Cuando Toya salió de la universidad, Tenko corrió hacia él, dándole un suave puñetazo en el hombro.
—Oye, tienes que dejar de desaparecer y no contestar las llamadas, ¿comprendes? Me tenías muy preocupado, y a Keigo también...
Toya lo miró, y pudo ver preocupación real. Ya era la segunda vez que preocupaba a sus amigos, y no quería seguir haciéndolo. Decidió no contarle lo que le había pasado.
—Lo siento, estaba en una tutoría privada con Aizawa, recuperando las clases perdidas... y no podía contestar las llamadas.
Tenko alzó una ceja; no pudo evitar pensar en la palabra "privada" y "Aizawa" en la misma frase.
—Va-vale... está bien.
Toya sonrió.
—Venga, vamos a casa que me muero de hambre.
—Sí... Shui se preguntará dónde estoy...
Al llegar a casa, Shoto fue el primero en recibirlo, corriendo por el pasillo.
—Toya, Toya... ¿sabes qué?... hoy he hecho un nuevo amigo en la escuela.
Toya sonrió y se dio cuenta de que era cierto: Shoto había empezado la escuela y él ni siquiera se había preocupado por cómo estaba o si le había ido bien. Habían pasado muchas cosas en solo tres días.
—Qué bien, Shoto, me alegro mucho.
Shoto sonrió y en ese momento Fuyumi apareció tras él.
—Toya, ¿qué ha pasado? Llegas tarde.
Toya la miró; a ella no tenía por qué engañarla.
—Tuve otro ataque en la universidad y me desmayé.
—¡Oh, dios!, ¿estás bien? —preguntó la chica, acercándose a él.
—Sí, sí —Toya miró a Shoto, que al final lo había escuchado todo y lo miraba con preocupación—. No ha sido tan fuerte como la otra vez, solo me desmayé y me llevaron a la enfermería.
Fuyumi lo miró bien, y vio que parecía estar recuperado.
—Está bien, entra y come, que se va a enfriar.
Fuyumi empezó a entrar en la casa, mientras Toya se quitaba los zapatos y, al caminar hacia el comedor, Shoto le dio la mano.
Las horas pasaron, y llegó el momento de llevar a Shoto con Keigo. También aprovecharía para contarle lo que pasó y volver a disculparse con él por lo que pasó con Geten. Realmente no era su intención asustarle o intimidarle; simplemente ese chico llevaba el apellido de su familia materna.
Tras la caminata, por fin llegaron. Antes de entrar, Toya tomó aire y miró a Shoto, arrodillándose frente a él.
—No le digas a Keigo o Nakamura lo que me dijiste ayer, ¿vale?
Shoto asintió muy fuerte. Y tras eso, atravesaron la puerta. Al sonar la música, Toya pudo ver cómo la cara de Keigo lo enfocaba, y pudo ver una leve chispa en su rostro, formándose una sonrisa de alivio. Toya se acercó al mostrador.
—Hola.
Keigo lo miró. Tras esa chispa de alivio, volvió ese Keigo que había visto ese día, con una sonrisa falsa y unos ojos apagados.
—Hola —dijo el rubio y miró a Shoto, cambiando su tono a uno más suave—. Hola, Shoto-kun, ¿qué tal estás hoy?
—Bien, hoy he hecho un amigo nuevo. Se lo tengo que decir a Nakamura-san.
Keigo le sonrió otra vez.
—Oh, hoy Taki no está aquí —entonces miró a Toya—. Ha ido a hacer un ensayo privado en el bar.
Toya recibió esa noticia de forma agridulce. Por una parte, estaba solo con Keigo, lo que le daba la oportunidad de hablar un poco con él y disculparse, y por otra parte, tendría que tratar con Nakamura en el trabajo.
Tras unos instantes, Toya miró al rubio.
—Keigo, ¿podemos hablar un momento?
El rubio lo miró, y tras pensarlo un momento, aceptó.
—Muy bien... espera —miró a Shoto—. Vamos al almacén y te puedes sentar. Ahora voy yo, ¿vale?
Shoto asintió y fue con Keigo, y al poco, el rubio volvió y miró a Toya.
—¿Qué me querías decir?
Toya tragó saliva.
—Lo primero es que quiero volver a disculparme contigo por lo que dije ayer... te prometo que no quise echarte nada en cara, so-solo pensé en voz alta, de verdad, por favor, créeme...
Keigo lo miró; no deberían tener esta conversación, esta conversación no habría existido si Toya no se hubiese ido hace cuatro años.
—Toya... ya te dije que no pasaba nada... es verdad que me molestó... pero no pasa nada.
—Pero llevas raro conmigo todo el día... y lo de... ah, sí... oh, también quería pedir perdón por lo de Geten. Te prometo que no quería asustarle ni intimidarle... lo juro.
Keigo lo miró, recordó con absoluta claridad lo que vio, cómo el aura de Toya había cambiado en ese momento por el aura que tenía años atrás. Keigo debía reconocer que sintió algo de miedo, no por él ni por Geten, sino por el propio Toya.
—Lo sé... simplemente me asusté un poco al verte así y pensé...
—Pensaste que iba a pegarle, ¿verdad? —interrumpió Toya.
Keigo no dijo nada.
—Yo... yo ya no soy así... solo me sorprendió... —respondió le pelirrojo con cierto temblor en su voz.
—Himura, ¿verdad?
Toya lo miró a los ojos y asintió.
—Sí, es el apellido de mi madre.
—Lo sé, lo recordé cuando me lo dijo... pero dudo que él sepa algo...
Toya miró a Keigo.
—Podríamos preguntarle para estar más seguros...
Tras la conversación, Toya se fue de la tienda, algo más contento de cómo entró. Al menos había podido hablar con Keigo y aparentemente solucionar las cosas. Ahora solo debía lidiar con Nakamura en el trabajo.
![](https://img.wattpad.com/cover/370141441-288-k238306.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Porque Te Fuiste (Dabihawks)
FanficCansado de los abusos por parte de su padre, Toya, con ayuda de su hermana, deciden denunciarlo a las autoridades. A partir de ahí, guiado por una abogada, Toya y Fuyumi luchan por la custodia de sus hermanos. Ese proceso duró cuatro años, cuatro añ...