Mentira Millonaria

Capítulo 68

La vida estando internado en un pabellón de hospital suele ser monótona. Aburrida. Las enfermeras suelen ser amables, y otras no tanto. James recordaba la época en la que necesitaba ayuda hasta para ir al baño. Era humillante. Pero pronto con los tratamientos pudo lograr ir al baño por si mismo. Antes no solía comer, ahora comía. No mucho, no en exceso, pero comía. No estaba en fase terminal. No. Tampoco se compadecía de si mismo, hay gente en peor estado de salud. Hay gente con pocos recursos, hay gente desesperada. Gente que solo está esperando la muerte.

Se metió en la cama y sintió a la enfermera brindarle lo que necesitaba en forma de inyección en el suero. Y tan pronto la suministro y le pregunto si se sentia bien, luego de el responder que si, se marcho.

Solo unos años más. Unos años más y saldría. Estaba seguro. Lo sentía en su cuerpo. En su corazón. Anhelaba la vida que perdió un día. Quizás ahora tenía que construir otra.

Cuando la puerta se abrió el sonrió al solo verla. -Tessa. -su hermana era todo su universo. La luz que este mundo no podía robarle. Bueno, ella y las series que seguía por cable. No se podían quedar inconclusas esas series. Después de todo, le frustraban la expectativa y la espera

-¿Por qué traen esas caras? Parecieran que han visto un fantasma. – luego miro a su hermana -¿estas bien?- pregunto preocupado

Tessa se relajó – normalmente soy yo quien te hago esa pregunta

-Supongo que esta bien que a veces sea yo quien te cuide -su semblante se relajo suavemente. Así era James. Un hombre de expresión fina y delicada. Una belleza intacta, un semblante limpio, un rostro sereno. -¿Qué sucede?- pregunta y sus ojos miles lucen un poco desconcertados

Ella se relaja y suelta el aire que no sabia que estaba conteniendo -estas bien...- murmura con un alivio que conmovería a cualquiera, y entonces lo abraza. Vulnerable. Porque su corazón palpitaba en el suyo.

James ve a la chica de entre sus brazos mas confundido que antes, entonces alza la vista en busca de Julian para que él le de respuestas

Julian le asiente y dice -te invito a sentarte. Esta será una conversación un poco larga

A James no le agrada lo que sea que estuviera por venir.

El arrastra a su hermana consigo hasta el colchón. -se ven preocupados

-Lo estamos. - concuerda el muchacho

-Adam... o ¿Charlie?- pues el aun no es capaz de reconocerlos

-El segundo- dice sin mucha importancia mientras desvía su vista a otro lado. Al mirarlos Charlie se sentía como si estuviera entrometiéndose en algo muy íntimo. El no era parte de esto. El no había tenido una familia desde hace mucho tiempo.

James analizo al chico arrimado en el muro de la pared. -¿el no era a quien ustedes odiaban?-inquiere

-No es el momento- apunto el empresario millonario -han pasado muchas cosas estos días. Y al parecer a ti también te pasaron

-¿Qué quieres decir?

-Has recibido una visita el día de hoy- apunta el

Y James da un respingo, ¿Cómo lo sabían?

-¿Por qué no me lo has dicho?- le pregunta Tessa esta vez ya mirándolo -¿Por qué no me llamaste al instante?

El se encoge de hombros – no pensé que fuera algo que les incumbiera a todos ustedes. Es decir... es algo personal

-¿Personal?-ella no lo entiende -¿te ha ofrecido algo esa mujer?

-Bueno... solo vino a hablar conmigo. Supongo que algo de deuda siente...