+BONUS | El Regreso

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Vladimir Makarov

La bengala roja es lanzada dentro de mi celda, mi señal para ir apagando mi cigarrillo para darle comienzo a la verdadera acción

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La bengala roja es lanzada dentro de mi celda, mi señal para ir apagando mi cigarrillo para darle comienzo a la verdadera acción.

—Acérquese a la luz. —indica Ivan, primer error.

—¿Tanto tiempo ha pasado, Ivan? —cuestiono, con la obvia intención de confirmar si he cambiado lo suficiente para ya no ser reconocido.

Ellos se encargan de abrir las rejas. Andrei es el primero en entrar y en ofrecerme un chaleco antibalas junto con un fusil de asalto. Ivan me ofrece el pequeño comunicador que debe ir en mi oreja. Ya con todo listo, piso por primera vez, en mucho tiempo, el exterior de aquella sombría celda.

—Comandante Makarov.

Una vez llegamos a la base, una de las personas más importantes en mi trabajo hace su entrada bajando las escaleras, presumiendo de una deslumbrante sonrisa alegre

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Una vez llegamos a la base, una de las personas más importantes en mi trabajo hace su entrada bajando las escaleras, presumiendo de una deslumbrante sonrisa alegre. Se trata de la grandiosa Milena Romanova.

—Bienvenido de vuelta, Vladimir. —estrecho su mano entre las mías.

—Me hiciste un gran ejército. —le ofrezco una sonrisa cálida como agradecimiento.

—El dinero puede hacer muchas cosas, y esta fue una buena inversión. —contesta, guiñando uno de sus ojos antes de alejarse.

Seguido de eso, me dirijo hacia mis hombres con un discurso que logra darle unos mejores ánimos al tenso ambiente por mi ausencia y los nuevos problemas que ha tenido tanto el Circulo Interno como el grupo Konni. Los soldados ahora demuestran total euforia por mis nuevos aires sedientos de sangre y guerra por todo lo que hemos sufrido. Una vez termino de darle un nuevo enfoque a los presentes en esta base, me dirijo al traidor, a quien ha logrado hacer de mi libertad un completo desastre en batalla.

—Ivan, he notado que no apoyas mi causa como antes, y estás desperdiciando mi tiempo y paciencia. —le explico, acercándome con paso lento.

—Comandante, yo lo admiro, pero...

Lo mando a callar, logrando agotar lo poco que me quedaba de misericordia—. Todos deben reconocer sus errores, Ivan, y tú no serás la excepción.

Coloco mi mano en su parche distintivo, para después quitárselo y retroceder dos pasos. Andrei le dispara directo en su sien cuando le indico con un sutil movimiento de cabeza, seguido de esto, se acerca a mi, esperando mis siguientes órdenes. 

ESTOCOLMO {Vladimir Makarov}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora