EL LOBO NEGRO

Capítulo 30: en lo alto del castillo (parte 2).

La fiesta continuaba en su apogeo, pero solo unas pocas personas parecían notar la ausencia del héroe. Un hombre de cabello rubio y gafas se movía entre la multitud, buscando a alguien.

—Disculpa, Freibol —llamó el rey a William—, ¿no has visto a Raf?

—¿Eh? No, no lo he visto —respondió William, conocido como Freibol.

El rey frunció el ceño, preocupado. —Me inquieta. Raf no suele separarse de Abram sin más. Y el héroe, ¿dónde está?

—Mmm... ahora que lo mencionas, tampoco lo veo —admitió Freibol.

—Mi esposa no se siente bien, pero me preocupa dejar a Abram sin Raf —confesó el rey.

—Si me permite decirlo, su hijo está en buenas manos —aseguró Freibol, señalando con el dedo a Abram.

El rey siguió la dirección del dedo de Freibol y vio a Abram junto a Buzz y su hermana. Al verlos, pareció tranquilizarse.

—¿Podría encargarte a ti y a tu asistente mientras voy a ver a mi Roya? —preguntó el rey, mencionando el nombre de su esposa.

—Por supuesto, déjenos a Buzz y a mí. No se preocupe —respondió Freibol.

—Muchas gracias. Te dejo a cargo —dijo el rey antes de alejarse.

Una vez que el rey se fue, Wiliam miró a su alrededor, buscando a alguien entre la multitud. Miró fijamente a uno de sus compañeros que estaba al otro lado cerca de Buzz. Ambos negaron con la cabeza y siguieron merodeando en la fiesta.

Buzz observaba a la princesa Laria danzar con su hermano, pero de vez en cuando desviaba la mirada para buscar a Newton mientras comía una cereza que había tomado de un pastel.

—Disculpa, ¿eres el acompañante del héroe, verdad? —preguntó una de las chicas que miraban a Newton.

—¿Eh? Perdón, se supone que sí. ¿Por qué? ¿Lo estás buscando? —preguntó Buzz a la chica.

La chica, de cabello gris oscuro y ojos azul oscuro, miraba alrededor con una expresión de molestia. Vestía un elegante vestido plateado y llevaba un bolso a juego.

—Ah, qué pena. Bueno, ¿no te gustaría bailar conmigo? —preguntó la chica.

—Perdona si te parezco grosero, pero estaba conviviendo con el príncipe y no quisiera defraudarlo. Además, no te conozco —respondió Buzz de manera educada.

Laria apareció danzando con su hermano.

—No te preocupes, además es deprimente verte de pie quieto —dijo Laria mientras danzaba con su hermanito.

—Lo ves, además si bailas estarás más cerca. Mi nombre es Cameron, ¿y el tuyo? —preguntó la chica llamada Cameron, extendiendo la mano a Buzz.

—Oh... bueno, mi nombre es Buzz. Buzz Gratus Larkdan —respondió Buzz, aceptando la mano de Cameron y entrando a la pista de baile.

Buzz recordó cómo bailar por el cumpleaños de Jana y comenzó a danzar con Cameron. Cada vez que giraba, miraba a Laria y a Abram.

—Entonces, cuéntame, ¿cómo es el héroe? —preguntó Cameron.

—¿Newton? Ah, sí, él... es fantástico —contestó Buzz con una voz rasposa.

—No parece que se lleven bien.

—Pues... es complicado.

—Tan complicado como para casi ganarle y perder por nocaut —comentó Cameron, sorprendiendo a Buzz.

—Oye, ¿y cómo te enteraste? —preguntó Buzz, intrigado.

—Bueno, porque lo vi en primera fila, Buzz. Fue una pelea divertida, de hecho —contestó Cameron.