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Tess:

Ya era hora de irnos, por alguna razón lo sentía como un nuevo inicio, no quería ir a la escuela, no quería enfrentarme a lo que pudiera suceder, a todas las preguntas que iban a llegar, pero tampoco quería matarme con ese tipo de pensamientos, acabamos de iniciar el recorrido de regreso, aun me quedaban algunas horas de felicidad antes de llegar a ese lugar  que me continuaría atormentando...

Hunter notó la ansiedad de Tess mientras avanzaban en el camino de regreso a la escuela. Sin decir una palabra, simplemente tomó su mano. La calidez de su mano envolviendo la de Tess la hizo sentir un poco más segura, un poco más en paz.

Tess miró a Hunter, agradecida por su gesto. Él la miraba con esos ojos azules tranquilizadores que siempre parecían entenderla sin necesidad de palabras.

—Gracias —murmuró Tess, apretando un poco más la mano de Hunter.

Él le sonrió suavemente y continuaron su camino en silencio, pero con una conexión reconfortante entre ellos. A medida que las horas pasaban , Tess pensaba menos en lo que pasaría cuando llegaran.

Finalmente, llegaron a su destino, sacaron sus cosas y se fueron adentrando en el bullicio de la escuela. Tess respiró hondo, tratando de prepararse para lo que vendría. Aunque la ansiedad seguía latente en su pecho, se sentía un poco más fuerte con Hunter a su lado.

Apenas entraron al edificio, fueron recibidos por los murmullos y las miradas curiosas de sus compañeros.
Ninguno de los dos se percato como de un momento a otro Ally llego con los brazos abiertos a darle un abrazo a Hunter.

Tess observó con una mezcla de sorpresa y confusión cómo Ally se abalanzaba sobre Hunter con los brazos abiertos. Un nudo se formó en su estómago, preguntándose qué significaba eso. De nuevo considerado los sentimientos de Ally por Hunter, pero ahora no podía evitar sentirse un poco incómoda.

Hunter parecía sorprendido por el gesto de Ally, pero rápidamente recuperó su compostura y devolvió el abrazo con una sonrisa amistosa.

—¡Hola, Ally! —dijo Hunter con voz alegre—. ¿Cómo estás?

Ally se separó del abrazo y sonrió ampliamente.

—¡Hola, Hunter! Estoy bien, gracias. ¿Cómo te fue en tu viaje?

Tess observaba la interacción con atención, intentando descifrar los sentimientos entre ellos. La forma en que se abrazaron, la chispa en los ojos de Ally... algo no cuadraba del todo.

—Fue genial, gracias —respondió Hunter, con una mirada rápida hacia Tess, como si quisiera asegurarse de que ella no se sintiera excluida de la conversación.

Ally finalmente miró a Tess y le dedicó una sonrisa, aunque Tess notó que no era tan genuina como de costumbre.

—Hola, Tess. ¿Cómo estuvo tu viaje?

Tess respondió con una sonrisa forzada, sintiéndose un poco incómoda ante la situación.
--Muy bien gracias... Respondió algo desanimada luego de quedarse con los brazos abiertos esperando el recibimiento de Ally, Hunter noto el cambio repentino de Tess, observó con disimulo asegurándose de que su atención estuviera distraída cuando alguien paso y así con un movimiento ágil pero sutil, deslizó su mano hacia su cintura , apretando suavemente pero con firmeza. El gesto fue rápido, como si fuera un gesto casual. Un medio abrazo que expresaba su afecto, pero que también ocultaba algo más profundo bajo la apariencia de normalidad. Los ojos de Hunter se encontraron con los de Tess.
Ally noto lo que sucedia asi que se despidió, claramente con una actitud bastante diferente a la que tuvo cuando llego.
--¿A que se debe eso? pregunto Tess ante la acción de hunter

Hunter miró a Tess con una sonrisa suave, tratando de tranquilizarla.

—Solo quería recordarte que estoy aquí para ti, Tess. No importa lo que pase, siempre puedes contar conmigo, creo que te voy a cansar de tanto repetírtelo, pero quiero que siempre lo tengas en cuenta.

Tess asintió, sintiéndose reconfortada por las palabras de Hunter. Aunque aún se sentía un poco desconcertada por la actitud de Ally, la presencia reconfortante de Hunter le daba fuerzas para enfrentar lo que sea que estuviera por venir.

—Gracias, Hunter.... —dijo Tess, sintiendo un poco de alivio.

Los dos se miraron por un momento, compartiendo un entendimiento silencioso que parecía decir más de lo que las palabras podían expresar. Tess sintió un nudo en la garganta, pero esta vez no era de ansiedad, sino de gratitud por tener a alguien como Hunter a su lado.

—Vamos, tenemos que ir a dejar nuestras cosas —dijo Hunter finalmente, rompiendo el momento de silencio.
Se separaron y cada uno fue a su respectiva habitación, Mientras Tess arreglaba sus cosas fue asumiendo lo que estaba pasando, estaba de nuevo en la escuela, ya no estaría todo el tiempo con Hunter, tendría que enfrentarse de nuevo con chismes, y personas que no la comprendían, maestros que no valoraban su esfuerzo, todo esto mientras intentaba no perder sus amigos por los sentimientos que tendría que enfrentar....

Al terminar de organizar todo, estaba tan cansada que cayó rendida en su cama en un sueño tan profundo que al dia siguiente le costó trabajo despertarse. Cuando finalmente abrió los ojos, se encontró con la luz del amanecer filtrándose por la ventana de su habitación. Se estiró, tratando de despertarse por completo, pero aún se sentía agotada.

Tess se levantó de la cama y se vistió con lentitud, tratando de prepararse mentalmente para el día que tenía por delante.

Bajó al comedor para desayunar y se encontró con Hunter, quien ya estaba allí, tomando una taza de café.

—Buenos días —saludó Tess con una sonrisa cansada.

Hunter le devolvió la sonrisa.

—Buenos días, dormilona. ¿Cómo dormiste?

Tess se encogió de hombros.

—Bien, supongo. Aunque me siento un poco cansada todavía.

Hunter asintió comprensivamente.

—Bueno, no te preocupes. Después de un par de días te acostumbrarás de nuevo a la rutina de la escuela.

Tess asintió, aunque no estaba completamente convencida. Sabía que no sería fácil, pero estaba decidida a hacerlo lo mejor que pudiera.

Después de desayunar, Tess y Hunter se dirigieron juntos a sus primeras clases del día. Se sentaron juntos mientras llegaban el resto de estudiantes, ya que sus respectivos lugares en el aula quedaban en extremos separados. Durante la clase, intercambiaron algunas miradas significativas.

Al finalizar la clase, Tess se dirigió a encontrarse con Hunter, pero se dio cuenta de que Ally lo había tomado de la mano y lo había llevado a un lugar apartado.
Tess sabia que ella misma fue la que le dijo a Hunter que continuaran las cosas para ver que les deparaba el futuro, solo porque no quería lastimar los sentimientos de su amiga, incluso sin darse cuenta que estaba lastimando sus sentimientos propios.

Sonó el timbre del primer descanso, ya era hora de regresar  a clase y al parecer Hunter y Ally continuaban hablando ya que ninguno de los dos había llegado, Tess decidió no darle importancia.

Cuando finalmente llegaron al aula, ambos seguían sosteniendo la mano del otro y así durante todo el dia, al sonar el ultimo timbre Tess agradeció para sus adentros y salió rápidamente del lugar.

La brisa fresca del atardecer acariciaba suavemente el rostro de Tess mientras caminaba sola por el campus. A medida que el sol se ocultaba en el horizonte, la sensación de soledad parecía envolverla aún más, haciéndola sentir pequeña e insignificante en medio del vasto mundo que la rodeaba.

Cada paso que daba resonaba en el silencio de la noche, recordándole una vez más lo sola que se sentía. A pesar de estar rodeada de personas, se sentía como si estuviera caminando sola en la oscuridad, sin rumbo ni dirección.

Sus pensamientos se encontraban en un torbellino de emociones, incapaces de encontrar un punto de calma en medio de la tormenta.

Cruces del destino // HuntessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora