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[💎✨] Me funaron en Twitter por publicar contenido obslovetwt y shtwt JAFLSJFDF literalmente me funaron-

Pero que les quede claro: yo me odio más 👹

Pequeño capítulo de relleno antes de continuar con la trama<3

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Estaban de regreso en el hábitat de los dragones, Valka había salido así que los dejó a Hipo y a ti solos.

Bella estaba acurrucada en el pasto con Chimuelo lamiendo su plumaje para acicalarlo y uno que otro dragón salvaje observandola.

Mientras que Hipo estaba sentado en el pasto y tú te encontrabas sentado en sus piernas rodeandolo por la cintura con tus piernas.
Con tu mano derecha sostenías su mejilla izquierda y con tu mano izquierda pasabas tu lápiz por sus pecas, Hipo trataba de mantenerse quieto pero obviamente no se podía quedar en silencio.

—Y ese es mi plan

—No sabía que exponerte y exponer a todos al peligro era un plan

—¿Qué?

—Hipo, Drago es un domador de dragones que no tiene piedad alguna... Incluso sus atrapadores son tan malos como él.
Aunque he de decir que son algo idiotas... De verdad creyeron que iba a llorar porque me iban a tirar por la borda

—¿Que iban a qué?

—Ya no importa

—Yo también te hubiera creído... Eres un dramático sin remedio

—Lo tomaré como un cumplido.
El punto es que no puedes ir y "razonar" con Drago, él no va a cambiar de opinión

—¡Pude hacer que mi papá cambiara!

—Pero Estoico es Estoico y Drago es Drago... Hipo, lo mejor es buscar resguardar a nuestros dragones y ocultarnos hasta que todo pase, si tenemos que pelear lo haremos pero por ahora

—¿Debemos quedarnos aquí?

—Si..

—Pero, amor-

—Hipo Horrendo Abadejo III, tal vez tú mandarás en la cama, pero en la relación mando yo así que si yo te digo que no vas a hacer algo es porque NO vas a hacerlo, ¿entendiste?

—Si... Ya entendí

Ambos se quedaron en silencio mientras seguias pasando tu lápiz por el rostro del contrario.

—69, 70, 71, 72....73

—¿Ya acabaste?

—Sip

—¿Y bien?

—Tienes 73 pecas, antes tenías 65

—¿De verdad recuerdas el número de pecas que tenía hace año y medio?

—Sip, ahora solo falta contar las de tus hombros...

—¿Quieres que?...

—No, no vas a quitarte la ropa solo por eso

—Pensé que te gustaba contarlas

—¡Claro que me gusta!, ¿pero qué dirá tu mamá si nos llega a ver así?

—¿Cómo?

—Conmigo sentado sobre ti de esta forma y contigo sin ropa... Va a ser muy extraño

—No es nada que no hayamos-

—CÁLLATE

Hipo se rio entre dientes solo para tomar tu espalda con sus manos y sonreirte con ternura.

—Es lindo que cuentes mis pecas porque yo también cuento tus lunares...

—¿Cuántos lunares tengo?

—Uh... Ok, mentí, nunca he contado tus lunares... Solo quería hacerme el interesante—admitió acercando un poco su rostro al tuyo, instintivamente cerraste los ojos—Me encantaría que te vieras a través de mis ojos

—¿Para qué o qué?

—Para que entiendas por qué te amo

Antes de que pudieras responder, Hipo llegó a besar tus labios con suavidad.

El contrario tomaba tu espalda con su mano derecha y con su mano izquierda te tomaba la mejilla derecha con suavidad dejando un par de dulces caricias en tu rostro mientras te daba aquel beso que hacía que tu corazón se derritiera por la ternura.

Aunque claro... Esa ternura no podía durar mucho.

Sentías como lentamente las respiraciones de ambos se volvían más pesadas y lentas, además de que lentamente la mano izquierda de Hipo comenzó a pasar de tu mejilla a tu pecho.

Aún cuando la demanda de aire se hizo presente, solamente pudieron separarse durante un par de segundos antes de volver a unir sus labios en un beso cada vez más profundo y lento, a veces Hipo se daba la libertad de explorar tu boca con su lengua o de dejarte una que otra mordida suave.

Llevaste tus manos al pecho del contrario, pero rápidamente tus muñecas fueron aprisionadas por la mano izquierda de Hipo, obligandote a relajarlas y a soltar el lápiz que anteriormente habías usado para contar las pecas de tu novio.

—Hipo...—lo llamaste entre suspiros cuando pudiste separarte de él unos segundos.

—Shh... No hagas ruido—pidió mientras besaba tus mejillas y lentamente bajaba sus labios a tu cuello para dejar besos húmedos y calientes en este.

El límite llegó cuando te mordió y succionó gentilmente la piel del cuello, dejandote un chupetón en este como si quisiera decir "este chico es mío ahora".

Antes de que Hipo pudiera hacer algo más, lograste zafar tus muñecas del agarre del contrario y empujarlo para alejarte.

—¡O-Oye, no!

—ay, vamos... Mi mamá no volverá hasta dentro de un buen rato

—¡Pero hay miles de dragones aquí que van a escuchar aunque nos alejemos del santuario!

—Entonces seremos silenciosos

—Ambos sabemos que no puedo guardar silencio aunque quiera

—Pero-

—NO

Tomaste tu lápiz que había caído al lado de ambos y luego te levantaste, Hipo se levantó mientras se reía en voz baja.

—¿¡DE QUÉ TE RÍES!?

—Nada, nada

Guardaste el lápiz y te echaste a caminar, pero mientras caminabas sentiste como Hipo te abrazaba por la espalda dejandote completamente preso de la cárcel de sus brazos.

—¡Sueltame!

—¿Ahora no puedo abrazarte?

—Ay ajá... Tarado, ¿qué va a decir la señora Valka cuando vea el chupetón?, ¿no pudiste dejarlo en un lugar menos obvio?

—No te preocupes por ella, seguro no cuestiona nada

—¿¡Y qué tal si-!?

—No, nadie se va a morir solo porque te dejé una pequeña marca en el cuello—se adelantó el contrario mientras se reía.

Después de eso, acurrucó su rostro en tu hombro aún manteniendo el abrazo.
Pronto no te quedó de otra más que rendirte y dejar de luchar permitiendo que Hipo se quedara acurrucado en tu hombro mientras te abrazaba.

No ibas a negarlo, si se te diera la oportunidad de dormirte ahora mismo en los brazos del chico, ibas a tomarla.

Si pudieras quedarte de esa manera para siempre, lo harías...
Pero claro, seguramente así sería porque a final de cuentas, él ya te había presentado como su futuro esposo... Tenías la seguridad de que él te amaba tanto como tú a él.

Era como estar en casa... Bueno, en realidad, cualquier lugar podría ser una casa mientras él estuviese cerca.

♡o。.(✿ฺ。✿ฺ)♡o。.(✿ฺ。✿ฺ)♡o。.(✿ฺ。✿ฺ)

➴ Tenías que ser tú ➶Donde viven las historias. Descúbrelo ahora