Tess:
Veía lentamente como el sol se ocultaba, mientras yo perdía el tiempo esperándolo a él, sabía que yo había estado distante en el poco tiempo que había pasado luego de regresar de nuestro viaje, pero no podía evitar sentirme traicionada. Miré el teléfono, sin ningún mensaje ni llamada perdida. Mis pensamientos divagaban entre la esperanza de que Hunter apareciera y la desesperanza que se apoderaba de mí al pensar que él estaba con Ally.
Finalmente, la última luz del día se desvaneció, y con ella, mi esperanza. Me levanté del banco donde había estado sentada y empecé a caminar de vuelta a casa, luchando contra las lágrimas que amenazaban con caer. Justo cuando estaba a punto de girar la esquina, escuché una voz familiar llamándome.
—¡Tess, espera! —era Hunter, corriendo hacia mí con la respiración entrecortada.
Me detuve y me volví hacia él, sorprendida pero también aliviada de verlo.
—Hunter, ¿qué estás haciendo aquí? —pregunté, tratando de sonar más calmada de lo que realmente me sentía.
—Lo siento tanto, Tess. Llegué tarde. No quería dejarte esperando, pero... —dudó un momento antes de continuar—. Necesitaba hablar contigo, aclarar las cosas.
Lo miré, sintiendo una mezcla de emociones. Quería estar enojada, pero la sinceridad en sus ojos hizo que fuera difícil.
—Está bien, Hunter. Hablemos —dije, tratando de mantener mi voz firme.
Nos dirigimos a un pequeño parque cercano, donde nos sentamos en un banco apartado. El silencio entre nosotros era palpable, pero finalmente Hunter rompió el hielo.
—Tess, sé que esto es difícil para ti, y lo siento mucho. No quería lastimarte ni a ti ni a Ally. Todo esto es muy confuso para mí también —dijo, mirándome con preocupación.
—Hunter, solo necesito saber la verdad. ¿Qué sientes realmente? —pregunté, enfrentándolo con la mirada.
Hunter suspiró, pasando una mano por su cabello.
—Tess, lo que siento por ti es real. Esa semana juntos fue increíble y me di cuenta de cuánto significas para mí. Pero también tengo que ser honesto contigo; Ally ha sido una parte importante de mi vida durante mucho tiempo, y ahora ella quiere intentar algo más. Estoy confundido y no sé qué hacer —confesó, su voz cargada de sinceridad.
Sentí una mezcla de alivio y dolor. Al menos ahora sabía la verdad, aunque eso no hacía que doliera menos.
—Hunter, agradezco tu honestidad. Pero necesito tiempo para pensar, para decidir qué es lo mejor para mí. No quiero ser la opción de nadie —dije, soltando sus manos suavemente.
Hunter asintió, su mirada reflejando el peso de su propia confusión y culpa.
Nos quedamos en silencio por un momento, escuchando el suave susurro del viento a través de los árboles. Sentí cómo las lágrimas comenzaban a caer, pero me esforcé por mantener la compostura.
Quería irme de ese lugar lo antes posible, pero al ver el dolor en los ojos de Hunter, decidí esperar e incluso concentrarme en mis propios sentimientos
—No quiero perderte, pero tampoco quiero que te sientas atrapada en esta situación—respondió, su voz temblando ligeramente.
—Nos vemos, Hunter. Cuídate —dije, comenzando a caminar hacia la salida del parque.
Mientras me alejaba, sentí una mezcla de alivio y tristeza. El peso de la incertidumbre se hacía presente con cada paso que daba. El parque, ahora envuelto en la penumbra, parecía un reflejo de mis propios sentimientos: un lugar familiar que se había vuelto extraño y sombrío.
Llegué a mi habitación y me dejé caer en la cama, sintiendo el agotamiento emocional golpearme con fuerza. Miré el techo, intentando procesar todo lo que había sucedido. ¿Cómo llegamos a este punto? Todo parecía tan claro y perfecto durante nuestro viaje, pero ahora era un laberinto de emociones y decisiones difíciles.
Recordé cada momento de ese viaje: las risas compartidas, las miradas cómplices, los sueños susurrados bajo las estrellas. Todo parecía tan auténtico, tan real. Pero ahora, de vuelta a la realidad, los sentimientos se habían vuelto confusos y pesados.
Tomé mi diario y comencé a escribir, intentando aclarar mis pensamientos. Las palabras fluyeron, describiendo la belleza de lo que había sido y el dolor de lo que ahora era. Mientras escribía, sentí que un pequeño peso se levantaba de mi pecho, aunque la confusión permanecía.
Los días siguientes pasaron en una especie de niebla. Me concentré en mi trabajo y en mis amigos, intentando mantenerme ocupada. Sin embargo, cada vez que el teléfono sonaba o recibía un mensaje, mi corazón daba un vuelco, esperando que fuera Hunter. Pero él no se comunicó.
Sentía como Hunter ya no existía para mí, pero al menos ya no iba a ser la opción de nadie, no lo necesitaba, me tengo a mi misma y con eso me bastaba, volví a ser un cero a la izquierda, nada diferente a como era antes de llegar aquí, muchos rumores empezaron a esparcirse, Hunter y Ally se habían vuelto inseparables, y eso solo alimentaba más los rumores. Algunas personas decían que Hunter había estado con las dos al mismo tiempo, mientras que otros aseguraban que yo había sido la que intentó interponerse en su relación. Era difícil ignorar las miradas y los murmullos cuando pasaba por los pasillos del instituto.
El estrés aumentaba, la desesperación y la ansiedad comenzaron a apoderarse de mí. Cada vez me resultaba más difícil concentrarme en las clases, y la sensación de aislamiento crecía. No podía evitar sentirme sola, como si todos estuvieran en mi contra. Incluso mis amigos parecían incómodos, sin saber cómo manejar la situación.
Una tarde, después de una jornada particularmente dura en la escuela, decidí caminar sin rumbo fijo. El aire fresco ayudaba a despejar mi mente, pero las dudas seguían ahí, atormentándome. ¿Había hecho bien en alejarme de Hunter? ¿Había alguna manera de recuperar lo que habíamos tenido?
Hunter:
Me sentía distante a Tess, nos alejamos después de esa conversación, tal vez ella quería su espacio y yo no quería interferir en eso, a veces la veía escondida en el salón de arte o detrás de las gradas escuchando música mientras su mente se veía perdida en sus libros, extrañaba a Tess, pero a la vez sentía que si nos habíamos alejado era por qué lo nuestro no estaba destinado a ser, claramente aún quería estar ahí para ella, quería ser la persona en la que ella podría resguardarse cuando lo necesitara pero si la cosas no se daban, no quería forzar algo que puede que no funcionara. Seguí pasando mis tardes con Ally, disfrutaba estar con ella, era divertido y me recordaba a otro sentimiento que en algún momento llegué a tener por otras personas, bueno, por ella...
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Cruces del destino // Huntess
RomanceEn la tranquila escuela de Pyrgoi Hills Academy, tres personas se encontraban enredadas en un delicado equilibrio de amor y deseo. Ally, una adolescente que amaba los videojuegos y poseía una risa contagiosa, así como ojos llenos de sueños. Hunter...