High Infidelity | Wandanat

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Natasha disfrutaba tanto sus días, la relación con Maria iba bien, se esforzaba por ser mejor, con Wanda se llevaba bien y a pesar del detalle de aún dormir en la misma cama, todo iba bien.

Lo único que realmente la preocupaba eran esos sueños con Wanda, era a diario, hace dos noches no soñó con ella y la pasó fatal todo el día, sólo se preguntaba porqué, claro que a la noche le pidió que no lo vuelva a hacer, pero no era algo que controle el personaje ficticio de sus sueños, sino lo controlaba ella misma, no lo controlaba ni siquiera ¿O sí?

Era una situación muy agobiante...

Estaba pensando en ir a un psiquiatra, pero lo único que le recomendarían sería las pastillas de dormir o hablar incansables horas de Wanda para hallar el origen de sus sueños, algo a lo que no le encontraba el sentido, pero era obvio que sucedería.

Así que se debatía y conflictuaba día a día, era pareja de una mujer que no amaba, odiaba a su esposa y a la vez soñaba con ella, literalmente.

— No te vas a levantar de esta mesa hasta que yo te lo ordene — Natasha salió de sus pensamientos escuchando la voz de su esposa

— ¿Qué? — Dijo sin entender

— Lo que oíste — Señaló su cena con los ojos

— Perdón — Tomó a Cassie de su silla alta, puesta estiraba las manos en dirección a ella — Estoy algo distraída, me encanta lo que hiciste para cenar — Llevó el tenedor a sus labios — Está en serio delicioso, cocinas muy bien, gracias, Wanda — Sonrió empezando a comer

— No es nada — Se sorprendió viendo cómo ahora comía muy rápido — Nat... no se irá el plato si comes moderadamente — Posó la mano en su hombro — ¿Estás bien? ¿Ocurre algo? — Decía preocupada

— Estoy bien — Se dio cuenta de su actuar notando cómo su bebé se acomodaba en su pecho quedándose dormida

— Bueno... — Dijo sin insistir, no quería pelear, no se le antojaba no estar cerca suyo o dormir a su lado, peor aún sentir cómo era fría y distante

— Sólo algo cansada — Alzó la mirada conectando sus ojos con los de ella, se acercó a besar su mejilla — Pero en serio me gusta lo que hiciste para cenar — Asintió comiendo de forma pausada

— Me alegra — Sonrió viéndola con atención — ¿Quieres que lleve a Cassie a dormir?

— No, quiero sentirla un ratito mientras estoy en casa, por favor — Meció a su bebé con cuidado

— De acuerdo — Sonrió viéndolas juntas — ¿No has pensado en darte unos meses para quedarte en casa? Dijiste que estaba entre tus planes pasar los últimos meses con Cassie antes de que vaya a kinder

— Faltan unos tres años para eso — Rio con suavidad — Pero tienes razón, quiero tener a mi bebé mientras aprende a decir más palabras y empieza a caminar bien, creo que haré dos recesos, unos meses ahora y otros meses antes de que llegue al kinder

— Es una gran idea, así podríamos pasear en familia, las dos con Cassie

— Sería lindo — Afirmó con una sonrisa viendo a su bebé y a su esposa — Voy a hablarlo en la oficina

— Podríamos irnos lejos... sabes que me gusta estar apartada del mundo entero sólo con ustedes

— Me gusta la idea — Sonrió viendo su plato vacío y acomodando a Cassie en su hombro — Iré a acostar a Cassie

— Lavaré todo y las alcanzo arriba — Decía emocionada

— Perfecto

Natasha no podía suprimir su emoción por dormir, a la vez tenía culpa por lo mismo, pero lidiaba con esa vida doble o triple de algún modo, pues a Maria no le podía decir que se llevaba cada vez mejor con Wanda y tampoco que soñaba con ella, a Wanda no le hablaba de su relación con Maria que por momentos pendía de un hilo y tampoco que soñaba con ella; a la Wanda de sus sueños le podía decir de todo, pero nunca le hablaba de Maria, sentía que sería cruel por más que ella no sea real.