Mentira Millonaria

Capítulo 8

¿Por qué te comprometerías con alguien que no conoces? Aun si era fingido, era muy pronto. Primer dia y Julian ya lo habia arruinado todo.

—¿Y... amor, ya tenemos fecha?— le sonrió Tessa de manera forzada y ojos acusadores

Julian a mas de estar preocupado o intimidado, solo respondió —Tu di el dia y yo me caso, Tessa

Ella vacilo. ¿Cómo podía hablarle con tanta informalidad y confianza? Habia algo entre ellos dos ahora, cierta intimidad entre ellos que antes no habia. Un nuevo lazo forjado.

—El anillo es hermoso —comento el chico rubio

Fue entonces cuando Tessa siguió la dirección de su mirada hasta su mano. No podía creerlo. Que tonta fue. Este era el plan desde un inicio. Julian puso las piezas, y ella solo cayo en el juego. Por eso le dio el anillo. Era la prueba de su "compromiso"

Vaya que Julian tendría mucho que explicar una vez salieran de allí. Si las condiciones habían cambiado, entonces ella también impondría sus propias reglas.

—Ya veo. Disculpe si he molestado a su pareja. Y lo felicito. Hacen una hermosa combinación. Y realmente estoy ansioso de cerrar los tratos que tenemos entre ambas empresas.

El asintió. -puedo decir lo mismo.

—En ese caso, será un placer ser socios

Julian coincidió.

—¿Mi amor, —murmuro el, y ella se tensó. No podía culparlo, ella fue la primera que uso aquel termino con el —me acompañas?

Tessa asintió

Nunca habia visto a Julian comportarse asi con alguien. Ni siquiera con ella. Este no era el Julian que conocía de la oficina.

Julian se despidió de aquel hombre.

Ella estaba dispuesta a empezar a reclamarle, pero no se habia dado cuenta que en realidad Julian se alejo fue porque otra mujer se estaba acercando a ellos dos. Era joven. Bastante joven. Y bastante hermosa.

—Lisa —saludo su jefe a la mujer

—Hijo mío— la palabra salía forzada y poco natural. Luego miro hacia Tessa con sus ojos despectivos —¿Quién es tu amiga? Muchos aquí han dicho que es tu novia. ¿Es eso cierto?

—No.

La mujer pareció relajar su postura antes tensa. Sus hombros bajaron —ya veo— rio —solo una aventura. Está bien. Eres joven, deberías divertirte

Tessa se indigno

Pero entonces —no. No. —la corto Julian—es que no me has dejado terminar de aclarártelo. Ella es Tessa, y es mi prometida

—¿Qué?— la mujer no pudo ocultar su asombro mientras recorría a Tessa de arriba abajo con la mirada—pero... ¿de qué familia es ella? Niña, —la llamo —dime tu apellido

—Tengo 24 años. —le aclaro Tessa incomoda y un poco molesta por el termino "niña"

—Dime tu apellido —exigió saber la caprichosa mujer

—Jhonnson— murmuro ella de mala gana

—Jhonnson—repitió la mujer y lo pensó —no recuerdo ninguna familia reconocida con ese apellido. ¿eres de la empresa de vino? Oh, oh... ya se, de la moda. Esa es...

—Disculpe, no tengo ninguna empresa.

—¿Cómo?— la mujer parecía no entenderlo

Fue Julian quien se interpuso —Ella no tiene empresas. Y su familia no es rica, ni reconocida.