Cuando Sigyn nació, su destino ya estaba decidido, la muerte de sus padres no fue un impedimento para que el acuerdo entre Odín y su padre, Bragi, se llevara a cabo. Sigyn se convertiría algún día en la reina de Asgard al casarse con Thor. Desde que...
Gracias por llegar hasta aquí. Ojalá me puedan seguir en instagram: ximena.peredo7, me dicen y los sigo de vuelta. *********
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—Majestad, debería ir a descansar, nosotros nos encargaremos de los asuntos con Alfheim.
—Volstagg, ¿cuántas veces debo decirte que no me digas "majestad"? —Le dijo Sigyn soltando un suspiro y apoyando la cabeza en el respaldo de la silla—. Sigo siendo yo.
—Con la diferencia de que ahora es la reina de Asgard —intervino Fandral haciendo una reverencia—. Majestad —dijo en tono burlón. Sigyn lo miró mal y negó con la cabeza.
—¿Alguna noticia de Thor o mi esposo? —Preguntó. Ambos la miraron divertidos—. ¿Qué les causa tanta gracia? — Sigyn frunció el ceño.
—Nunca pierdes la oportunidad de llamarlo así, ¿verdad? —Contestó Fandral entre risas.
—¿Quieren dejarme en paz? —Dijo arrojándoles lo primero que encontró. Sif entró a la habitación y cuestionó con la mirada a Sigyn, quien señaló a los dos guerreros con la cabeza y se cruzó de brazos—. Están molestándome.
—No es buena idea hacer enojar a una mujer embarazada —advirtió Sif—. Y menos si es la reina y puede mandarlos decapitar.
—Entonces, ¿saben algo de ellos? Hace un mes que se fueron y...
—Sigyn, ya deja de preocuparte, sabes que esas cosas tardan y le va a hacer daño al bebé si te sigues preocupando —dijo Sif mirando el vientre redondo de la diosa, ésta soltó un suspiro y pasó sus manos por su vientre.
—Majestad, iremos con Heimdall para preguntarle si sabe lo que ha pasado y vendremos a avisarle en seguida —dijo Volstagg. Sigyn asintió, entonces los dos guerreros dejaron la habitación.
—Falta poco para que nazca y quiero que Loki esté aquí —comentó Sigyn una vez que estaba a solas con Sif—. No quiero que ocurra lo que con mi madre, mi padre no estuvo aquí y... —se mordió el labio, Sif caminó hasta ella y le pasó un brazo por los hombros.
—Ya llegarán.
—¿A ti no te preocupa? —Sif negó con la cabeza—. Están en Midgard, ¿no crees que...?
—Confío en Thor, además la mortal no lo recuerda.
—Fuiste con Heimdall, ¿cierto? —Sigyn la miró perspicaz, la otra se quedó boquiabierta y trató de hablar, pero la otra comenzó a reír—. No digas más, me ha quedado claro —siguió riendo pero dejó de hacerlo cuando sintió un fuerte dolor en el vientre. Apretó la mandíbula y encajó las uñas en los brazos de la silla.
—¿Qué ocurre? —Sigyn soltó un grito de dolor—. ¿El bebé? —Ella asintió.
Sif la ayudó a pararse y la llevó hasta su habitación ya que los sanatorios quedaban bastante lejos. Sigyn se recostó en su cama, Sif tuvo la intención de salir por ayuda pero la otra la tomó del brazo y no la dejó.
