19

115 25 5
                                        

La noche había caído con rapidez, y Taehyung apenas se dio cuenta del paso del tiempo, quizás porque había estado tan ocupado con Jungkook. Ahora, recostado en su cama, se encontraba en una calma inquietante. Ya había comido, y solo le quedaba esperar a su hermano, esperando que trajera buenas noticias.

Mientras reposaba, sus pensamientos se desbordaban, y sin quererlo, su mente comenzaba a recrear cada detalle de lo sucedido, de cada momento compartido con Jeon. No podía evitarlo. Había logrado doblegarlo, hacer que cediera ante él, aunque sabía que al principio todo había comenzado con amenazas. Sin embargo, el resultado era el mismo, Jungkook había caído.

Lo que más daba vueltas en su cabeza, lo que más lo consumía, era la manera en que el azabache lo había follado en la ducha. Nadie le había brindado sexo de esa forma en mucho tiempo. Y aunque su mente trataba de justificarlo, él sabía que no era solo por la abstinencia. Había algo más profundo, algo que había despertado en él una necesidad. Una necesidad que no podía ignorar.

De pronto, un sonido lo sacó de su ensueño; la puerta principal se abrió. Sabía que su hermano había llegado. Taehyung se levantó lentamente, como si aún sintiera los efectos del encuentro con Jungkook, y comenzó a bajar las escaleras. Cada paso era lento, casi arrastrado, hasta que llegó al primer piso y vio a su hermano, colgando su chaqueta con una mirada curiosa.

Se acercó a él mientras el cazador lo observaba con una ceja levantada.

—Hola, hermanito, ¿cómo te fue? —preguntó, su voz tensa, expectante.

—¿Por qué cojeas? ¿Te pasó algo? —su tono cambió, mostrando una preocupación que Taehyung no esperaba.

Taehyung carraspeó antes de responder, buscando desviar la atención. —Solo estaba en la cama y se me durmió la pierna —mintió con una sonrisa forzada. La verdad era que había sido el resultado de un encuentro mucho más intenso con Jungkook.

Su hermano lo miró de manera dubitativa, pero no insistió —Vale —respondió, aunque no convencido— ¿Y por qué te ves tan feliz?

—Obviamente porque llegaste —Taehyung sonrió, un poco más relajado, pero su mente seguía atrapada en lo sucedido, incapaz de concentrarse completamente en la conversación.

El cazador entrecerró los ojos, notando la ligera tensión en su hermano —Okey, haré como que te creo. En cuanto a la búsqueda... te puedo decir que fue lo mismo de todos los días. Solo encontré algunas huellas, pero el chico no está por ninguna parte. Al parecer sabe esconderse bastante bien, mucho mejor que yo.

—Mierda —Taehyung murmuró, su rostro endurecido por la frustración— No puedo entender cómo un chico tan asustado puede estar sobreviviendo en ese maldito bosque... ¿o será que solo estaba actuando?

—Ni idea —respondió su hermano, sacudiendo la cabeza— Pero mañana iré al pueblo, a ver si hay alguna novedad sobre él. Ahora necesito comer algo. ¿Preparaste algo?

—Solo algo rápido —dijo Taehyung, avergonzado por la falta de tiempo para cocinar algo más elaborado— Dormí más de la cuenta y desperté tarde.

A veces, frente a su hermano, se comportaba como un niño, como el hermano menor que era. Pero cuando se enfadaba, su actitud podía ser aún más intensa que la de su hermano mayor.

El cazador lo miró con una sonrisa burlona, cruzando los brazos sobre su pecho —¿Decidiste quedarte en casa solo para flojear? —sus cejas se levantaron con incredulidad— Si no vas a venir conmigo, al menos deberías ir al bosque y cazar, por si aparece algo.

—No voy contigo porque ya estoy harto de lo mismo todos los días. Caminar por horas y no encontrar nada. Aquí, en casa, me siento mucho más entretenido. Y si alguien debería buscarlo, ese alguien eres tú, no yo —Taehyung se encogió de hombros, provocando a su hermano con una sonrisa juguetona.

Cacería [Kookv]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora