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I'm Not Ready

Nada, ni un presentimiento, ni un indicio, nada, la ansiedad la gobernaba por completo.

La aceptación de la muerte de alguien viene acompañada de un duelo, la negación es la primera etapa, una donde la persona no quiere aceptar la inminente verdad, cuando aún se cree que todo es un mal chiste o un sueño del cuál despertará y luego recordará como una anécdota, pero es real.

—Alto... ¡Alto! —Wells exclamó.

Ella soltó un quejido de frustración. —¡Esto no está funcionando! —exclamó.

Después de haber detenido a Snart y Rory, Jennifer pasaba más tiempo en los laboratorios después de que todos se fueran o antes de que todos llegaran.

—No es que no esté funcionando, usted está desconcentrada —explicó—, una vez más —pidió.

—Enfoque los objetivos, y solo desvíe las pelotas de tenis —dijo y se acercó de nuevo a la máquina para activarla.

—¡Una cosa antes! —exclamó—, ¿cómo me afectó la onda? Hemos practicado y no sé ni siquiera de qué van mis poderes —expresó.

El mayor resopló. —Ondas de espectro electromagnético, y de espectro radioeléctrico —dijo—, usted usó el microondas, y posteriormente encendió la televisión y fue cuando la onda la golpeó y perdió la conciencia —se acercó en su silla de ruedas a ella.

—Es por eso que puede lanzar las esferas de energía, crear campos de fuerza, puede manipular y ver las longitudes de onda del espectro electromagnético —se acomodó los lentes.

—¿Y los presentimientos? —ella preguntó.

—Jennifer, así como la onda y los poderes afectaron a este sujeto, Tony Woodward y lo volvieron más violento, sus conocimientos y sentimientos de usted fueron compensados —explicó.

Jennifer suspiró. —¿Así que me volví en una especie de psíquica? —preguntó casi sin creer las palabras de su mentor.

—Solo diría que usted tiene una especie de conexión que con sus sentidos ampliados, le permite saber acerca de los más cercanos a usted —mencionó.

—Bien... Supongo que esto solo es el comienzo, porque... Siento que va a decir que puedo hacer mucho más con mis poderes —bufó.

—Exacto, ahora —Wells regresó a su lugar en la silla de ruedas y activó la máquina de pelotas.

Primero eran una por una, y Jennifer las desviaba con sus poderes, pronto comenzaron a ser más frecuentes, y fue cuando empezó a perder el control.

—¡No! ¡No! ¡Alto! —Jenny se cubrió con los brazos la cara para evitar ser golpeada.

—A ver, ¿por qué no me dice qué es lo que la está distrayendo para que podamos seguir? —Wells se mostró interesado en lo que Jennifer pudiera decir.

—Primero que nada, tengo poderes —expresó—, segundo, no he tenido noticias de Oliver en semanas, pero de alguna forma sé que está vivo, porque no he sentido ese feo presentimiento que sentí con una amiga o la vez que su madre murió —continuó—, y tercero, el hombre del traje amarillo sigue allá afuera y quiere matarme a mí y a mi hermano, doctor Wells, tengo derecho a estar distraída por todo eso.

—Lo tienes, sí —habló Wells—, pero hay algunas cosas de las que no tienes el control, y no me refiero a tus poderes, Jennifer, me refiero a... Tu alrededor —se acercó a ella de nuevo.

—Lo mejor que puedes hacer... Es aprender a defenderte por si ese velocista vuelve a atacarte y... —guardó silencio bajando la mirada.

—¿Y...? —preguntó ella.

Reputation ⟨⟨Oliver Queen⟩⟩Donde viven las historias. Descúbrelo ahora