La vacilación en Riftan no era característica de él. Dejó escapar un suspiro.
— Los invitados llegarán en unas semanas. Serán de veinte a treinta personas. Me gustaría tener preparadas las mejores habitaciones para ellos, así como un pequeño festín de bienvenida.
Los ojos de Maxi se agrandaron. Había estado esperando invitados para la primavera. La noticia de que llegarán tan pronto la tomó con la guardia baja.
— ¿Puedo preguntar... a quién... estamos esperando?
— Probablemente una inspección enviada por el rey. También envía a los caballeros reales... - Riftan se calló, lanzando a Maxi una mirada furtiva. Sus sensuales labios se torcieron brevemente como si estuviera preocupado por lo que estaba a punto de decir, pero toda emoción se desvaneció cuando añadió casualmente — y la princesa Agnes.
La respiración de Maxi se entrecortó. Ella miró tontamente a Riftan. La princesa con la que alguna vez estuvo conectado en conversaciones matrimoniales llegaría al Castillo Calypse. Maxi no sabía cómo se suponía que debía reaccionar ante tal noticia.
Cuando ella no respondió, Riftan continuó con un toque de agitación.
— Por supuesto, ella sólo viene a inspeccionar la tierra a instancias del rey. Estoy seguro de que le asignó la tarea porque ella es el único miembro de la familia real que conozco y que ya tiene una relación amistosa con los Caballeros Remdragon.
— Y-Ya veo.
Maxi tragó con dificultad. Había usado la palabra "conocido", pero aún así tocó una fibra sensible. Eran camaradas que habían luchado uno al lado del otro durante la Campaña del Dragón; una relación pasajera era improbable. Y si había que creer a Ruth, la relación de Riftan y la princesa parecía lo suficientemente cercana como para que todos pensaran que se casarían una vez terminada la campaña.
No queriendo ser vista como una mujer consumida por los celos, Maxi tragó saliva a pesar del nudo en su estómago y se obligó a parecer tranquila. Ella sonrió.
— Ha-Haré... que los sirvientes preparen... las mejores habitaciones. ¿Ha-Hay algo más... que deba hacer?
La mirada de Riftan la taladró.
— Sólo necesitas instruir a las sirvientas para que hagan preparativos minuciosos para la bienvenida. No te preocupes más que por eso.
Su respuesta fue brusca y su atención volvió a su escritorio.
Maxi estaba demasiado atrapada en sus propias emociones como para preocuparse por su actitud extrañamente fría. Ella se levantó apresuradamente de su asiento antes de que él pudiera notar su angustia.
— Entonces... i-iré a informarles a-ahora mismo.
— Te lo dejo a ti — dijo Riftan sin levantar la mirada.
Maxi salió inmediatamente de la habitación y bajó apresuradamente las escaleras. Su mente aún estaba confusa cuando buscó a Rodrigo para informarle la noticia. Fue en ese estado de agitación interior que Maxi intentó procesar la inminente visita de la princesa.
¿Era normal que una mujer de origen real visitara la propiedad de un hombre que se había negado a casarse con ella? ¿Qué razón tendría la princesa para visitarlo? Era posible que el rey Reuben aún no hubiera renunciado a convertir a Riftan en su yerno. La inspección podría ser simplemente una excusa para que la princesa venga y se gane el corazón de Riftan.
La idea llenó a Maxi de temor. Es posible que Riftan no desee divorciarse de ella en este momento, pero no había garantía de que eso no cambiaría. ¿Qué haría ella si la princesa empleaba todos sus encantos para seducirlo?
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Debajo del roble ~ Libro 02
FantasySegunda parte del matrimonio disfuncional de una tartamuda y un bruto que esta locamente enamorado de ella. P.D: En lo personal, amo a Riftan, aunque sea bruto pa sus cosas. RECUERDEN Esta historia no es mía, solo la traduzco para mi deleite. Porqu...