Capítulo veintiocho.- El futuro.

11.2K 594 45
                                    

Summer

—¿Estás bien? —El me miró de reojo mientras me sonreía.

—Estoy un poco nerviosa.

—Dijiste que estabas segura.

—Sí, lo estoy. Pero estoy nerviosa. ¿Que tal y si tus fans me odian?

—¿Odiarte? Lo dudo mucho, Evangeline. Ellas te amaran.

—¿Estás seguro?

—Sí. ¿Porque podrían odiarte?

—¿Porqué estoy contigo? —Alcé una ceja y escuché su risa ronca haciéndome eco en el oído.

—Eso no tiene nada que ver,  estoy haciendo que ellas entren a mi vida privada, contándole sobre nosotros.

—¿Tu estás seguro de hacer eso? —Le pregunté

—Claro, sinceramente ya es hora de que conozcan a la persona que me robó el corazón.

—Vamos. —Le dije, él apretó mi mano y beso mi mejilla.

—Sólo relájate.

—Esta bien.

Entramos al set de grabación mientras suspiraba.

—Vamos, allá está Gia.

Asentí mientras caminábamos hasta ella, ella sonrió viéndonos

—Hola. —Saludé.

—Hola, tu debes ser Summer, verdad? —Asentí

—Es un placer conocerte—Ella se acercó a mí y me abrazo, me sorprendí— Soy Gia, la manager de este muchacho. 

—Mucho gusto. —Respondí.

—Entremos, Kerene nos está esperando.
Suspiré, y Nikolai besó mi sien. Bien, ya no podía arrepentirme.

Tenía que mantenerme tranquila ya era muy tarde para arrepentirme.

El estudio de grabación era muy lujoso que me hizo pensar que tal vez venía muy simple para la entrevista. Mientras más nos adentrabamos observé como se encontraban dos lujosos sofás y una mesa de cristal, un periodista se encontraba verificando que todo se encontrará perfectamente para al momento de salir al aire.

—Hola —Se acercó una chica pelinegra mientras nos sonreía —Me imagino que tú eres Summer —Asentí—Es un placer tenerte aquí, junto a Nikolai. Soy Kerene.

—Un gusto. —Murmuré.

—Estaremos en el aire en unos minutos.

—Creo que podría vomitar en cualquier instante.

—Estás demasiado pálida, trata de respirar.

—Estoy nerviosa.

—Ven, vamos a tomar aire.

Él tomo mi mano mientras nos alejábamos y salíamos a un pequeño balcón, inhale y exhale.
Tomo mi cara entre sus manos mientras trataba de que me mantuviera relajada.

—Te quiero, no quiero que lo olvides.
Sonreí.

—Yo también te quiero. —Susurré, sus labios se encontraron con los míos dejando una pequeña presión, me abrazo sintiendo como nuestros pechos se sincronozaban, mi corazón estaba latiendo tan fuerte y él de él igual.

—Deberíamos de regresar

—Tienes razón.

—Vamos. —Me tomo de la mano mientras entrabamos nuevamente.

Finge que me quieres Donde viven las historias. Descúbrelo ahora