Parte 145

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Westport era una familia aristocrática increíblemente famosa. 

Aunque no tenían una enorme riqueza o un estatus impresionante, debido a los genes superiores de cada uno de los hombres y mujeres que llevaban encima su apellido, siempre habían sido casa de las bellezas rubias más hermosas del mundo. 

En particular, la sangre omega era espesa en ese lugar, por lo que cualquier aristócrata que deseara tener un heredero alfa miraba en su dirección para ver si podían conseguir un cónyuge adecuado rápidamente. 

Por supuesto, gracias a eso podía decirse que tenían un nombre bastante conocido en el mundo social.

No obstante, justo ahora parecía como si la popularidad de la familia Westport literalmente estuviera explotando frente a las caras de todos: Marlene Westport, la actual vizcondesa, era una belleza reconocida y el centro de atención en el mundo social. 

Sin embargo, al contrario de sus rasgos delicados y bonitos, podía decirse que era bastante admirada entre los nobles gracias a su personalidad atrevida y relajada. 

Pero, dado que ya estaba casada, tenía dos hijos y estaba a punto de entrar en la media de la edad, no era el tipo de persona que deseaba participar en la fiesta. 

El esposo de Marlene y vizconde de Westport era un alfa de mediana edad que era conocido por su actitud estricta así que tampoco era particularmente amado. 

Por lo tanto, la razón por la que los Westport ahora llamaban tanto la atención de miles de personas en la ciudad era por Rafiel, su hermoso hijo omega.

De pies a cabeza, a diferencia de su padre, Rafiel Westport parecía creado con muchísimo cuidado. Igual a si Dios hubiera puesto su corazón y alma en ello. 

Tenía cabello rubio claro y ojos azul cielo. 

Tan amable como su apariencia, con una personalidad meticulosa y suave que lo convertía en la envidia de muchos Omegas, y era, realmente, una belleza en si mismo. 

Y aunque mucha gente reconocía ahora su encanto irresistible, para ser honesto, el principio de la historia fue diferente.

Su padre, el vizconde de Westport, había tenido dos hijos omega: Rafiel y Ariel

Y aunque eran una familia aristocrática activa en la sociedad, nadie había visto a sus dos hijos hasta los quince años. 

Los rumores decían que fue porque el vizconde de Westport había sido humillado en reuniones sociales en su juventud debido a su inmadurez y sin embargo, dada su apariencia estricta y solemne, la opinión predominante fue que solo se trataba de un rumor para ocultar el hecho de lo "sobreprotector" que era con sus niños.

Estaba claro que los hijos eran demasiado ingenuos y demasiado jóvenes para renunciar a ellos y cuando los Omega cumplieron quince años y estaban haciendo su debut social, Wolflake vio por primera vez a Rafiel Westport

Eso principalmente porque el hombre parecía no poder permitir que sus dos hijos, que ya se acercaban al matrimonio, envejecieran como solteros de acuerdo con la tradición aristocrática donde el matrimonio temprano era algo bastante común. 

Por ello, el vizconde de Westport finalmente comenzó a invitar a los Alfas nobles, más guapos, a su casa.

El vizconde de Westport envió invitaciones para su fiesta de té solo a unos pocos nobles cercanos así que, claro, llegó a manos de Wolflake porque su madre y Marlene se conocían desde la infancia. 

Algo como... Ser mejores amigas o algo por el estilo.

En ese momento, no fue una invitación particularmente bienvenida y de hecho fue muy molesta, pero ya que no era cortés rechazar una carta para presentarle a su hijo a la sociedad, a quien había criado con mucho cuidado, aceptó sin poner demasiados "peros."

AROK Y JARDIN DE LAS ROSAS (BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora