Reborn At Boot Camp: General Don't Mess Around!

Capítulo 183: El pequeño zorro valiente

Era un zorrito valiente. No tenía miedo en absoluto.

Escondido en la oscuridad, mientras esperaba que apareciera los criminales, Xia Jinyuan sonrió. —Está bien, cuídate.

Como ella quería participar en un combate real, él le concedería esta oportunidad. Él despejaría los obstáculos del exterior antes de que ella saliera.

Lentamente, Gao Yiyang se acercó a Ye Jian y se sentó a su izquierda. Mirándola fijamente al oído, le dijo. —Puedes... ponerte en contacto con la gente de afuera. —Fue una frase afirmativa.

—Sí, puedo. —Ye Jian se recogió el pelo largo y negro, dejando al descubierto los diminutos auriculares negros—. Son soldados del ejército chino y están afuera ahora mismo. Resolverán los problemas que hay afuera antes de medianoche y nos rescatarán.

Gao Yiyang cerró los ojos temblando. Cuando los abrió, de nuevo, trató de ocultar su burla y dijo. —Entonces, ahora solo estamos esperando, ¿no?

Pero ¿qué quería decir con "saldría de aquí si pudiera"?

Gao Yiyang quería preguntarle, pero no pudo.

Ella había establecido contacto con la gente de afuera hace una hora, pero en la última hora de sufrimiento permaneció en silencio y se lo ocultó a Gao Yiyang.

¿Qué significaba? ¿Que no confiaba en mí? ¿Que no se molestaría en hablar conmigo?

Él se sintió profundamente frustrado.

El chico parecía un poco enojado y molesto. Ye Jian entrecerró los ojos y lo miró con calma. Sonriendo, dijo. —No te lo dije antes, porque te pondrías más el nervioso si no recibieras noticias de ellos. Y ahora estoy siendo sincera contigo porque estoy segura de que alguien nos va a rescatar. Todo lo que tenemos que hacer es esperar.

Hizo una pausa al ver que el chico intentaba ocultar sus emociones cambiantes con una mirada indiferente. Su mirada se hizo más brillante. —¡Si nadie se comunica conmigo, eso significa que este dispositivo de comunicación es inútil!

¿Quiso decir que sería mejor para mi si no me diera esperanza desde el principio?

Porque si se perdía la esperanza, él sería el que eventualmente saldría herido.

La expresión de Gao Yiyang se congeló, bajó los ojos y los hombros débilmente.

No había nada que pudiera decir. Ye Jian era mucho más considerada que él.

Ella se hizo cargo de sus sentimientos en un momento tan insoportable... Enterrando su cabeza en sus brazos, él dejó escapar una sonrisa amarga.

Tal como había dicho su padre, su supuesta inteligencia y su inviolable autoestima no era más que una broma para los demás.

Como dejo de preguntar, Ye Jian dejó de explicar. Su explicación fue bastante clara. Si Gao Yiyang podía entender o no era su problema.

El tiempo pasó lentamente. A las 10:30 de la noche, Red Scorpion apareció cerca del karaoke junto con un estudiante tembloroso que caminaba a su lado. —Pasen por aquí. Recuerden. ¡Entregan la mercancía y reciben el dinero! ¡Sin el dinero, no se molesten en volver!

El chico movió los labios intentando decir algo. Al ver la mirada feroz en el rostro de Red Scorpion, sujetó con fuerza a la bolsa negra y se marchó hacia el lugar pecaminoso.

No podía mirar atrás. ¡Red Scorpion, —que nunca hacía tratos en persona—, no le permitió mirar atrás!

—Está aquí, Nick. —Alguien cerró la ventana e informó a Nick, que estaba esperando su mercancía en el karaoke. Hoy él también era el objetivo número uno perseguido por la Interpol—. Como de costumbre, Red Scorpion envió a su estudiante a entregar la mercancía.

Con una expresión violenta en su rostro áspero, Nick dio una gran calada a su cigarro. Los tatuajes de bestias verdes en sus brazos quedaron al descubierto cuando cruzó sus brazos musculosos frente a su pecho. —Dile que no tengo mucha paciencia.

Lo que dio a entender fue que él debía entregar la mercancía personalmente.