Reborn At Boot Camp: General Don't Mess Around!

Capítulo 1: Pérdida dolorosa

La mujer de la foto tenía rasgos faciales bastantes exquisitos. Su piel clara y suave se veía delicada como la porcelana, especialmente contra el uniforme de trabajo blanco puro.

En la imagen, ella estaba arrodillada en el suelo con un trapo en las manos, haciendo su trabajo como mucama de hoteles, con cuidado y meticulosidad.

Aunque su trabajo era el más sucio y duro de todas las ciudades, todavía mostraba un temperamento tranquilo y estable, como la hierba silvestre que crece en un acantilado.

Si alguien hubiera sabido por lo que había pasado esa mujer en la imagen, estarían admirando espontáneamente su sabiduría sobresaliente y su tenacidad inquebrantable.

¡Pero para la mujer rica que sostenía la foto, la odiaba aún más!

Ye Jian, ¿quieres seguir con vida y tener comodidades? ¡Ah, pero eso depende de mí!

Vestida elegantemente, la rica y joven dama frunció con fuerza sus tiernos labios que estaban cubiertos con un brillante lápiz labial rojo. Mientras miraba la imagen, rayos salieron disparados de sus ojos como un haz de luz fría sobre colmillos de serpiente, fríos y viciosos.

—¡Ye Jian! ¡No mereces vivir! —Dijo la dama rica de mal humor, su tono mezclado con una intensa criminalidad.

¡No perdonaría a nadie, ni siquiera su prima, que conocía todos sus secretos!

¡La vida de los pobres no vale nada! ¡Aquellos que no merecen vivir deben desaparecer obedientemente!

Al usurpar todo lo que le pertenecía a su prima, se había casado con una familia rica y ascendió a la clase alta. Naturalmente, podía lidiar con Ye Jian, su prima que conocía sus secretos.

Pero no podía deshacerse de ella de inmediato, ya que sería difícil explicárselo a la familia de su esposo, quiénes sabían que tenía una prima 'indecente'.

—Reprobaste en el período de prueba y el hotel decidió no contratarte. ¡Debes empacar tus cosas e irte en tres días!

Ye Jian, de 28 años, fue despedida nuevamente, dos meses después de trabajar aquí.

Al igual que en la imagen, tenía un temperamento pacífico y tenaz. De pie frente al gerente del vestíbulo, no se inclinó después de escuchar estas palabras, no entró en pánico al perder su trabajo.

Habiéndose acostumbrado a mantener un trabajo durante dos meses como máximo, se había vuelto poco emocional y mucho más dura.

Mientras sus ojos oscuros de obsidiana miraban pacíficamente al gerente del vestíbulo, Ye Jian habló claramente. —¿Cuándo recibiré mi salario?

—Somos una empresa cotizada. Seguramente obtendrá su salario de 2.000 yuanes. —Mirando esa cara bonita que haría que los pulsos de los hombres se aceleraran, el deseo del gerente Liu le hizo cosquillas.

Hace diez minutos, el gerente de recursos humanos lo criticó porque fue él quien contrató a la mujer que había disgustado a un gran nombre.

Con los ojos fijos en Ye Jian, abrió el cajón de su escritorio, del cual sacó un sobre y lo arrojó.

El sobre que contenía el salario de ella cayó en el suelo. No pudo evitar apretar las manos mientras fruncía el ceño ligeramente.

En ese momento, sonó el teléfono celular en su escritorio. El gerente Liu, que estaba de mal humor, respondió a la llamada.

Maldita sea, debe apagar su teléfono celular más tarde.

—Gerente Liu, sé que eres un hombre que siente un tierno afecto por las mujeres hermosas. Entonces, debes saber qué hacer con Ye Jian, quien sedujo a su maestro a los 14 años. Ten la seguridad de que no te atraparán, simplemente no hagas que la maten. —Una voz suave vino del teléfono celular. Al escuchar esa voz, él pudo decir que era una belleza. —Dómala bien. Si estoy complacida, puedo dar una orden para nombrarte subdirector general del hotel.