Roier
Me encontraba trabajando junto con Jaiden. Nos habíamos vuelto completamente inseparables; éramos como... como uña y mugre. Nuestra amistad había crecido mucho en los últimos seis meses. Pasábamos tanto tiempo juntos que me sentía como su confidente. A veces, cuando la veía un poco melancólica, me contaba cosas profundas, como la vez que decidió ser asexual. Recuerdo esos días en los que ella no estaba bien, y me aseguraba de estar a su lado, de hacerla sentir apoyada. Me importaba muchísimo.
Era fin de semana, esos días que menos nos gustaban tanto a Jaiden como a mí. Entre semana estábamos ocupados cuidando a Tilin, la pequeña de Luzu y Quackity. Los dos se habían tomado un tiempo para "reencontrarse", según lo que me contó Quackity. Me habló en confianza de que las cosas en su relación no estaban siendo las mismas, y eso les había llevado a pedirnos que cuidáramos de Tilin durante un tiempo.
—Tú te llevas a toda madre con ella, Roier, por favor —me dijo Quackity, tomando mis manos con una expresión suplicante en el rostro.
—¿Y por qué adoptaron a Tilin si no estaban listos todavía? —le respondí, arqueando una ceja.
—Estamos listos, pero... —chasqueó la lengua, nervioso— Luzu no quiere hacer nada porque dice que podríamos despertarla.
—No mames, Quackity, pinche calenturiento —solté una carcajada, incapaz de contenerme—. Está bien pendejo. No te preocupes, yo cuido de ella. La mocosilla me cae bien —dije mientras lo rodeaba con mis brazos, dándole un apretón fuerte para tranquilizarlo.
Nunca imaginamos que nos encariñaríamos tan rápido con Tilin. Para cuando Quackity y Luzu regresaron, ya nos habíamos ofrecido a cuidar de la pequeña entre semana, y ellos aceptaron. Aunque Luzu no parecía del todo convencido, se dejó llevar por Quackity, como siempre. Los fines de semana, Tilin volvía con sus padres, y entonces Jaiden y yo nos quedábamos solos, sin mucho que hacer.
—¿Qué haremos hoy, Jaiden? No tengo ganas de hacer nada —le dije mientras terminaba mi almuerzo.
—Roier... I don't have any idea —respondió, dejando escapar un largo suspiro, claramente tan desganada como yo.
Me sentía extraño esos fines de semana sin la pequeña. Cuidar de ella había sacado un lado de mí que no conocía, uno paternal, protector. Hasta el punto que comenzaba a extrañar verla corriendo por la casa. Jaiden también lo sentía, lo sabía, porque últimamente siempre tenía una sonrisa en su rostro cuando estábamos con Tilin, pero los fines de semana su energía cambiaba, se apagaba un poco.
—Roier, te voy a preguntar esto solo una vez —dijo Jaiden, enderezándose en su silla, con el rostro serio—. ¿Te gustaría tener hijos... con una pareja o...?
La interrumpí, sorprendido por la dirección de la conversación.
—¿Estás sugiriendo lo que estoy pensando, Jaiden? —me reincorporé, apoyando mi mentón sobre mis manos, curioso por lo que estaba tratando de decirme.
—No... ¿sí? Olvídalo, Roier —se levantó de la mesa, nerviosa, pero la detuve antes de que pudiera irse.
—¿Hay un centro de adopción aquí, no? —le pregunté. Vi cómo sus ojos se iluminaron de inmediato y su sonrisa apareció. Definitivamente estábamos pensando lo mismo.
—Perdón, no quiero presionarte, Roier, es solo que... me encanta sentir ese lado de mí. Pero no quiero que mi pequeño o pequeña sienta esta relación... extraña —dijo, volviendo a sentarse y frotándose los ojos, que empezaban a llenarse de lágrimas.
![](https://img.wattpad.com/cover/292244823-288-k588709.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Lawyers - Guapoduo
RomanceRoier un recién graduado de las mejores universidades de derecho decidido en emprender un viaje a una isla con el fin de iniciar una nueva vida. Cellbit uno de los mejores abogados en el buffet llamado "La Federación" se va a vivir a la Isla que le...