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A la mañana siguiente, Robby se despertó, notando de inmediato los brazos de Emma quien lo abrazaba. Se escabullo de la cama, tratando de no despertar a la chica. Se puso a observar los trofeos y los dos dibujos que Johnny tenia guardados en una caja.
Lawrence por su lado se encontraba en la cocina, preparando el desayuno. Robby salió del cuarto con cuidado, tratando hacer el menor ruido posible.
Paso por la sala, notando el cuadro que se encontraba en uno de los muebles. Era una foto de Johnny junto a Emma el día del torneo de All Valley.
—Hola—Saludo a su padre —Gracias por dejar que nos quedáramos anoche.
—No hay problema, pero tendré que contarle a LaRusso de esto. Son sus hijas—Comento Johnny.
—Por favor no lo hagas—Le pidió —Emma no quiso ir a casa anoche para no pelear con su padre. Y Sam no quería que el señor LaRusso la viera en ese estado—Keene explico—Aceptare la culpa. Diré que bebi y les dije que me trajeran aquí.
—Sea lo que sea que estés cocinando, se esta quemando—Dijo Emma, saliendo del cuarto mientras bostezaba.
Llevaba puesta la camiseta que Johnny le había prestado para dormir y los pantalones que llevo a la fiesta el día anterior.
—Maldición—Se quejo el hombre al ver que el desayuno se estaba quemando, se dio vuelta y apago la estufa.
—Siento que mi cabeza va a explotar— Se quejo Emma, recostando su cabeza sobre el hombro de Robby.
Se escucharon dos golpes desde la puerta principal—¿Johnny?—La voz de Daniel hizo que Robby se sobresaltara—Johnny, vamos abre. Vi tu auto afuera, se que estas ahí.
—Ve a la habitación. Yo los cubro—Johnny toco el hombro de Robby, el cual asintió mientras tomaba el brazo de su novia y entraba en la habitación en la que Sam se encontraba.
—Hola, amigo—Johnny abrió la puerta y saludo a Daniel.
—¿Mis hijas están aquí?—Pregunto Daniel con confusión.
—Si, solo cálmate—Pidió Lawrence.
—No me digas que me calme, solo dime donde están—Insistió LaRusso.
Johnny trato de tranquilizarlo—Mira, tuvieron una noche loca. Los chicos hacen cosas asi, no exageres.
—¿Tu quien diablos eres para hablar de paternidad? Abre la puerta ahora mismo— Exigió.
—No voy hacer nada hasta que tu te calmes—Johnny cerro la puerta en su cara.
Retrocedió de golpe cuando Daniel abrió de una patada la puerta, haciendo que golpeara su rostro.
—¿Sam? ¿Emma?
Robby cerro la puerta de la habitación de golpe, cuando los gritos y la pelea de ambos hombres comenzaron.
