Abrumado por la fama, Joseph Quinn, quien dio vida al entrañable Eddie Munson en Stranger Things, vuelve a su barrio de la infancia en su querido Londres, lugar en el cual, viven sus mejores amigos, que de una u otra forma, lo llevan a meterse en en...
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Narra Sloane:
Estaba con Ellie en la sala de estar. Ellie trabajaba desde su computadora, y yo solo leía una revista. Estaba sin trabajo y necesitaba encontrar algo; quizás podía leer sobre algún empleo en el pueblo, aunque eso podía tomar un poco de tiempo. No sabía realmente si quería dedicarme para siempre a ser profesora o seguir estudiando en la universidad.
Mamá llegó casi corriendo a la sala de estar donde nos encontrábamos con Ellie, sus ojos estaban grandes y bastante nerviosa.
— ¿Pasa algo, mamá? —cerré la revista y miré a Ellie.
— Hay un auto afuera de la casa —habló nerviosa, y yo no dejé que terminara su frase.
— Mierda, de seguro es Chris —puse mis ojos en blanco, ya podía adivinar las intenciones de mi ex novio, que podía seguir con planes de acosarme.
— Sloane, estoy segura que es ese chico Joseph... es un coche negro — mamá estaba un poco emocionada, aunque no lo conocía, le conté algunas cosas entre nosotros, le aclaré sobre algunas cosas que encontró en internet y al menos ya no tenía esa idea de que era un chico indecente— Y él ya ha tocado el timbre, tiene cabello claro, es muy pálido y de labios rosados. Es un chico guapo.
— Mierda — miré a Ellie y ella pegó un grito de alegría.
— No puede ser... ¡Joe ha venido por ti! — gritó emocionada — Ahora vas a salir y hablarás con él.
— Demonios, no sé si quiero, estoy muy nerviosa — me puse pálida y caminé hacia un espejo que teníamos colgado en una pared, revisé mi piel, mi pelo, mis ojos, mis labios y mi ropa— ¿Estoy bien? — pregunté a ambas y ellas asintieron. Daba gracias que mi padre no estaba en casa, no quería que saliera con una escopeta disparando a Joseph.
— Sólo ve, pasará lo tenga que pasar — Ellie tomó mi mano y yo cerré mis ojos para comenzar a caminar más que nerviosa. Llegué hasta la puerta y la abrí, tenía mis ojos cerrados, estaba con mi corazón latiendo como nunca, aquello se sentía tan extraño. Esa persona a la que veías constantemente, ahora te generaba otras emociones al verlo.
Cuando mis ojos se abrieron, me encontré nuevamente con Joseph, con su cabello desordenado, su piel perfectamente pálida, sus ojos oscuros, su nariz fina y sus labios delgados, pero bien definidos.
— Joseph... ¿Cómo has llegado hasta acá? — me sorprendió el hecho de que hubiera llegado por cuenta propia. Tenía su brazo derecho escondido tras su espalda, cuando me vio sonrió y se acercó a mí.
— Chris me dijo donde vivías... él me recomendó hacer esto — Tras su espalda salió un ramo de lirios y me miró con tristeza, yo vi aquello y no podía creer lo que estaba ocurriendo— Sloane, no puedo vivir sin ti, yo lo siento tanto. Sé que me odias, he bajado de peso, porque no puedo retomar mi jodida vida sin ti. Recibí una visita de Chris, él me dijo que todos deberíamos reiniciar. Y sabes... quizás tiene razón, yo necesito reiniciarme, pero contigo.
