Mentira Millonaria

Capítulo 69

Al llegar a casa ambos han permanecido callados todo el trayecto. Julian había estado pensando en que palabras decir antes de hundir algo que claramente luchaba por seguir flotando.

Por el contrario, Tessa estaba a punto de explotar. Sabia las intenciones de Julian. En un pasado el hubiera dado lo que fuera por tener una información como esa. Después de todo, durante años solo deseo destruirla. Consumido por su rencor y el deseo de venganza. Pero ahora... ahora el debía entender que esto no se trataba de ellos. Sino de James. Si en algún momento Lisa lo descubría era su carta perfecta para llevar la fiesta en paz.

Cuando ella salió del auto Julian la seguía por detrás.

Entro a la habitación que ambos compartían mientras Julian se quedaba a medio camino. Ella asumía que el a lo mejor iba a la cocina por algo, o algo parecido.

Se cambio sin siquiera bañarse. No estaba de animo para nada. Y tenia mucho en que pensar.

Cuando estuvo sentada en la cama espero a que su jefe llegara. O bueno, su esposo. ¿con cual de los dos papeles debía desempañarse para discutir esta situación?

El joven de ojos azules entro pronto. Le dio la espalda mientras se dirigía al armario

-¿Quieres decirme algo?- le pregunto ella

Julian paro lo que estaba haciendo. Ya se había sacado su camiseta, pero aun tenia puesto su pantalón. -no realmente. Todo ha quedado muy claro

-¿Me resientes?- le pegunto

-No. -contesto calmado -entiendo tus razones

-Pero no las compartes -ataco ella

-Yo no estoy haciendo una guerra de esto -aclaro el rápidamente. Y suspiro – y si, pienso que te equivocas. Siente que no es momento de quedarnos de brazos cruzados, creo que es momento de atacar. Pero, aun así, no hare nada que en lo que tu no estes de acuerdo. No deseo pelear contigo

-Yo no quiero que tu hagas algo que no quieras solo para complacerme a mi

-¿Y que es lo que prefieres?- le pregunta

-No lo se. -admite -Me frustra que no digas tu verdad. Que no sientas. Que no reacciones. Deberías estar furioso conmigo.

-Ya te lo dije, no deseo discutir contigo. Pareciera que tú quieres pelear.

-No quiero que seas una maquina Julian. Quiero que seas capaz de desahogarte conmigo. Siente que a lo mejor no hablas porque me tienes miedo.

-No tengo ningún tipo de miedo. Solo que he entendido poco a poco que esto del amor, de ser una pareja, en cierto sentido se trata de ceder

-Hablas de rendirte

-No. No rendirse. Pero poniéndolo en una balanza me es más fácil aceptarlo que pasar una hora, o días, o años discutiendo por algo que podía solucionarlo yo en segundos.

-Sabes el porqué lo hago...

Entonces Julian se acerca hasta la cama y se siente a su lado -Se que tu hermano merece eso.

-No quiero que te sientas que lo elijo a el antes que a tus intereses... pero... solo no quiero arrastrarlo a todo esto. No sería justo para el. La vida ya le ha sido difícil, no puedo ser yo la razón por la que se la hagan aún más.

-Me siento mas furioso que antes- confiesa Julian – pero no contigo. Me acabo de enterar que esa mujer nos vio la cara a todos. A mí. A mi padre. Se burlo de nosotros. Nunca nos tomamos la molestia de averiguar más allá su origen de nacimiento. O si hubo tal invetsigacion por parte de mi padre, al parecer se oculto muy bien. Porque jamas ha salido a la luz algo como eso. No es mas que una suplantadora de identidad.

-Bueno... hizo lo mismo que yo...

Eso llama su atencion, y Julian la mira detenidamente -no. Eso no es lo mismo -dijo – ella lo hizo para escalar y obtener dinero, fama, la vida solucionada. Tu, -su mirada se ablanda -tu solo querías salvar a tu hermano. E incluso quisiste desligarte de todo. Quisiste huir de mí. Yo fui quien te retuvo.

Tessa asiente

-Sabes, ahora el que siente culpa soy yo. Quizás solo debí dejarte libre y ayudarte aparte. No estarías sufriendo ni metida en nada de esto. Mi vida ya era complicada, y todo ha recaído en tu familia.

-¿A estas alturas te planteas eso?-inquiere- ¿quieres dejarme ahora?

Julian se inclina un poco hacia ella -Tessa, yo jamás te dejaría ir ahora.

Ella enmudece y tiene los ojos muy abiertos observándolo. Sintiéndose rara e inadecuada. Nerviosa. Su corazón deteniéndose unos mili segundos por el panorama de su rostro.

Tessa desvía la vista de el hacia el suelo casi avergonzada.

-¿Quieres pelear?

¿Qué?

Ahora ella si que regresa a verlo casi estupefacta -no. No.... Claro que no...

-Es como si quisieras que lo hiciéramos.

Ella hace una mueca extraña – bueno, sí. Es verdad en algo. Quería que me reclamaras. Quería que me gritaras. Que te desahogaras. No lo sé... algo. Solo quería que te vaciaras por dentro. Que cualquier odio que pudieras sentir no te lo guardaras en el interior. ¿Qué harías tu en mi lugar?

-No soy objetivo, Tessa- suelta impavido – Yo ya hubiera puesto en marcha todo un plan maestro. Lisa ya estaría mas que fuera del tablero. Pero, me aseguraría de que mi hermano estuviera bien. Tu estas eligiendo a uno. Yo, -la miro – yo elegiría a los dos

-No puedes tenerlo todo Julian -Tessa suspira -los riesgos son muchos. Hay gente que se arriesga y pierde. Y si, hay otros que ganan. ¿Pero lo vale?

Él lo piensa – Tal vez lo vale. -dice

Y eso es todo lo que dice.

Tessa se levanta de la cama algo decepcionada, y sale de la habitación. No se iba. Solo daría un paseo. Despegaría la mente. Ya lo había hecho antes. Julian sabia lo mucho que le gustaba dar paseos nocturnos por los jardines. Y siempre se lo había permitido.

Salió de la mansión sin siquiera un abrigo. Pero, casi sin darse cuenta se estaba retirando del territorio de la gran familia Anderson. No se habia dirigido al jardin. Sino que en cambio habia cruzado las enormes puertas delanteras de la casa

Y si, fue a un parque público. Era un parque muy popular. Aunque cualquier lugar es peligroso a altas horas de la noche por mas concurrido que este. Pero... ¿Quien iba a robarle a ella ahora? Estaba en pijamas. Seria ridiculo.

Camino por unos cortos minutos y luego se acerco hasta el lago congelado deteniendose alli para observarlo brevemente No estaba cayendo nieve hoy, pero quizás pronto lo haría. El aire se sentía igual de pesado. Tenia sus labios fríos, y su piel palida.

Entonces la voz del chico a sus espaldas la hace girar

-¿Tessa?-llamo

Ella voltea y lo observa, esperando ver unos ojos azules en su lugar. Pero no.

Es Taylor White....

Con sus ojos claros viéndola fijamente de pies a cabeza.