Boku No Hero one shots y headcanons+18

Diferencias (Kirishima)

Cuando Kirishima te conoció, se enamoró locamente de ti, a pesar que tengan grandes diferencias.

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Kirishima se encontraba caminando por la ciudad con su mejor amigo Bakugou, el cual caminaba a su misma velocidad, pero no con su mismo carácter.

– No entiendo Kirishima, ¿Por qué rayos tenemos que ir a un gimnasio si ya tenemos entrenamientos en la U.A?– Preguntó el rubio enojado por ser obligado a ir a un gimnasio.

– El entrenamiento que recibimos en la academia no es suficiente Bakugou, tenemos que volvernos más fuertes, eso es muy varonil– Dijo levantando uno de sus brazos y apretándolo para hacer notar sus músculos.

Siguieron caminando hasta por fin llegar al gran y moderno edificio, casi lleno de personas, algunas entrenando,y otras ya estaban guardando sus cosas para irse. Kirishima fue a la recepción donde los atendió una mujer, después de llenar un papeleo, se adentró con su amigo al gran gimnasio.

– Ahora veamos, ¿Que podemos hacer?– Dijo el pelirrojo viendo las grandes máquinas que había ahí.

El rubio iba a decir algo, pero escuchó a lo lejos unos gritos de hombres, y también unos aplausos que provenían del fondo del gimnasio.

– ¿Que fue eso?– Preguntó Katsuki.

– Vamos a ver– Dijo Kirishima llendo a dónde se escuchaban los gritos.

Llegaron a un pequeño círculo formado por muchos hombres amontonados, los dos chicos empezaron a empujarlos un poco para tener el espacio suficiente para ver lo que pasaba, hasta que se dieron cuenta de algo impresionante.

En medio de esa multitud, había un hombre muy grande y musculoso, jugando a las pulsadas con nada más, y nada menos que con una chica; una chica con pelo rubio, caso dorado a la altura de los hombros, muy lacio.
Kirishima al verla se sorprendió mucho, pero no se sorprendió por su hermosa apariencia, sinó también por los brazos grandes y fuertes que tenía, y en ese momento se dió cuenta de algo, estaba compitiendo contra ese hombre.

Los dos estaban ejerciendo mucha fuerza para poder ganar ese absurdo juego que para ellos, parecía una lucha a muerte, el hombre mayor ha estaba agotado, pero seguía luchando, las venas resaltaban de su cuello, frente, y brazos, quería ganar a toda costa; pero la chica rubia, estaba quieta, de hecho, parecía estar completamente normal.

– Parece que no siente dolor– Dijo un chico desconocido al lado de Kirishima.

– ¡Así es! ¡Y también es muy hermosa, la vi cuando llegó aquí!– Dijo otro desconocido, el cual Kirishima también logró escuchar.

"¿Hermosa?" Pensó mientras la veía, no lograba ver si rostro, ya que su cabello lo tapaba un poco, lo único que lograba ver, era que tenía mucha fuerza.

Luego  de unos segundos, las dos personas seguían compitiendo, uno estaba ya queriendo rendirse, y la otra estaba de lo más bien. Hasta que la chica emitió palabras.

– Oye,  ya deberíamos parar, tengo cosas que hacer en casa– Dijo la rubia, su tono de voz parecía aburrido, como si ya estuviera cansada, pero también sonaba fuerte y firme, no parecía la voz de una chica tierna, era la voz de una mujer, una mujer que no se arrepentía de sus palabras.

– N-no vamos a parar hasta que alguien gane– Dijo el señor apretando los dientes mientras hablaba, y ejerciendo más fuerza.

– De acuerdo, como tú quieras– Dijo la chica dándole la razón.