The other woman

028

📍 Buenos Aires, Argentina
~ Clara

Llevaba casi tres semanas en Buenos Aires y me sentía en casa.

Me reencontré con mi familia después de mucho mucho tiempo, y volví a ver a mis amigos de acá.

Me sentía muy feliz pero ya era de volver porque no falta nada para que nazca esta bebé.

Mi mamá iba a viajar conmigo y se quedaría un tiempo conmigo para acompañarme. Eso me dejaba muy tranquila.

Mañana bien temprano salía el vuelo, así que estaba terminando de guardar mis cosas. Hasta tuve que comprar una valija extra para guardar todos los regalos y detalles para mi hija, realmente se pasaron.

Tengo unas ganas terribles de ver a mi Ro y mi chiquita opina lo mismo, porque cada vez que hablamos por teléfono patea como una loca.

Mientras seguía doblando ropa miniatura lo llamé.

- Hola mis preciosuras-. Dijo feliz del otro lado.

- Hola mi amor, cómo estás?-.

- Bien corazón, ustedes?-. Sonaba cansado.

- Bien pero no vemos la hora de que nos abraces-.

- No me digas eso que me voy para allá-. Sonreí escuchándolo. - Mañana no llego a buscarlas amor, tengo una produ hasta tarde-.

- No pasa nada Ro, cuando termines si queres nos vemos-. Quiero que pase ya.

- Obvio que quiero, apenas termino voy-.

- Vas a conocer a tu suegra-. Dije para ponerlo nervioso.

- Decis que le voy a caer bien?-. Preguntó como un nene chiquito.

- Obvio gordo, es imposible que le caigas mal a alguien y menos a ella... No te preocupes que ya le conté de vos, te ama-. Hablé de él las tres semanas.

- Que le habrás contado, que miedo-. Dijo haciéndome reír. - Y si le caigo mal igual? Mira si no me quiere cerca de la chiquita?-. Dios, lo amo.

- Amor, te va a amar y cuando te conozca seguro que quiere que estés todo el día con su nieta-.

- Eso espero...-.

- Si tranquilo Ro, con esa carita no le caes mal a nadie...-. Ahora fue su turno de reírse. - Ahora anda a dormir que allá es tarde y mañana nos vas a tener pegadas a vos... Te amo mucho y nuestra chiquita también-.

- Dios, voy a morir de amor... Las amo mucho mucho, cuídense-.

~

Cuando llegamos a Roma, tenía una sensación rara en el cuerpo. Como si fuese un mal presentimiento pero no le di mucha atención, estaba feliz de estar de nuevo en mi ciudad y con mi mamá.

Por suerte, no había tantos periodistas como de costumbre aunque las fotos no faltaron. Para mi mamá era extraño, lógicamente, porque no era muy consciente de lo reconocida que me había vuelto viviendo acá. Aunque no dijo nada.

Antes de ir para mi casa decidí llevarla a almorzar a mi lugar favorito y mientras esperábamos la comida, le escribí a Rodrigo para avisarle.

Roro ❤️‍🩹😚

Amorrr
Ya llegamos lindo
14:12
Estamos almorzando y después ya
vamos a casa
14:15

Hola mi vida
14:28
Buenisimoo, pásenlo lindo Cla
Nos vemos a la nochecita 😘
14:30
Te voy a avisando, las amo
14:33