Perspectiva de Emily Burke
Cuando Alice me dejó con el señor Palmer, traté de ocultar mi fastidio. No porque me molestara estar con él, sino porque claramente me veía como una niña que necesitaba distracción, como si un simple paseo pudiera hacerme olvidar todo lo que había pasado.
—¿Qué te parece si vamos a una plaza de juegos? —me propuso con una sonrisa.
Una plaza de juegos. Toboganes, columpios, niños corriendo y gritando de emoción. Por supuesto. Porque claramente, una estructura de plástico sería suficiente para hacerme sentir mejor.
Reprimí un suspiro y le di una pequeña sonrisa, sin ánimos de ser grosera.
—Claro, señor Palmer.
Asintió satisfecho y abrió la puerta de su auto para que subiera. Nos pusimos en marcha, y yo fijé la vista en la ventanilla. Mi barbilla descansaba sobre mi mano mientras observaba cómo la ciudad pasaba en una mancha borrosa. Autos, edificios, personas apuradas en la acera, niños tomados de la mano de sus padres. La normalidad de un mundo que parecía seguir adelante, como si nada hubiera pasado. Como si nadie hubiera muerto.
El silencio en el auto se alargó. Hasta que el oficial Palmer lo rompió.
—¿Te gustaría escuchar algo, Emily? —preguntó con amabilidad, sus ojos aún fijos en la carretera.
—La radio está bien —respondí sin apartar la vista de la ventanilla.
Noté el pequeño titubeo en su expresión. Seguramente esperaba que pidiera alguna canción de moda, que le mencionara a algún cantante pop o una banda juvenil. Pero la verdad, no me interesaba la música en ese momento.
—Bueno... si eso deseas —murmuró, y encendió la radio.
El sonido llenó el auto.
"Muy buenas tardes a todos los radioescuchas, seguimos con nuestro segmento de noticias. Continúan las investigaciones sobre el trágico incendio en la antigua mansión abandonada, donde un grupo de jóvenes..."
El señor Palmer cambió rápidamente la estación, su mano girando el dial con torpeza.
—Mejor busquemos algo más...
Otra voz surgió de los altavoces.
"Efectivamente, hace unos días, por la madrugada, la reportera Sherry Thomas fue encontrada brutalmente—"
Click. Otra vez, cambió la estación.
Yo no dije nada. No tenía que hacerlo. Ya sabía lo que había pasado.
"Cuatro jóvenes estudiantes de Rosevilla University han sido encontrados ases—"
Click.
"Siguen las investigaciones por los múltiples ataques al grupo de jóvenes—"
Click.
Palmer siguió cambiando de estación, pero todas parecían girar en torno al mismo tema. Las noticias no hablaban de otra cosa. Esto no era como un crimen cualquiera que se olvidaba en un par de días. No. Este caso estaba en todas partes. Y yo era parte de él.
Giré la cabeza y lo observé en silencio. Vi cómo sus manos se apretaban ligeramente sobre el volante, cómo su mandíbula se tensaba, cómo su mirada evitaba la mía.
No dije nada. Solo me encogí de hombros.
—Mejor no escuchemos la radio —dijo de pronto, tratando de sonar casual, aunque su tono de voz delataba cierta incomodidad—. En estos días ya no es lo mismo, ahora solo son noticias y nada de música.
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Masked Desperation
HorrorDespués de una fatídica noche, Rosville es amenazada por un sujeto misterioso con una máscara. Alice Burke y sus amigos se verán involucrados en estas olas de asesinatos; ellos intentarán sobrevivir mientras descubren y detienen al de la máscara ¿Po...
