High Infidelity | Wandanat

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No sabía si era el tiempo apropiado de hacerlo, aunque dadas las circunstancias ninguno lo era, no sabía ni siquiera cómo entrar a esa casa o porque no estaban dentro si era la casa de Wanda.

— No

— ¿No qué? — Preguntó Natasha confundida

— Estás pensando en si tu esposa se acostó con mi Natasha, estoy muy segura de que no — No lo estaba, pero no podía decirle lo contrario

— ¿Y qué hacemos?

Wanda sólo sonrió entrando a su casa, subió las escaleras con calma, Natasha estaba paranoica viendo a todos lados entraron a la habitación principal, la otra Natasha estaba sentada sola.

— Te estaba esperando... — Para Natasha era muy extraño escuchar su propia voz salir del cuerpo de otra persona que lucía exactamente igual a ella

Wanda frunció el ceño sintiéndose extraña al sentir los brazos de su esposa alrededor de su cintura besando su mejilla y cuello.

— Nat... — Se alejó tomando las manos de su esposa y dando un paso hacia atrás

— ¿Qué sucede? — Le pareció extraño su rechazo

— Dejémonos de estupideces — Natasha entró rápido a la habitación, quería a su mujer de vuelta

— ¿Qué mierda? — Emitió la otra Natasha

— ¿Dónde está Wanda? — Le preguntó a la otra versión de su mujer

— ¿Qué mierda has hecho ahora, Wanda? — Habló la otra Natasha llevándose las manos a la cabeza, sentía que estaba al borde de tener una crisis nerviosa

— Láska... ya volvimos — Escucharon la voz de quien faltaba en tan animada reunión — Los niños se quedaron viendo televisión abajo... — La puerta se abrió y se quedó sorprendida por lo que sucedía en su habitación

— Amor — Natasha se acercó a abrazar a su esposa — Te extrañé tanto...

Wanda ni siquiera reaccionaba, veía a alguien igual a ella y a otra versión de Natasha, mientras su mujer estaba en la cama o ya ni siquiera sabía lo que pasaba.

— ¿Qué sucede? — Preguntó asustada

La otra Wanda rodó los ojos hacia un lado se acercó a su distinta versión y con un movimiento suave de la mano hizo que despierte de la ilusión en la que la había envuelto.

— Natasha... — Habló sintiendo sus ojos llenarse de lágrimas, Natasha sostuvo a su esposa con fuerza

— Shhh... ya está, ya pasó todo, amor... estás bien y conmigo — Sentía a su esposa aferrarse a ella con fuerza, le partía el corazón haberla puesto en esta situación

— ¿Qué mierda, Wanda? ¿Qué demonios has hecho? — Decía la otra Natasha tomando a su esposa de los brazos — Creí que teníamos una vida increíble y estábamos solucionando nuestro matrimonio, pero te deslindaste de la responsabilidad dejándome a otra... a otra pobre chica que... mierda, Wanda, estás realmente trastornada... ¿Qué mierda? — Se llevó las manos al rostro — Tú no puedes jugar así con la vida de las personas... ¿No podías siquiera hacerte cargo de ti misma? Por primera puta vez

— Tú lo único que has hecho ha sido lastimarme...

— Wanda, deja de hacerte la víctima por tus propias decisiones, esto no es algo que te pasó, es algo que provocaste, una completa extraña para mí te reemplazó de manera tan ideal que debí saber que no eras tú... — Estaba confundida y decepcionada, pero no sorprendida

Natasha veía como esas dos versiones suyas seguían peleando, pero sólo estaba centrada en su mujer, en que ella esté bien.

— Quiero ver a Cassie ¿Dónde está ella? — Preguntó rápido Wanda después de asimilar todo, lo que más le importaba era su bebé, siempre sería así