Narra Akane:
Había empezado a despertar y mis ojos comenzaron a abrirse.
Mi cabeza estaba posada en el pecho de Tou mientras que Kazuki y Akemi dormían tranquilamente al lado de nosotros.
Qué significaba esto?... Acaso estaba soñando?... Mis ojos no podían evitar sentirse llorosos, sobe mis párpados para intentar despertar, incluso peñizque mi mejilla pero solo termine quejándome por el dolor.
Lo que mis ojos veían no era un error
Era Tou... Mi Tou...
Acaricie su mejilla intentando otra vez comprobar que mi cabeza no me esté jugando una broma pero todo era real.
Entonces sus ojos turquesa comenzaron a abrirse lentamente encontrándose con los míos.
Podía sentir su mirada fija como si pudiera ver todo através de mi. No era necesario hablar para que supiera que es lo que pensaba.
Me abrazo más fuerte como si su vida dependiera de mi y escondió su rostro en el espacio entre mi cuello y hombro.
Dabi: Haaa... Extrañaba mucho esto- dijo mientras acurrucaba su rostro, no podía evitar sentir algo de cosquillas por la acción.
Enrede mis dedos en su cabello el cual ahora era totalmente blanco y correspondi a su abrazo.
Akane: Volviste...- dije sonriendo mientras sentía caer unas pequeñas lágrimas por mis mejillas.
Dabi: Perdón por tardar tanto- Dijo mientras con una mano sostenía mi cintura para acercarme más a él y con su otra mano acariciaba mi cabello delicadamente.
Akane: Todo está... No! Espera! Qué haces aquí?! Es peligroso! Los héroes podrían atraparte!- dije separándome tomando sus dos mejillas haciendo que me mire- Tus... Quemaduras...- susurré con un poco de sorpresa y tristeza al ver que algunas se habían hecho más fuertes.
Dabi: Te asustan?- preguntó a lo que negué y comencé a acariciar con cuidado las partes que se habían sobre quemado.
Akane: Se que eres inmune al dolor... Pero... Aún así no puedes dejar de preocuparme- dije acariciando su mejilla.
El me miró por un rato y suspiro rendido.
Dabi: Bien, Tu ganas. No lo volveré a hacer- entrecerre mis ojos y lo vi fijamente mientras hacía un pequeño puchero- Lo digo enserio- río un poco.
Akane: Lo prometes?- junte mi frente con la suya mientras nuestras miradas no podían separarse de la otra.
Dabi: Te lo prometo- dijo con una sonrisa coqueta para unir mis labios con los suyos.
Todos mis pensamientos se despejaron con ese beso
Extrañaba está sensación, sonreí y lo volví a besar
Dabi: No quieres que nos bañemos juntos?- dijo mientras comenzaba a llenar de besos mi rostro.
Akane: Desde cuando te gusta tanto el baño?- dije mientras reía por el cosquilleo del tacto.
Dabi: Si es contigo, podría bañarme todo el tiempo.- dijo con una sonrisa burlona sujetando con más fuerza mi cintura.
Akane: Así?- dije con diversión.
Entonces el se colocó encima mío, sonrió victorioso y comenzó a besarme hasta que de pronto se empezaron a escuchar un llanto seguidamente de otro al mismo tiempo.
Dabi: Ha?...- dijo volteando a ver a nuestro lado.
Akane: Parece que tendras que esperar- dije riendome por la mueca que hizo.
Se acostó nuevamente suspirando rendido para cargar a los dos bebés.
Me levanté para ir a lavarme el rostro mientras que el los paseaba por todo el cuarto, aún me parecía muy curioso como es que siempre lograban reconocer a Tou, incluso su cabello era totalmente blanco ahora y estaban de lo Más tranquilos con su padre.
Normalmente suelen llorar cuando alguien que no sea yo los carga pero era lo contrario cuando los carga Touya.
No podía evitar sonreír al verlos a los tres juntos, eran imágenes que quería guardar para siempre en mi corazón.
Entonces cambiamos a los bebés y nos recostamos en la cama en lo que empezaba a alimentarlos.
Akane: Es cierto... No hay nada de despensa, debería ir a comprar- dije mientras acariciaba la cabeza de Akemi.
Dabi: Te traeré todo lo que quieras pero mejor no salgas.- dijo mientras me acercaba más a su lado.
Akane: Um? Y eso Por qué?- pregunté curiosa.
Dabi: Sabotearon Tártaro y me imagino que no debe haber sido la única prisión invadida... Así que afuera deben haber bastantes desquiciados a la espera.- dijo sorprendiendome.
Tártaro no era la prisión de más alta seguridad del país? Si lo que Tou decía era verdad la situación se había vuelto más mala, si la ciudad se había convertido en tan poco tiempo en un caos con esto terminaría por completo...
Cuando Akemi y Kazuki volvieron a dormirse los acomode al lado y me senté con Touya.
Akane: Volverás a pelear?...
Y entonces un silencio invadió el cuarto...