Finge que me quieres

Capítulo 1.- Corazón roto.

Summer.

Jugué con el móvil en la mano mientras esperaba que llegara Nikolai. Hace dos semanas nos habíamos besado y me sentía incomoda tanto como avergonzada por haberlo besado con tantas ansias.

Pero bueno, realmente no podía hacer nada. Llevaba enamorada de Nikolai desde que tengo memoria.

Cruce mis piernas mientras llevaba la taza de café a mis labios, le di un sorbó mientras miraba a todos lados, él llegaba demasiado tarde. Mire mi móvil y entre a mis redes sociales y de inmediato noté como Elsie Taylor había subido recientemente una fotografía, era ella junto al cantante Jayce Mason. Elsie era una modelo pelirroja ella era preciosísima, debía de admitirlo.

Y ella era exnovia del mismísimo Nikolai Larsen, de quién dolorosamente me di cuenta que él sigue enamorado de ella.

Observé la publicación ella mostraba un anillo de diamantes, estaba comprometida con Jayce, él le había pedido matrimonio frente la torre eiffel. Debía de admitir que eso es demasiado cliché y nada original. 

Tan solo pensé en como se sentiría el pobre de Nikolai al ver esa publicación.

—Siento llegar un poco tarde. —Él habló mientras se sentaba enfrente de mí, dejé el móvil y lo observé, se quitó los lentes del sol y su aroma se extender por todo el lugar.

—No te preocupes —Le respondí, debía de admitir que me sentía demasiado nerviosa al tenerlo frente a mí.

—Estas tensa. —Dijo mientras me observaba.

—Claro que no.

—Summer..

—¿Mhm?

—Quiero disculparme por lo del beso, debo de admitir que fue un impulso, sería incapaz de besarte eres la mejor amiga de Ginger y siempre te he visto como una hermana pequeña, siento si te incomode con el beso.

Me obligue a sonreír al escuchar sus palabras, una hermana pequeña para él, eso era tan ridículo.

—Claro, estaba consciente que eso fue un impulso, ambos estábamos un poco tomados. —Me justifique.

—Veo que lo entiendes, necesitábamos aclarar esto, no quería que hubiera un malentendido para así poder seguir siendo tan amigos como siempre.

—Claro, todo a quedado aclarado.

—Bien, me alegra escuchar eso.

Asentí viendolo, él lamió sus labios mientras observaba como llevaba la taza de café a mis labios.

—Debo de irme, Summer. Gracias por venir.

—Hasta luego, Nikolai.

Nikolai se iba a acercar a mi para despedirse, estuvo apunto de besar mi mejilla pero lo pensó mejor porque se alejo de mi por completo.

Al instante que él se fue respire tratando de quitar el nudo en mi garganta. Entendía que el quería que olvidaramos lo que sucedió, pero también me dolía la forma tan indiferente que se portó conmigo, después de que siempre nos habíamos llevado tan bien.