Recovering love [Christopher Morgan] ¡Pausada!

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-Es un imbécil-resopla mamá mientras caminamos por el parque y río-. De verdad, Hailey, ¿en qué momento se volvió un imbécil?

-Yo quiero saber lo mismo-Loren, mi sobrina de diecisiete años y de la que mi madre se está haciendo cargo, frunce el ceño-. A ver, recuerdo su boda y ustedes se veían tan enamorados. Ese hombre te veía como si quisiera darte la luna y las estrellas.

Y así fue. Hasta la campaña. La maldita campaña y el regreso de Gema.

Mi matrimonio con Christopher fue muy bueno, maravilloso. Amaba tanto verlo esforzarse por complacerme, amaba verlo celoso porque era demasiado gracioso y excitante... y ahora solo hay dolor.

Él nos descuidó. Gema no se metió entre nosotros de forma literal, solo fue una de las piedras que le agregó peso a la balanza y la inclinó hacia la candidatura.

No la odio por Christopher, sin duda que no. Solo... hay algo en ella que nunca me ha gustado, siento que finge ser amable y su necesidad de caerle bien a todos es ridícula.

-Pues ya no es así-tomo asiento en una de las bancas, asegurándome de que Makayla siga dormida antes de mirar a mi alrededor.

Los escoltas están ahí, no hay nada de que preocuparse. Pero desde que Christopher me recordó que le rinden cuentas no puedo dejar de preguntarme qué tanto le han dicho.

Dios.

»Comenzaré a trabajar la semana que viene-les hago saber a mi madre y sobrina-. Ocuparé el lugar de Thompson ahora que se fue a America. Makayla irá a la guardería, eso me tiene nerviosa.

Mamá ríe.

-Ella estará bien, es una buena niña-sonríe viendo a su nieta-. Es una niña dulce y todos la aman, estará bien.

-Sé que ella lo estará, estoy nerviosa por mi-muerdo mi labio y ella acaricia mi cabello negro como el suyo

La familia de mi madre es de Armenia, así que tengo ciertos rasgos suyos. Sobretodo cuando se trata de cabello, porque tengo cejas pobladas y pestañas también; la piel dorada es en cambio de la familia de mi padre, la parte materna, porque su madre era caribeña; su padre era asiático.

Es complicado, porque mi familia materna también es una mezcla extraña. Su familia paterna era de armenia, su familia materna de Grecia. ¿Cómo llegaron a conocerse? Igual que todos, en el ejército.

Si, mi familia está llena de militares. Es casi una tradición.

Bueno, más bien mi padre y la familia de mi madre eran de la milicia. Mi madre decidió ser modelo y quiso llevarme por el mismo camino.

Lo soy, pero no a tiempo completo. Y para nadie es un secreto que prefiero la milicia, la acción.

-Tú vas a estar bien-mamá besa mi sien-. Siempre lo estás, bebé.

Arrugo la nariz.

-No soy una bebé-resoplo y ella ríe abrazándome para apretarme contra ella

-Siempre serás la bebé de mami, no seas una llorona-se burla y ruedo los ojos-. En fin, tú vas a estar bien. Los primeros días son difíciles, pero luego será mejor.

Respiro profundo.

-Si, supongo.

-Yo opino-habla Loren-. Que desgreñemos a la loca que se dice llamar viceministra, ¿qué les parece la idea?

Reímos.

-Ya, no hablemos de esa mujer desagradable-mamá niega y apoya su mano en la rodilla de mi sobrina-. Tu tía es mucho más que eso, tú también. Nunca se rebajen a pelear por un hombre.

-Jamás-ambas negamos

Mi madre hizo de mamá y papá. De ambos desde que cumplí quince y mi padre nos abandonó. Y lo ha hecho de maravilla, es mejor de lo que cualquiera podría pedir.

-Bien, entonces quedémonos un rato aquí antes de tener que ir a cenar-mamá suspira negando y río

-También son familia de Makayla-le recuerdo-. No puedo simplemente alejarla, no sería justo con ella.

-Lo entiendo, pero tú y Christopher aún están en el proceso de divorcio y no creo que sea buena idea cenar con su familia.

-Estaremos bien.

***

-¿Cómo está mi muñequita?-Reece toma en sus brazos a Makayla mientras yo saludo a Alex, quien me da un corto abrazo. Makayla le chilla algo a Reece-. Así es, soy el guapo tío Reece. Que bueno que lo recuerdes-besa su mejilla y yo río

Sara entra al comedor con una bandeja y la deja sobre la mesa antes de acercarse a darme un enorme y cálido abrazo.

-Gracias por hacer esto, sé que no debe ser muy fácil-dice en mi oído y respiro profundo antes de apartarme

-Está bien, puedo con esto-le aseguro y ella me ofrece una cálida sonrisa antes de asentir-. ¿Regina no pudo venir?

-Viene con Christopher-me informa Alex y asiento-. De antemano me disculpo por cualquier comentario que pueda hacer. A ella... no le gusta la idea del divorcio.

-Ella no decide en este tema-aclaro y asiente-. Sin ofender, Alex, pero ninguno de ustedes lo hace. Entiendo que no sepan toda la historia y eso pero... quiero divorciarme, y lo haré.

-Lo sabemos-Reece pasa su brazo sobre mis hombros y me encamina a la mesa-. Sin embargo, Christopher es igual de cabezota que mi madre. Te harán la noche un poco difícil-acerca sus labios a mi oído-. Por eso recuerda que eres fuerte y puedes incluso con el mundo sobre tus hombros, hermosa.

-Lo sé.

Como si los hubiéramos invocado, Regina y Christopher entran. Ambos fijan sus ojos en mi y luego en la bebé.

Makayla de inmediato ve a Christopher y sus ojos brillan como el oro blanco mientras extiende sus manos pidiendo que la cargue.

Si, puede que estos meses Christopher no haya estado con ella pero yo le mostraba fotos de la familia y le repetía quien era cada uno para que los recordara.

-Regina-asiento en dirección a la mujer y tomo una copa de vino que trae Clo en una bandeja-. Es bueno verte, ¿qué tal Rusia?

-Igual que siempre, ¿qué tal brasil?-toma asiento y yo dejo que Reece se siente frente a ella para yo tomar asiento junto al médico

-Hermoso, me gustaría volver-veo a Christopher meter a Makayla en la sillita para que coma y entrecierro los ojos al verlo abrocharla sin problema alguno. «Al menos no se le ha olvidado»

-Si, seguro que te divertiste y conociste muchas personas allá-Regina bebe su vino mientras me mira y yo enarco una ceja

-Lo hice. Por supuesto.

Asiente.

-¿Sabes? Nunca te creí igual a Sara-me da una mirada lastimera-. Supongo que me equivoqué.

-¿Puedes culpar a Sara por dejar a un hombre que claramente no la valoraba?-mascullo-. ¿Puedes culparme a mi por dejar a Christopher cuando claramente ya no me amaba? No. No tienes ese derecho.

-Tengo el derecho de creer que esto es solo una faceta de ustedes dos-se encoge de hombros-. Volverán, ¿no es así?

-No-zanjo-. No volveremos, ¿sabes por qué? Porque no se me da la gana, y créeme cuando te digo, Regina que no defenderías tanto al hombre a tu lado si supieras toda la historia-levanto la mano y la callo cuando abre la boca-. Y no lo digo porque no es tu maldito problema, por eso ustedes no saben absolutamente nada. No quieran discutir conmigo y echarme la culpa, porque sin duda saldrán perdiendo.

-Respiremos-pide Reece-. El matrimonio de Christopher y Hailey no es nuestro problema. Christopher parece estar bien con el divorcio, no entiendo porqué hacen de esto un drama-mira a Christopher y él le lanza una mirada de muerte-. ¿O no lo estás, muñequito?

-Me voy-niego-. Cuando quieran comportarse como adultos, cenaremos. Mientras tanto-miro a Alex-, lleva a Makayla a mi casa cuando terminen. Con permiso.

Alex asiente y yo me encamino fuera del comedor, obligándome a pasar el trago amargo mientras lágrimas se acumulan en mis ojos.