiado fuerte!

- ¡No es para tanto! Exageras. - me extendió su mano para ayudarme a levantar, con la intención de hacerle lo mismo lo acepté. Me puso de pie pasando mi brazo en sus hombros y caminamos hasta llegar a un asiento, antes de que me sentara con suma rápidez guié mi mano a su entrepierna y la agarré estirandola hacia atrás como si se tratara de una palanca de un auto. Heydan se retorcía de dolor dejandose caer al suelo sin fuerzas junto conmigo, sonreía con satisfacción verlo así. - ¡Me rindo, me rindo, ME RINDO!

- Esto no se trata de quién se rinde primero o no. - me reí ayudandole a sentarse en la silla mirando su rostro. - Eso es para que no lo vuelvas a hacer y sepas como se siente.

- Carajo, por un momento pensé que me lo arrancarías y me dejarías sin descendencia.

- No soy tan malo, eh.

- ¡Duele como la mierda!

- Ya, ya. No llores.

- ¡Tom! - chilló Gustav acercandose nuevamente a mi con la bebida, esta vez estaba dispuesto a tomar para que ya no me hagan lo mismo. Sirvió un poco de la bebida y me la dió, la acepté y la tomé de un solo sintiendo una mezcla tan horrible en mi boca.

Estaba muy fuerte.

- ¿Otro?

- No, dáselo a Heydan. A él le vendría mejor, ¿verdad? - asintió lentamente y no pude evitar reirme al verlo.

- Chicos ya es hora de dormir, mañana empezaremos con las actividades y necesito que duerman bien para que amanezcan con todo su lado positivo. - nos habló el guía que estaba a cargo de las actividades para nosotros.

5 minutos después

- ¡Fondo, fondo, fondo! - fumaba el vaper electrónico absorviendo una buena cantidad en mis pulmones y al sentir que ya era suficiente lo que dejé expulsar pareciendo una chimenea.

- ¡AAAAGH QUE BUENA ESTAAAAÁ!

- ¡EEEEEEEEH! - chillamos en medio de risas, estabamos mareados por los tragos y el humo, todo eso estaba encerrado en la habitación que estabamos.

Me pareció algo recreado a Scary movie pero más barato.

Solo faltaba el asesino y ya.

El guía se había puesto al tope de bebida gracias a Gustav, quién le metió una buena labia para que tomara.

Al terminar cada quien se fue a su habitación compartida, todos estaban cayendose de lo borrachos que se habían puesto. Yo compartía con Gustav la habitación, lo había traido arrastrando de lo mal que estaba. A duras penas y podía caminar; hice que se recostara en su cama para abrigarlo y yo irme a la mía.

Vi la funda de regalo que esperaba paciente ser abierta por mí, a si que sin mas rodeos la abrí con emoción. De ella un osito color café con el perfume de mi novio, saqué una gorra roja muy bonita junto con una camisa del mismo color.

- Uh, la usaré mañana mismo. - dije para mi en un susurro, más abajo estaba un cofrecito de color café. Con curiosidad lo abrí y en la primera hoja decía

"Son tres cartas para los tres días que no estaremos juntos

- Billie. "

.

En efecto habían tres sobres de papel de color rojo, uno decía miercoles, el otro jueves y el final; viernes.

Ya me estaba poniendo ansioso.

Agarré el primer sobre de papel y lo abrí.

Para Tom:

Miércoles-

Pueden haber millones de personas en el mundo, pero cuando encuentras a la persona correcta, ese millón pasa a ser nulo. Ese millón se reduce en una sonrisa, en un par de ojos que te invitan a soñar, en una sonrisa que te enseña a amar y una voz que te brinda paz... En una persona que simplemente hace que te sientas parte del mundo, parte de su mundo, esa persona que logra hacerte sentir que tienes un corazón. Gracias por ser esa persona.

- Billie.

Mi corazón estaba a punto de explotar, tenía muchos sentimientos encontrados en un ratito al leer la primera carta. Yo estaba muy enamorado de Bill y muy feliz de ser correspondido de la misma forma. Sentía que era un amor puro y sincero del bueno.

Abracé al osito respirando el aroma que emanaba de el, embobandome y volviendome loco pensando en mi Billie. En que estará haciendo, su sonrisa, sus ojos grandes y llamativos, sus besos, abrazos junto con la forma tan melosa que me los suele dar. Se que tres días no es mucho pero si que lo iba a extrañar.

𝑰𝒕'𝒔 𝑩𝒊𝒍𝒍𝒊𝒆 𝑩𝒊𝒕𝒄𝒉 2 <𝑻𝑶𝑳𝑳>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora