Su mejor beso.

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Se acostó en la cama miro el techo no sabía exactamente qué sentía sin embargo no quería sentirlo.

Una amargura inundaba su corazón y no sabía cómo sentirse al respecto.

Tal vez solo se estaba preocupando por nada, tal vez solo las tormentas de su cabeza no la dejaba pensar con claridad.

¿Qué le atormentaba verdaderamente?

¿El echo de que Ethan no contestará sus llamadas?

¿Qué podia morir en su intento de "venganza"?

¿Qué ella lo amaba pero él a ella no?

Cerro sus ojos.

Intento localizar a Ethan desde que llegó a su casa sin embargo no pudo dar con él.

Después de eso intento estudiar para la universidad pero sus cerebro no estuvo reteniendo nada de información.

Se sentó en la cama. Observo la luna a través de la ventana. Con pesadez se levantó y salió por ella. Quería ir a caminar pero sus padres no la dejarían así que esta era su única opción.

Cuando logro bajar al piso del patio camino sin rumbo alguno.

Sus pensamientos bailaban en el viento, ya no era la misma de hace unos meses la relación con sus padres había cambiado, si seguían siendo sobreprotectores pero ahora tenía un poco más de espacio.

Se follaba a su profesor, que para el colmo su profesor de alemán estaba relacionado con la mafia o lo que fuera que fuese. Ah, olvide mencionar que también era su sumisa por contrato.

— Te ves linda está noche — una voz masculina la sorprendió de golpe.

— Luke — se agarró el pecho.

— Ese mismo — se cayó cuando vio que la chica se había asustado.

Sonrió un poco incómodo. No debió estado espiando la pero desde esa noche que la trajo a su casa no pudo dejar de pensar en ella.

— Lo siento... — se rasco la nuca.

— No te preocupes es que solo no te ví.

Se quedaron en silencio viéndose, detallando sus rasgos mucho mejor que la anterior noche. Con sus miradas buscaban descifrar al otro ambos querían saber los secretos que guardaban.

— Tengo hambre — soltó Lauren.

— Si que sabes joder los buenos momentos — se mordió el labio.

Este insignificante acto hizo que la mirada de Luke bajara a los carnosos labios de la rubia.

Lamió sus labios por alguna extraña razón los sintió resecos.

— Yo también tengo hambre —  sonrió.

— Conozco una pizza deliciosa, el restaurante no queda a menos de dos cuadras.

— ¿Qué esperamos entonces? — ambos sonrieron.

Caminaron en dirección al restaurante. No decían nada sin embargo se sentían acompañados uno del otro.

El silencio en algunas ocasiones se siente bien, mucho más cuando ese silencio lo compartes.

La luna brillaba con intensidad sobre estos dos amantes. Continúo así hasta que llegaron a dicho lugar.

Pidieron su orden para llevar. Ambos se habían habían sorprendido que les gustará la pizza con piña.

Era sorprendente como un simple trozo de pizza con pequeños trozos de esta singular fruta fuera odiada o amada por muchos.

Salieron del local entre risas y bromas por parte de Luke.

Llegaron a un pequeño departamento.

— ¿Aquí vives? — preguntó al entrar.

— Sip — alargó la "p"

— Es lindo.

No era un departamento lujoso ni nada por el estilo. Era modesto y humilde la renta no era costosa. Solo había una habitación un baño la cosina que era compartida con la sala.

Se sentaron en el piso recargando su espalda con los sillones y abrieron la caja, rápidamente el olor delicioso de la pizza inundó sus fosas nasales

— Delicioso — dijeron al mismo tiempo.

Ambos rieron.

Cada uno tomó un trozo disfrutando su peculiar sabor.

— Cuéntame más de tí — se acomodó para ver mejor su rostro.

Todo estaba oscuro lo único que alumbraba era la redonda luna que es testigo de las promesas de los enamorados.

— No tengo mucho que contar — respondió Luke restándole importancia.

— Todos tenemos algo que contar.

— Pero no se los queremos contar a quien sea.

Sonrió un poco. Es verdad nadie contaría sus secretos a cualquier persona.

— ¿Quieres que te cuente un secreto? — levantó ambas cejas sorprendida.

Susurro un pequeño "si" quería saber qué le podía contar ese hombre.

Luke se acercó a su oreja poco a poco. Cómo si no quisiese que nadie lo escuchará. Cómo si solo fuese un secreto de ella y él.

— Creo que estoy enamorado de ti desde que te ví... — se alejó un poco.

¿Enamorado? No sé puede enamorar al instante. Es decir el amor a primera vista no existe. Todos se enamoran por algo.

Antes de que dijera algo Luke se apoderó de sus labios.

Este no fue un beso como los que estaba acostumbrada a resivir uno de esos besos posesivos de los cuales el aire se le iba o de los que terminaba con el labio roto.

Este beso fué lento, cariñoso. Cómo si el muchacho quisiera que ella supiera que de verdad le gustaba y no solo para un rato.

Un beso cargado de amor dónde sus lenguas bailaban en sus bocas.

¿Amor? ¿Puedes amar a una persona solo por un beso?

Ni uno de los dos sabía esa respuesta pero lo que Lauren su tenía más que claro era que este fue sin duda...

Su mejor beso...

No estaba rodeada de algo carísimo solamente estaba tirada en el suelo de un departamento con una caja de pizza y siendo besada por un hombre guapo.

¿Qué más se pude pedir?

Se separaron en busca de aire. Sus ojos se miraron fijamente intentando descifrar algo.

Las miradas son la puerta al alma.

Sus ojos brillaban al igual que sus labios.

Llamando deseo, si: deseo pero Lauren deseaba besar nuevamente esos labios.

Lo hizo no se contuvo. Esta ves fue un poco más fuerte pero sin dejar ese toque dulce.

— Tengo sueño — susurro de pronto contra sus labios.

Sabía perfectamente que si seguian así lo único que lograrían era tener sexo y eso no era bueno para ninguno de los dos.

— Solo hay una cama — Lauren rodó los ojos.

— Esos es muy cliché — Luke soltó una resita.

— Quiero abrazarte.

— Quieres muchas cosas.

— Que seamos como Julieta y Romeo, si.

Sus miradas no se separaron en ningún momento.

— Entonces abrázame, Romeo, pero no te enamores de mi.

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Holiiii

Cualquier falta de ortografía se revisará al final ya que termine todo el libro... ¿Libros? ¿Historia? Bueno lo que sea jajaja

ƪ(˘⌣˘)ʃ

La santa del profesorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora