Who is? | Bucky Barnes

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Bucky y Carey se miraron entre ellos, asustados. Ahora absolutamente todo el mundo sabía que habían estado juntos, y eso no era para nada bueno.

Lucas suspiró y negó, pensativo. Todos los problemas siempre terminaban recayendo en él, hiciera lo que hiciera. Al menos, había evitado que Bucky y Carey se matasen mutuamente, que era un gran avance y triunfo personal.

—No es por culpar a nadie, pero ustedes no han disimulado ni se han escondido nunca. —comentó Lucas, encogiéndose hombros mientras los tres salían de la sala de entrenamientos.

—No me puedo creer que no nos hubieran pillado cuando estábamos juntos y nos pillen ahora que lo hemos dejado. —se lamentó Bucky, mientras caminaba con la vista clavada en el suelo, pensativo.

—¿Y qué hay que hacer para que Steve cambie de idea? O al menos para que esto no explote. Porque todos lo saben pero nadie se lo ha dicho mutuamente. —intervino Carey, mirándolos preocupada.

—Se me ocurren dos cosas... O se reúnen con Steve y salen por fin a la luz, o se reúnen con Tony y le piden ayuda.

—¿Salir a la luz? Hemos roto. Lo mejor sería la opción de Tony. —opinó Bucky, dedicándole una mirada breve a Carey. Solo quería llamar la atención de ella.

Carey frunció el ceño ligeramente. Le había dolido. Pero no se quedaría callada, con Bucky tenía la confianza suficiente como para decirse todo a la cara y en el momento.

—¿En serio, James?

—No empieces con eso de llamarme James...

—Te da igual completamente todo, ¿no? —le dijo ella con cierta ironía.— qué pena que tus ojos hinchados y nariz roja te delaten.

—Qué observadora eres a veces. —le respondió él con el mismo tono.— Tengo alergia, no he llorado por ti. No todos somos tan dramáticos.

Lucas rodó los ojos y asintió, empujándolos para para que se chocaran entre ellos y así desahogarse un poco.

—Lucas, tienes que llevarme el divorcio. —comentó Carey, ahora intentando empujar a Bucky mientras él le hacía un gesto obsceno como respuesta.

—¿Yo? Ni de broma. Soy abogado penalista, así que a no ser que vuestro divorcio termine en homicidio, me temo que este caso no es para mi. —los miró alzando una ceja.

—Igual sí hay un homicidio. —Carey volvió a empujar a Bucky y este dio un tirón de su brazo, para que ella se desestabilizara también.

—Si me tiras, te tiro. —le amenazó él de forma infantil, devolviéndole el empujón. Aunque claramente sin ejercer casi ninguna fuerza.

—¿Pero por qué se tratan así? —les preguntó Lucas con molestia, comenzando a perder la paciencia.

—Pregúntale a Melissa, el contacto de Bucky que nunca me dijo quién era. —Carey lo volvió a empujar, y Bucky trató de esconder aquella sonrisa divertida que se apoderaba de su semblante frío.

—Se ha puesto celosa... —canturreó mentalmente casi como una celebración. Lo cierto era que Melissa era simplemente la mujer de Dante, o lo que es lo mismo, una señora de setenta y seis años.

—Más que de Melissa, hablemos de Matt. —imitó Bucky su tono de molestia, pero en realidad disfrutaba aquella pequeña pelea más de lo que le gustaría admitir. Al menos le quedaba claro que Carey lo seguía queriendo.— un agente, un enfermero, un científico y ahora un abogado, a este ritmo tendrás todas las profesiones. ¿Ya te has dado un paseo por el parque de bomberos?