Capítulo 44: Guardia (parte 2)

6 1 0
                                    

Buzz y Jana fueron a por el cambio de turno preparándose para otra matutina noche con un café caliente en mano.

Jana le da un sorbo a su café y lo saborea en su paladar, gustosa para luego intercambiar palabras con Buzz —en parte, qué bueno que nos paguen, pero si sigo tomando café, me empezarán a salir piedras en los riñones.

—Es por eso que también traemos agua y comida, así que tan mal tampoco estamos —argumentó Buzz.

Algunos de los aventureros trajeron un juego de naipes, el cual Buzz no logra entender. Solo sabe jugar el solitario y usarlos para hacer una pirámide con él. Mientras va transcurriendo el tiempo, ven varios carruajes pasando por el frente debido a que era viernes. El zoológico estaba cerrado, pero el frente estaba iluminado por los postes de luz y varios carruajes pasaban con personas volviendo a sus casas, algún horario de trabajo vespertino o simplemente un apuro. Tras eso, Buzz y Jana vieron como en uno de los carruajes, cuyas ruedas parecían ser de acero y muy resistentes, un carruaje bastante enorme en el que se escuchaba a personas en el interior, pero dieron por hecho que se trataba de un carruaje especial para cargar material pesado y de trabajadores del zoológico cumpliendo con las horas de trabajo, creyendo que no están haciendo nada debido a que nosotros somos los que patrullamos. De vez en cuando, uno que otro trabajador alimenta a los animales y cierran sus estadías tomando las debidas medidas de seguridad. Mientras tanto, los animales son guiados por algunos trabajadores para que estos duerman y mantenerlos sanos. Después de esto, básicamente los encargados no hacen gran cosa.

Apenas eran las 8 de la noche y lo único que hacían Buzz y Jana era pasear de aquí por allá siguiendo un seguimiento en el que entre los aventureros se pusieron de acuerdo.

—Este lugar es divertido de día, pero de noche sí que es aburrido —dijo Buzz, tomando agua de su bote.

—Queda claro que no es el lugar, sino el evento y las personas con quien estés —respondió Jana a Buzz.

Intercambiaban palabras buscando una forma de pasar el rato.

Las 10:00 y, como las noches anteriores, las patrullas seguían siendo aburridas.

Un aventurero cerca de Buzz y Jana les dirige la palabra —¿Señorita Banlomer? ¿Verdad? ¿Ustedes qué son? ¿Son pareja o...?—

—Somos amigos y socios —respondió Buzz.

—Entonces, ¿está bien si te invito a una cita? —preguntó el aventurero, haciendo que Buzz levante una ceja.

—Perdona, la verdad, no estoy interesada —respondió Jana.

—Oh, no pasa nada, bueno, adiós —dijo el aventurero, quien se retiraba.

El amigo del aventurero se acercó a él desconcertado —oye, ¿le preguntaste eso a la chica Banlomer? ¿Por qué?

—No sé, solo me pareció linda —le respondió el aventurero mientras se alejaban.

Buzz y Jana se quedaron quietos ante la situación, intercambiaron miradas y voltearon al lado contrario del otro.

Buzz y Jana se quedaron quietos ante la situación, intercambiaron miradas y voltearon al lado contrario del otro

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
EL LOBO NEGRODonde viven las historias. Descúbrelo ahora