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Kirishima cada tarde iba a comer con Bakugou, sentía que eran épocas en las que eran amigos. Recordando que cada que alguno de los 2 se enamoraba, se acompañaban para estar con la persona que les gustaba.

El alfa se sentía muy apenado, ya que en la tarde se volvía a encontrar al omega en la mansión de su amigo y allí platicaban normal. Cosa que en el negocio de comida no lo hacían.

La relación entre Shinso y Denki iba mal en peor, los celos estaban más fuertes que antes, sus peleas duraban días, estaba tan harto que aquella situación. Por las noches se la pasaba llorando y al llegar al campus su amiga lo terminaba regañando.

Ese día se encontraba en la biblioteca buscando un libro que ocuparía en la siguiente clase, su amiga estaba con su novio, así que se encontraba solo.

En eso sintió que alguien rodeó su cadera, aquellas manos las reconoció, se giró para quedar enfrente de Shinso.

—Aquí estás.

Kaminari no dijo nada, se encontraba molesto. Abrazaba el libro que tomó del estante.

—No estes molesto. Es más, venía a invitarte a una cita.

—¿Una cita?

—Este fin de semana ¿aceptas?

El omega asintió con un movimiento de cabeza. Esta sería una oportunidad para arreglar las diferencias que tenían últimamente.

Realmente se sentía triste al estar peleando con su novio a cada rato.

—Por cierto, también me invitaron a una fiesta ¿te gustaría acompañarme?

—Me encantaría.

En todo ese transcurso de la semana, quería que el fin de semana llegara pronto, quería pasar más tiempo con su novio con la esperanza de que se arreglara todo.

Lo que no sabía que es Shinso tenía un plan.

El fin de semana llegó y se alistó con una playera media gris y una chaqueta roja con unos jeans. Estaba tan emocionado por su cita.

Espero a que su novio pasara por él.

Primero lo llevo a almorzar a una cafetería. Estuvieron platicando de cosas triviales, de cómo les fue en esa semana. Kaminari era el que más platicaba ya que Shinso solo estaba pegado al celular.

El omega se sentía triste, la falta de interés por parte de su novio no le agradaba mucho. Pero aún así siguió platicándole.

Después de ahí fueron al cine, Kaminari eligió la película y compraron palomitas. Pero Shinso seguía igual, en toda la película se la pasó pegado al celular. El único que disfruto de la función fue el omega.

Después de allí fueron a un negocio para comer hamburguesas, de nuevo Kaminari hablaba y hablaba, pero por parte de Shinso seguía igual. Kaminari pidió helado de postre, en lo que su novio seguía pegado al teléfono, tomó una cucharada y lo fue acercando poco a poco hacia él simulando un avión.

—Abre la boca.

Aquella acción llamó la atención del alfa, pero solo lo miró con disgusto y se alejó antes de que la cuchara estuviera cerca de él.

—No seas infantil. Compórtate—se escuchaba molesto.

—Lo siento.

El alfa solo rodó los ojos y de nuevo regresó su vista hacia la pantalla de su teléfono. El omega se encogió en su asiento mientras se metía aquella cucharada de helado a la boca.

Quería llorar.

Se sentía un completo tonto.

Pensó que las cosas con su novio iban a mejorar con aquella "cita" pero no, las cosas seguían iguales o hasta peor.

Segunda Oportunidad Al AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora