[•Minutos después de la elección•]
Los chicos de Slytherin entraron a la sala común, Draco soltó un bufido, Rachel, se quedó en silencio esperando la queja de Draco.
Draco solo hizo unas quejas de asco, intentando pensar algo en que decir.
-El... El solo...
-El solo lo hizo para llamar la atención -Musito Rachel terminando las palabras de Draco.
-¡Exacto!
Todos rieron a carcajadas, Rachel solo soltó un suspiro calmado, antes de tirarse en el suelo, ya que no habían más lugares en la sala.
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Todos desayunaban alegres, algunos incómodos con la presencia de “individuos” en su mesa, los Slytherin no habían aceptado a nadie en la mesa Slytherin, nisiquiera al gran Victor Krum.
Rigel entro alegre al gran comedor, llegó al grupo y dejo un beso en la cabeza de Rachel, antes de sentarse a un lado de el, tirando a un niño de primer año que platicaba con Rachel, Rachel, golpeó el brazo de Rigel antes de sentar al niño en sus piernas.
-¡Rigel, ten cuidado! -Regaño la rubia.
Todos rieron antes de seguro comiendo en silencio, después de eso el transcurso estuvo aburrido, tarea tras tarea.
[•••]
-Al fin... -Musito Pansy tirándose en la cama de Enzo, todos habían quedado en dormir ahí, si bien, aún estaban pensado en que habitación quedarse.
Por el lado de Draco y Rachel.
Rachel entro a la habitación de Draco, quien se preparaba para ir a la habitación de Enzo.
-¿Estás lista? -Pregunto el rubio levantando por unos segundos su mirada viendo a Rachel.
-Si, si. -Sonrio de forma fingida Rachel.
-¿Que te pasa? -Dijo el rubio viendo a Rachel, se sentó en la cama y se forma delicada palmeo su regazo invitando a Rachel a sentarse.
-No es nada... Solo me preocupa Ced... -Dijo la rubia, sentandose en el regazo de Draco, recostando su cabeza en el hombro del rubio.
-¿El Hufflepuff que es mayor que tu? Espera... ¿Acaso te gusta? -Murmuro Draco.
-¿Que? ¡No, claro que no! -Dijo Rachel - Solo es mi amigo, y con eso de que entro al torneo... Es peligroso, no quiero que le pase nada.
-Entiendo... Pero tú, señorita linda, no puedes hacer nada... El es mayor y sabe lo que hace.
-No lo sé Draco... Tengo un mal presentimiento, con eso de que está Potter, donde Potter está, seguro una muerte habrá.
Draco rio por la buena rima que dijo Rachel.
-Bueno, debemos irnos... Te aseguro que tú amigo Hufflepuff estará bien, y si no... Tienes a Lorenzo, que tiene las vibras de un Hufflepuff.
Rachel rio levemente, antes de levantarse y irse junto a Draco a la habitación de Lorenzo.
Aquella noche, los niños se la habían pasado genial, entre risas, chistes, bromas, anécdotas, cuentos, leyendas y demás.