Capítulo 54 Estatua de mármol

20 4 0
                                    



- Mike síguelos, seguro irán al aeropuerto, averigua a donde van

- De acuerdo, los esperaré en la recepción y los seguiré con cautela

- Gracias Mike

- Andrew, ten

- Qué es esto?

- Es el número de teléfono al que ella llamó esta mañana

- ...?

- Ya sabes, soy bueno memorizando números, jejeje, mira el número

- ...! Es el código postal de...

- Así es amigo, ella volvió a casa y si no estoy mal, vive en nuestra misma ciudad

- ...! Realmente lo crees?

- Sí, pero lo confirmaré en el aeropuerto, te llamaré en cuanto sepa algo

- Gracias hermano, no sabes lo que significa para mí

- Claro que lo sé

Una hora después los dos hombres entregaban sus llaves en la recepción y salían del hotel, y Mike, tras ellos. Mientras tanto en el avión donde Melanie viajaba, una adormilada pequeña se despertaba.

- Mami...

- Que pasa cariño?

- Dónde etamos?

- En un avión

- Aronde mamos?

- De vuelta a casa, cielo

- Pelo papá etá ahí!

- ...! No... quieres ver a tu papá?

- No

- Por qué no mi ángel? Es tu papá y es bueno contigo

- Pelo e malo cotigo

- Amelia

- Te hace sangar mucho cuanro se enoa y te glita muy peo y lo orio

- ...!

- No lloles, mami, pedóname... toy como papá

- Qué dices mi amor

- Tabién te hago llolar

- No mi amor, lloro por que soy una tonta

- No eles tota mami, no lloles, eles tan monita y papá es peo y malo

- Mi amor, yo te amo tanto Amelia, eres todo lo que necesito para ser feliz, bebé

- Etoces, no vovamos con papá

- ... Te prometo que las cosas serán diferentes, no se cómo, pero haré que todo sea mejor... ahora duerme un poco más y te prometo que no lloraré

- Ti mamá

- Ok. Déjame acomodarte mejor para que descanses, pronto llegaremos

Melanie quería morirse, le había mentido a su hija pero no tenía otra opción, y se aguantó las ganas de llorar para no verla preocupada, Amelia tenía dos años y siete meses, pero era una niña muy inteligente y se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor y aunque era verdad que su padre nunca le había hecho daño, era consciente de que sí lastimaba a su mamá.

Si me dices que me amas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora