El día había comenzado como cualquier otro en Astoria, la ciudad costera bañada por el sol del mediodía. Las calles estaban llenas de vida, con comerciantes gritando sus ofertas en los bulliciososmercados y turistas disfrutando del pintoresco paseo marítimo. Lucas Ramírez, recién ascendido sargento en la Coalición, caminaba por las calles con una mezcla de orgullo y preocupación en su rostro. Aunque era un día normal en apariencia, algo en el aire le hacía sentir que el destino de la ciudad estaba a punto de cambiar.
Desde la base militar en las afueras, el suboficial había recibido informes sobre los extraños objetos que seacercaban a la costa. Inicialmente etiquetados como meteoritos, nadie esperaba que fueran algo másque simples fenómenos astronómicos. Los objetos no habían mostrado signos de una velocidad terminal, sino todo lo contrario, parecían estar frenando su descenso de manera controlada. Esto había puesto en alerta a la Coalición, que seguía vigilando la situación con creciente preocupación.
Mientras caminaba por el paseo marítimo, Lucas recordaba la tranquilidad de las mañanas anteriores, cuando su mayor preocupación era asegurarse de que su equipo estuviera listo para las rutinas diarias de entrenamiento. Ahora, con la sombra de lo desconocido acechando sobre la ciudad, cada paso se sentía cargado de anticipación y preparación.Observó cómo los civiles parecían despreocupados, disfrutando del sol y la brisa marina como si nada pudiera perturbar su día. La imagen de la normalidad contrastaba con la tensión que sentía en el fondo de su mente. Sabía que debía mantener la calma y la compostura, preparándose para lo peor mientras esperaba lo mejor
En la base, los oficiales discutían planes de contingencia y ajustaban estrategias de defensa. Las comunicaciones estaban activas, los vehículos listos para desplegarse en cualquier momento. El Sargento se mantuvo en contacto constante con su suboficial Martínez, asegurándose de que cada detalle estuviera en su lugar para lo que podría venir.
Al llegar al extremo del paseo marítimo, Lucas se detuvo un momento y observó el horizonte. La línea donde el mar se encontraba con el cielo era impecable, pero ahora estaba marcada por la presencia silenciosa de los objetos en el radar. Eran puntos lejanos en el horizonte, pero cada vez más cercanos con el pasar de los minutos.
El reloj marcaba la hora de comer cuando recibió la llamada que había estado esperando. Era el momento. Las primeras medidas de precaución estaban en marcha mientras las sombras de los objetos se hacían más nítidas contra el azul profundo del océano. La calma se desvanecía lentamente, dando paso a la anticipación de lo que vendría a continuación.
Lucas se volvió hacia Martínez y los otros soldados que lo rodeaban, compartiendo una mirada cargada de determinación. Sabían que este día sería recordado en los libros de historia de Astoria, pero nadie podía anticipar lo que realmente les esperaba cuando los misteriosos objetos finalmente hicieran contacto con la tierra.
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ECLIPSE
Fiksi IlmiahEclipse: Saga Cronos - Libro 1 En el mundo de "Eclipse", la humanidad enfrenta una invasión alienígena que amenaza con destruir todo lo que conocemos. La historia sigue a Lucas Ramírez, un sargento recién ascendido en la Coalición, mientras lucha po...