Mala costumbre || Kivi

Capítulo 26: Camp Nou

Vio y yo nos encontrábamos en la terraza sentadas viendo el amanecer tapadas con una manta para evitar el fresquito. Era muy pronto aún, pero ella se había vuelto a despertar por culpa de esa pesadilla que tenía todas las noches y con la ansiedad que tenía no era capaz de volver a dormirse. Al final, habíamos terminado las dos allí como si fuéramos dos koalas abrazadas a su árbol y mirando como un día nuevo empezaba en Barcelona con ese maravilloso sol de fondo. Sería un día muy intenso y con varias sorpresas, pero en ese momento tan solo disfrutábamos de la compañía que nos dábamos mutuamente y de las preciosas vistas. Y no me refiero a Barcelona precisamente.

No sé si fue las pocas horas de sueño que tenía, el ambiente relajado que se respiraba en ese momento o estar en brazos de Vio que me generaba muchísima seguridad, pero al final volví a quedarme dormida allí. Me volví a despertar algo desorientada al escuchar más voces a mi alrededor. Voces que trasmitían preocupación por algo que no llegaba a entender ya que aún estaba bastante adormilada.

-Buenos días dormilona- me susurró Vio mientras me dejaba un tierno beso en la cabeza. Seguíamos en la misma postura que recordaba cuando me quedé dormida - ¿Descansaste algo más?

-Si, pero ahora estoy algo atontada- contesté yo mientras iba poco a poco abriendo los ojos y miré hacia mi alrededor para terminar de orientarme en el espacio-tiempo. Entonces me di cuenta de que Carla, Laura y mi madre estaban allí también sentadas frente a mí y me llevé un susto que hizo que todas se rieran de mi cara- Jesús, no sé cómo sentirme de que todas estuvieseis viendo como duermo.

-Acabamos de sentarnos, no te preocupes -contestó mi madre sonriéndome- estábamos hablando de que ha contactado la policía hoy -eso hizo que mis sentidos se activaran de golpe y puse toda la atención a esas palabras.

- ¿Y? ¿Qué fue al final? -dije yo con cierta ansiedad. Pude ver como las tres se miraban entre ellas con preocupación y Vio se tensaba también. La respuesta no me iba a gustar.

-Han confirmado las sospechas, no fue un accidente. Fue algo premeditado ya que el techo estaba manipulado apropósito. Lo único que no saben es cuando pudieron hacerlo y porqué. Es lo están investigando ahora- explicó Carla- yo les conté los casos que tuviste con ciertos haters homófobos radicales pero que nunca habían llegado a más. Solo pequeños sustos.

-Sospechan que pueden ir por ahí los tiros. Vuestra relación en su momento fue un icono LGTBI+ y quizás, los rumores de que estáis volviendo hizo que ciertos haters aparezcan. La policía nos comentó que habían subido los casos de homofobia en España- dijo ahora Laura- me parece increíble que sea algo que la gente siga sin entender o superar- y suspiró con frustración.

-Sabes que las cosas están mucho mejor ahora que hace años, pero sí que dicen que este año en particular está habiendo un repunte en general por ciertos radicales-siguió diciendo Carla- Bueno, estamos suponiendo que puede ir por ahí el por qué. No se sabe nada realmente, ni siquiera se puede confirmar que fueron a por las dos. La policía lo supone porque podría haberlo hecho en cualquier momento de todas las canciones que cantasteis y, sin embargo, fue justo en esa de las dos y además un icono como IKAG. Ellos creen que tiene todo relación- explicó Carla con cierta preocupación en su gesto.

-Me parece increíble que alguien intenté atentar contra nosotras solo por quien queremos-dije yo sin creerme la situación- no estamos hablando de un susto de un hater como lo que viví, esto fue un atentado contra nuestra vida y no salió gratis-dije señalándome hacia la mano.

-Lo sabemos- dijo mi madre – por eso, ahora es importante que tengáis mucha más precaución con las cosas que hagáis. No quiero que volváis a tener un susto como el de Madrid- y su cara era de total preocupación.