La rubia de había quedado dormida en el transcurso de la estación a hogwarts, su cabeza descansaba sobre el hombro de Draco, ambos dormían plácidamente, sus cabezas tenían un leve roce, ya que el rubio había recostado su cabeza sobre la de Rachel.
El transcurso estuvo ¿Bien? O bueno, el día no era el más alegre que podría decirse, y el clima tampoco ayudaba, aunque en aquel vagón dónde los Slytherin iban, transmitía alegría entre ellos, si bien, ellos eran conocidos por ser los “bullying” de Hogwarts, entre ellos esa fama que tenían no importaba, entre ellos solo existía la confianza que ellos se tenían, su confianza, y aquellos niños dañados que habían crecido con que tenían que seguir con el legado de la familia, se curaba poquito a poquito, sin nisiquiera ellos saberlo.
Aquel aire de familiaridad, confianza, cariño y sobre todo felicidad, podía sentirse a kilómetros del lugar. El aura que divagaba alrededor de cada uno de eso niños de 14 años que cada día cargaban con la presión de sus padres.
Entre ellos se entendían, y ellos lo sabían, no era fácil vivir con la presión de tus padres, el ser “perfectos” día con día, algo lo cual no se podía, nadie es perfecto en este mundo, pero ellos, debían aparentar que lo eran.
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La rubia descansaba sobre el hombro Draco, viendo hacia la ventana, había empezado a llover, si bien, siempre había sido el clima favorito de Rachel, pero está vez, le daba tristeza.
-¿Recuerdas cuando salíamos a jugar sin protección al jardín, y nuestros padres terminaban molestos? -Se escucho la voz del rubio, si bien era solo un susurro, suficiente solo para que Rachel escuchará.
-Si... Después hacían que los elfos nos hicieran una taza de chocolate caliente. -Murmuro Rachel sonríendo.
Draco soltó una pequeña risita, era verdad, primero recibían un reclamo de sus padres y después los abrigaban y hacían que los elfos cocinarán chocolate caliente y galletas con chispas de chocolate.
En ese momento ambos entraron en una burbuja de recuerdos, era nostálgico, si ellos hubieran sabido que después de ser niños su vida cambiaría, hubieran disfrutado cada uno de esos momentos vividos con sus padres, momentos los cuales ahora quisieran volver a vivir.
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Hola volvi, y volví lo más sentimental jsjs.
Capitulo corto, el otro será mucho más largo. Lo juro.
