Cinco historias en una.
Varios chicos se conocen en unas circunstancias un tanto peculiares y todos terminan viviendo bajo el mismo techo.
M-preg
Charlie- seme Babe- uke
Pete " Way "
Alan " Jeff "
...
Kim abrió los ojos, luego de apenas dormir en toda la noche, debido a los nervios y a que estaba solo en la cama, tras haber sacado las cosas de Kenta de la habitación.
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Ni siquiera hicieron efecto los ruegos del joven modelo, ya que no salió, ni abrió la puerta tampoco a Lyn que llegó para avisarle de que la cena le esperaba.
Había llamado a su hermano, el cual estaba en el hotel de Francia, ajeno a todo lo sucedido y este le había dicho que no debía precipitarse y debería pensar bien las cosas.
Lo cierto era que eso era lo que había hecho, había pensado hasta el cansancio durante toda la noche y finalmente había llegado la conclusión de que había exagerado.
En la mañana lo vio todo más claro y ciertamente no podía apartar a Kenta tan cruelmente pues al fin y al cabo, conocía su historia y lo mal que el chico se encontraba cuando el fotógrafo lo había descubierto pero los celos lo habían cargado.
Se sintió un idiota por haber dejado que la furia lo cegase, llegando incluso a hablarle mal a Charlie, faltándole a su futuro hijo y a su novio, al cual conocía desde niños y sabía perfectamente que no era para nada como había dicho.
Le apenaba el haberle gritado también a Way y haber armado tal revuelo pues al fin y al cabo, ahora que lo había pensado con claridad, Pete tenía derecho a vivir su sexualidad como mejor le pareciera si era consentido.
El reloj de su mesita marcó las ocho de la mañana, así que miró con tristeza al otro lado de la cama, el cual estaba vacío y acto seguido suspiró con pesar.
-Lo siento, cariño... siento haber sido un idiota, realmente no quiero que te vayas- susurró acariciando la almohada- tengo que hablar con él
Tras decir eso, el modelo se levantó rápidamente, cogiendo ropa para ponerse y a continuación se metió en el baño, tras la que luego de unos minutos, salió ya vestido y entonces corrió hasta la antigua habitación de Kenta para tocar con los nudillos.
Un rotundo silencio se hizo y tras volver a tocar, este agarró el pomo y abrió la puerta, pensando que el más joven estaría en la ducha y no lo había escuchado.
Con prisa, caminó hasta el baño pero no vio nadie, luego reparó en que la cama ya estaba hecha, entonces sintió un escalofrío que le recorrió el cuerpo, por lo que aterrado miró en el armario y tras abrirlo comprobó con horror que no había rastro de las cosas de Kenta.
-Oh no...no...no joder...no puede haberse ido ya, no... no
Rápidamente salió del dormitorio y bajó las escaleras a toda prisa, entonces fue al comedor pero tampoco había nadie, luego fue al salón común y nada, por lo que se fue la cocina, donde Berta y Lyn ya estaban preparando el desayuno.
-Nana, ¿Has visto a Kenta?
-Hola mi niño, que bien que ya has salido de tu encierro
-Si, nana pero escuchame, ¿Has visto a Kenta si o no?
Esta asintió.
-Si claro que lo he visto, se ha ido hace un rato. Pobre chico, se veía tan triste... ah por cierto dejó esto para ti- habló sacando un sobre de su bolsillo.
El modelo lo abrió con prisas, mientras su corazón latía al galope.
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Siento mucho haberte fallado pero en verdad jamás te engañé porque aunque estuviera con Pete, siempre pensaba en ti...te amo y siempre te amaré.
Mi vida sin ti ya no tiene sentido pero estoy en paz, aunque fue corto, fui muy feliz a tu lado.
Adiós mi amor
Kenta
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Kim salió corriendo de la casa hacia su coche, con la intención de seguirle pero entonces reparó en que camino a la piscina había una maleta y un poco más adelante otra.
-¿Kenta?, oh si... si-habló sonriendo de que este todavía estuviera en la propiedad.
El modelo echó a correr pero no lo vio por ninguna parte, hasta que entonces reparó en el fondo del agua y horrorizado contempló que este estaba allí.
-¡Oh joder, no!, ¡Kenta!, ¡Kenta!, ¡Aguanta!-gritó desesperado antes de tirarse para salvarlo.
Kim nadó lo más rápido que pudo y tras sujetarlo lo sacó a la superficie, donde tras escuchar sus gritos, el jardinero se había acercado.
-Rápido, llama a una ambulancia... diles que se den prisa
-Si, ahora mismo joven-habló el hombre tras ayudar a sacar a Kenta del agua.
Kim tumbó a Kenta y tras comprobar que no respiraba, procedió a hacerle la reanimación cardiopulmonar.
-Vamos...vamos, cariño. No me hagas esto, respira-decía este mientras le hacía las compresiones en el pecho y la respiración boca a boca-...respira por favor, no me dejes, mi vida... Cariño, no puedo vivir sin ti
No sabía cuántos minutos llevaba el chico en el fondo de la piscina, ni tampoco cuanta agua se había tragado y muy angustiado comprobó una y otra vez si este reaccionaba y entonces volvía a intentarlo.
-¡Esa maldita ambulancia!, ¿viene o no?-Le gritó desesperado al jardinero parado junto a ellos.
-Si, joven, ya vienen en camino
Finalmente y después de varios intentos, Kenta reaccionó tosiendo y escupiendo el agua.
-Gracias a Dios-Respiró aliviado el modelo-...oh cariño, pensé que te perdía
El joven modelo abrió los ojos por unos segundos y cogió una gran bocanada de aire pero acto seguido se desmayó.
Las sirenas se escucharon a la entrada de la propiedad poco después, por lo que el jardinero corrió para indicarles donde estaban, acto que alertó a los demás, los cuales llegaron a la piscina cuando ya los sanitarios estaban atendiendo al más joven, quién al aparecer estaba teniendo una insuficiencia respiratoria.
-Oh no ¿Qué le pasó?-preguntó el músico mirando a su primo empapado y llorando como un niño.
-Es mi culpa, yo lo abandoné...solo me tenía a mi y lo abandoné-dijo Kim mirando a su familia-...Ha preferido quitarse la vida a vivir sin mi, soy un maldito idiota
Sus primos lo abrazaron con fuerza, al igual que Lyn, mientras que Sonic y North muy impactados, junto a Pete, quién también se quedó en estado de shock.
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