Secuelas

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Después de la trágica pero exitosa misión en la nave imperial, el Bad Batch y Las Anclas regresaron a Pabu. Las chicas, expectantes, observaron con asombro el hermoso planeta al cual estaban ingresando.

—Es... hermoso. —Murmuró Gigi, genuinamente asombrada.

—Aquí estarán a salvo. —Les aseguró Hunter.

La brisa suave del planeta acariciaba el lugar, y el sol pintaba el cielo con tonalidades suaves mientras el saqueador descendía en la zona de aterrizaje.

Shep, con su característica sonrisa amistosa, se adelantó para dar la bienvenida.

—¡Muchachos! que agradable es tenerlos de vuelta. —Dijo, gustoso de verlos. —¿Tienen noticias sobre la misión?

—Solo podemos decir... —Comenzó Hunter.

—Misión cumplida. —Completó Wrecker.

—¡Urra! Eso quiere decir que estamos y estaremos a salvo, esto requiere una celebración.

Phee, llegando con su actitud relajada pero atenta, se unió al recibimiento. 

—Veo que llegaron con excelentes noticias... y con compañía.

Shep volteó a ver lo que Phee estaba visualizando, y en efecto, pudo ver a las chicas bajar también del saqueador.

—Oh vaya. —En seguida, dirigió su mirada a Hunter.

—Vienen con nosotros, trabajamos en equipo para lograrlo, sin ellas... no hubiese sido posible. —Volteó a continuación a ver a Anika, quien le devolvió una tierna sonrisa. —Ellas también necesitan refugio, si es posible aquí y no les genera molestia...

—¡Para nada! Chicas, bienvenidas a Pabu. Aquí podrán comenzar de cero y quedarse cuanto quieran, si así lo desean. 

—Que amable. —Dijo Anika, sonriente. —Me presento, mi nombre es Anika, ellas con, Robbie, Jojo, Gigi y Soph... —Se detuvo, a punto de nombrar a su amiga, quien claramente ya no las acompañaba más.

—Sophie, ella se sacrificó por esta misión. Pertenecía al escuadrón de Anika. —Le comentó Hunter a Shep.

—Lamento tanto escucharlo.

La lider agradeció con una sonrisa forzada. —Gracias, Shep. Las cosas no salieron como esperábamos, pero apreciamos su apoyo.

Shep guió al grupo hacia el poblado, ofreciendo palabras de ánimo en el camino. —Entiendo que necesitarán tiempo para recuperarse. Pueden usar las instalaciones, descansar y, si hay algo que necesiten, no duden en decírnoslo.

Phee asintió, agregando: —Estamos aquí para lo que necesiten. Pabu es un lugar seguro, y estamos felices de tener a valientes guerreras como ustedes formando parte de nuestra comunidad.

Las Anclas, aunque cansadas y afectadas por las recientes experiencias, sintieron un atisbo de alivio al ser recibidas con comprensión y solidaridad. Pabu se revelaba como un refugio donde podrían recobrar fuerzas y encontrar consuelo en medio de la adversidad.

Shep Hazard, al notar cierta conexión especial entre los miembros del Bad Batch con las chicas, ofreció amablemente sus servicios como oficiador de bodas. —Solo como comentario... si en algún momento alguno de ustedes decide sentar cabeza, estaré encantado de oficiar la ceremonia. Pabu también es un lugar de amor y unidad.

Las miradas se cruzaron entre los miembros del Bad Batch, y Echo dirigió su atención a Robbie. Un silencioso intercambio de sonrisas entre ambos indicaba que la idea de casarse no estaba lejos de sus pensamientos. Robbie, con un gesto afirmativo, asintió con la cabeza, expresando su acuerdo con la sugerencia de Shep. 

The Bad Batch, Amor mercenarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora