South Park "Eres mío, Ángel" [Crenny]

LXIX

Me quedé pensando por un momento sobre mi siguiente movimiento. ¿Debería llamar primero a Pip, o tal vez tratar de encontrar a Ken? No creía que Damien se atreviese a hacerle algo sabiendo que su posible (pero hasta ahora, inexistente) relación con el rubio dependía de mí.

Al diablo.

Me dirigí hacia el elevador dentro del penthouse, y cuando estuve dentro apreté el botón para llegar al lobby. En cuanto llegué a este y las puertas se abrieron, un Kenny con una increíble cara de resaca, una camisa blanca desaliñada y unos pantalones rotos apareció frente a mí. Sentí cómo mi cara comenzó a arder.

Se ve tan lindo.

Me apresuré a llegar hasta él y, por accidente, lo abracé. Me sentía preocupado, tal vez porque creí que el estúpido de Damien le había hecho algo. Al parecer, todo seguía de la misma forma.

¿O no?

—Ah. Hola Craig. ¿No sientes una resaca de mierda?, porque yo sí.

—La verdad me siento estupendo, no recuerdo haber tomado mucho ayer.

—Puff, creo que yo sí me pasé. La verdad no recuerdo nada de lo que ocurrió. ¿Podrías refrescarme la memoria? —dijo, tallándose la frente. Al parecer le dolía la cabeza por la resaca.

Mi cara empezó a arder de nuevo. Mierda.

—Sobre ayer... —como pensaba, él no iba a recordar el escándalo que le hizo a mis partes íntimas. Maldito rubio pobre — la verdad es que tampoco recuerdo mucho.

—¿Cómo no?, si dices que no tomaste mucho, además de que ni siquiera tienes resaca. Anda, Craig, ¿qué cosas tan asquerosas hice anoche? —respondió el rubio, mientras se mordía el labio y me miraba fulminante.

—Se besaron.

¿Pip?

Y ahí va mi rostro a arder por una tercera vez, maldición.

Mientras tanto, un Pip con los ojos hinchados se acercaba tranquilamente hacia Kenny y yo. Parecía haber bajado por las escaleras en vez de tomar el elevador.

—¿Qué? —dijo Kenny y, de cierta forma, lo hizo con una mueca de... ¿asco? Imposible— Imposible, a mí ni siquiera me gustan los hombres. Qué repugnante.

Crack.