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📍Roma, Italia
~ Clara

Hoy nuevamente me tocaba ver a Leandro, esta vez venía él a traerla a mi casa porque creo que después se iba entrenar, y me dijo que me quería preguntar algo. Tengo un poco de miedo sinceramente.

Y cuando llegó me puse nerviosa. No sé por qué.

- Hola Cla...-. Dijo cuando abrí la puerta y dejó un beso en mi frente.

Mi hija apenas me vio se emocionó. Es increíble lo rápido que esta creciendo y a medida que pasan los meses se pone mas activa y risueña.

- Hola Brunita hermosa de mamá-. Dije agarrándola y llenándola de besos. - Como se portó?-. Pregunté y noté que a Leandro prácticamente se le caía la baba mirándonos.

- Excelente, como siempre-. Ponele.
- Como te fue a vos?-.

- Bien, solo tenía una reunión pero todo bien por suerte...-. Sonrió. - Vos entrenas ahora?-.

- Si, y hablando de eso...-. Uy miedo. - Te quería preguntar algo, pero sin compromiso ni nada, si?-. Me asusta un poco esto eh. - El jueves a la noche tengo un partido importante, crucial diría yo, y me gustaría que puedan venir... Las dos-. Okey... - Tenemos que ganar si o si y me tranquilizaría mucho saber que las tengo a las dos ahí para acompañarme... Yo sé que es mucho-. Lo interrumpí.

- Ahí vamos a estar...-. Su mirada se iluminó al igual que su sonrisa. - Te va a ir bien Lean... Y si esta chiquita está ahí más todavía-. No quería hacer esto sobre mi porque no tenía que ser así.

- Enserio?-. Preguntó como un nene chiquito. - Gracias, enserio Cla... Significa mucho para mi-.

- Lo único que acá la señorita no tiene camiseta-. Me desmayo con una camiseta de su tamaño.

- Estoy en eso... Ya está todo calculado-. Guiñó un ojo y me hizo reír. - Y quiero creer que tenes la tuya todavía-. Yo no iba a ponérmela. - Al menos una de la Roma, no tiene que ser la mía si eso te incomoda... Sería mejor que sea la mía pero no importa, con tal de verte ahí ponete lo que quieras-. Dios, basta.

- Estás seguro igual? Lo último que quiero son problemas y más con Bruna presente-. No estoy para una escena.

- Las necesito ahí Cla... Te prometo que no va a pasar nada-. Las promesas de él me dan más inseguridad que no sé.            - Bueno si no queres ya está, listo-. Dijo enojado supongo que al ver mi cara, pero no fue a propósito solo me quedé pensando en eso.

- No dije nada Lean, dale, no te pongas en esa... Suficientes quilombos voy a tener yendo como para que vos también empieces uno-. No, que lengua larga. La puta madre.

- Suficientes quilombos?... Es necesario que le recuerde que es mi hija y vos sos mi muj- La madre sos-. Casi dice mi mujer el flashero. - O ahora también decide cuándo puedo llevar a mi hija a un partido?-. Bue bue.

- Leandro para, dale-. Me interrumpió.

- No no, para nada Clara. Me lo vengo bancando bien calladito pero ya me está inflando los huevos, enserio te lo digo-. Puede ser que nunca tengamos una conversación normal?

- No te dije nada sobre él, para un poco-.

- Y entonces por qué decís que vas a tener quilombos?-. No respondí y pareció enojarlo más. - Respóndeme Clara-.

- Porque suficiente metido estás ya en mi relación como para que ahora me salgas con esto también-. Respondí enojada.

- Metido en tu relación? Esa es nueva-. Cuando se hace el sarcástico no lo banco. 

The other womanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora