Reborn At Boot Camp: General Don't Mess Around!

Capítulo 180: El Mayor Xia en movimiento

Cuando sacó los tampones de su bolso antes, Ye Jian estaba apostando por el ego de un hombre contra la vigilancia de los secuestradores.

Al final resultó que su juicio era correcto.

Ye Jian se apoyó contra la fría pared y exhaló un suspiro de alivio. Llevaba consigo un localizador y un dispositivo de comunicación. ¡Todo lo que tenía que hacer era enviar su ubicación a Xia Jinyuan!

En cuanto a la Interpol...bueno, ¡no confiaba en ellos!

Por otro lado, Gao Yiyang estaba buscando rutas de escape. Splash. Mientras abría una pesada cortina, vio la tenue luz de las farolas a través del vidrio corredizo marrón oscuro.

Lleno de alegría, extendió las manos para empujar la ventana corrediza, pero la ventana permaneció inmóvil. Era evidente que había sido sellada.

—Ye Jian, ven aquí. —En el lugar de darse por vencido, se dio la vuelta y le dijo a Ye Jian, que estaba apoyado contra la pared—: Tenemos que encontrar una forma de abrir esta ventana de cristal.

Gao Yiyang actuó con tanta calma que incluso pudo buscar formas de escapar. Sin duda, su comportamiento tranquilizó un poco a Ye Jian.

No había ninguna cámara de vigilancia en la habitación por lo que no los estaban vigilando. Ye Jian le dio la espalda a Gao Yiyang y se colocó los auriculares en los oídos. Los auriculares no tenían señal debido a la gran distancia. Y luego, sacó el localizador, que era más pequeño que su palma, e ingresó una serie de números. Bip, bip, bip. Pronto se escuchó la señal.

El código que envió pasó por una serie de procesos y transcodificaciones. Finalmente, apareció en el servidor del portátil de Bale.

—¡Xia, ven! —La razón por la que Bale se convirtió en el oficial de policía que se reunió con Ye Jian en el hotel fue porque solía trabajar con el ejército chino. Esta vez, —cuando nadie se acercó para ayudar—, tomó la iniciativa de ofrecer asistencia en la operación del ejército chino.

Tanto Xia Jinyuan como Xu Yu estaban en la habitación. Cuando oyeron la señal del servidor, casi simultáneamente corrieron hacia el frente de la computadora portátil.

Hacer clic, ampliar, localizar, confirmar...En menos de dos minutos, habían identificado la ubicación de Ye Jian.

—Es Kings Cross. Un lugar plagado de drogas, pandillas y burdeles. Maldita sea. Ese lugar está lleno de nuestros enemigos. Es un poco difícil rescatar a Jian. —Dijo Bale enojado. Golpeó la mesa después de ver la ubicación con claridad—. Xia, tienes que atrapar a Red Scorpion. Déjanos a Jian a nosotros.

Xia Jinyuan se sintió aliviado cuando confirmó la ubicación de Ye Jian. Le dijo a Xu Yu. —Nos vamos en tres minutos. —Y luego le dijo a Bale. —Gracias, amigo. Podemos encargarnos de este problema. Pero ahora mismo, deshagámonos de Red Scorpion primero.

Bale no era un policía de misión fronteriza, por lo que no podía ir con Xia Jinyuan. Preocupado, dijo. —Ten cuidado. La policía de Sydney se ha esforzado mucho por controlar ese lugar, pero ha fracasado.

Reflexionó un momento y sacó una pistola de debajo de la almohada de la cama. —Cógela, amigo, la necesitarás.

Xia Jinyuan y Xu Yu tenían armas, pero Ye Jian no.

Xia Jinyuan cogió el arma y comprobó el cargador, que tenía una capacidad máxima de 15 balas. Enarcando las cejas, volvió a montar el arma con destreza. Con una sonrisa elegante pero algo frívola en el rostro, dijo. —Sería mejor si pudiera tener un cargador más con balas completas. Así me sentiría más seguro.

Bale se encogió de hombros sin hacer ningún comentario. Sonriendo, sacó una revista de debajo de su mesita de noche y se la arrojó a Xia Jinyuan. —Buena suerte, amigo.