·Capitulo 17: Celos

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¿Esto se llamaría traición?

Según yo no, no era novia de Villamil así que ver a otros chicos no tendría nada de malo.

—¡Nath! ¡Que bueno verte! —mi amiga se paró de su lugar y abrazó al susodicho—.

—Lo mismo digo, July —.

Cuando se separaron, los dos me voltearon a ver.

—Mira —me jaló del brazo para pararme— ella es Abril Isaza, hermana de Juan Pablo —.

—Mucho gusto —respondí con una sonrisa—.

—El gusto es mío —Nath me extendió la mano— me llamo Jonathan, solo que me dicen Nathan o Nath —.

Junté nuestras manos y me teletransporté automáticamente al pasado.

—Perdón —mi hermano cortó el silencio— él es mi tocayo Juan Pablo Villamil, Villa, te presento a mi hermana, Abril—.

—¿Cómo el mes? —río burlonamente—.

—Porque en ese mes nací, Juan Pablo —.

—Como sea —respondió con la mano estirada— un gusto —.

—Igual —respondí seca, no me gustó cómo habló—.

Cuando juntamos nuestras manos, sentí algo mágico, su piel era extremadamente suave, no sé si fui solo yo pero incluso sentí una corriente uniéndose a través de esa unión, como si un rompecabezas encajara a la perfección, al mismo tiempo sintiendo algún comienzo, de mi destino, tal vez.

Salí de mi burbuja cuando escuché mi nombre a lo lejos. Aunque parecía la misma situación, no me volvió a pasar esa chispa del momento como cuando lo conocí.

—¿Abi? —pregunto Julia—.

—¿Eh? —reaccione— Ay, perdón —solte la fría mano de Jonathan— me fui a la luna, disculpa —.

—El chico río— no se preocupe —me miró directamente a los ojos, no tenía la magia de Villa, la que me hace explotar de emoción cuando lo veo, pero no sentía indiferencia a su mirada.

—¿No te quieres sentar con nosotras? —invito mi amiga al castaño–.

—Si me invitan —dijo sarcástico—.

—Por algo te está hablando —hable obvia—.

Nos sentamos casi al mismo tiempo y empezamos a conocernos un poco más, al parecer Julia ya lo conocía y hablaba con tranquilidad y confianza con él.

—¿No le conté, Abril? —.

—¿Qué cosa? —pregunté confundida—.

—¿Se acuerda del chico del que estaba abrazada cuando me vió su hermano? —.

—Sí, ¿por qué? —.

—Era Nath —.

Cosas de la vida.

—¡Ah! ¿O sea usted es el quita novias? —bromeé haciendo que los tres riamos—.

—Que pena, yo sí sentí algo por Julia, pero no sabía de la existencia de su hermano, así que ahora no hay problema —.

—Eso espero —adverti señalandolo con el dedo divertida— es mi hermano y mi cuñada —.

—No se preocupe, esos sentimientos ya desaparecieron —alzo la mano derecha como promesa—.

El resto del tiempo seguimos hablando y bromeando, Nathan me cayó muy bien, se notaba que era buen chico. En un momento, escuchamos varios sonidos muy fuertes e inesperados.

Eres Tú ~ Juan Pablo VillamilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora