-La única persona que faltaba por saber en qué parte del mundo estaba, ya me había encontrado.- hablé hacia mi subconsciente.
Una ola de emociones y sentimientos llegan a tu corazón, no salen de tu cabeza por ninguna razón, pero eso es lo que hace e...
A máximo 2 cuadras del antro se escuchaba, más bien, retumbaba la música que habría adentro, lo cual era un poco raro ya que por ser zona rosa, lo más exclusivo de la ciudad, tiene que ser a un nivel considerable de sonido, ya que tienen que respetar la imagen del lugar, eso se suponía pero con tan solo el hecho de que el rey del party rentó el antro solo para su fiesta, se podía decir que esa regla no estaba para acatarla esta noche.
El chofer de Brian se estacionó a fuera del lugar, en donde había ya paparazzis listos para tomar sus grandes fotografías, el chofer se dispone a abrir la puerta y baja el anfitrión de la noche, en seguida le da la mano a Liz para ayudarla a bajar, se pone enfrente de ella para que pueda bajar con cuidado y si por alguna razón el vestido se llegara a levantar, nadie podría tener evidencia de eso, todo un caballero el ojiverde; Es mi turno de bajar, Brian repite la acción y es donde por fin los 3 estamos listos para entrar a la gran noche.
No sin antes Brian posar para los paparazzis, todo un galán siempre.
-SORPRESA!!!.- gritó literal toda persona que estaba dentro del lugar hacía el rayito, se fueron acercando para felicitarlo.
-Hay que irnos a nuestra mensa amorsita.- dijo Liz a mi lado, yo asentí.
-Siento que hay más gente que la fiesta del año pasado, Brian de verdad que hace amigos tan rápido.- dije al odio de Liz ya que la música no nos dejaba escucharnos.
-Hey mira quienes están aquí, si son la actriz y modelo más codiciadas de cdmx.- dijo Igor llegando a la zona vip, los amigos más cercanos a Brian estábamos en ese lugar.
-Pero si es el único Igor el más guapo del club américa, ¿cómo estás?, ¿dónde está Caro?.-dije al mismo tiempo mientras Liz y yo nos parábamos a abrazarlo.
-Fue al baño con Jana, ya no han de tardar, se ven muy lindas hoy eh, como que si cambian cuando se bañan.- dijo el chileno riendo.
-Tu ni bañándote cambias.-dijo Liz riendo, haciendo que Igor y yo muriéramos de la risa; me encantaba que tanto Liz como yo nos lleváramos así con algunos del club donde juegan ellos.
-Ay mis hermosas!! ¿cómo están?.- dijo la rubia llegando a la mesa, Caro la esposa de Igor, Caro al igual era chilena, los dos hacía más de 5 años que eran esposos, tienen dos hijas Trini e Isabela que son dos amores, claro iguales a sus papás.
-Hasta que por fin llegas, te extrañaba tanto.- dijo Liz abrazándola y después yo repetí la acción.
-Jana ¿como sigues de tu lesión? .- dije al abrazar a Jana, ella era mexicana como yo, jugaba en el américa femenil, acababa de regresar al equipo, pero antes en su equipo anterior había tenido una lesión, la cual no le permitía aún jugar con el club.
-La verdad ya vamos mejorando, dijo el profe que si esta semana entrenó a tope sin algún problema podré jugar ya para el siguiente partido, ¿iran a ver verme verdad?.- dijo Jana hacía nosotras 3
-Bueno ya tanta plática, me llevo a mi mujer y ustedes 3 se me ponen a bailar hasta que les duelan los tacones, vamonoooos!!!.- dijo nuestro gran amigo Igor.
Durante 1 hora estuvimos bailando cada canción que salía, Liz y yo ya sabíamos cuáles eran nuestras canciones y debíamos cantarlas o bailarlas hasta cansarnos, nos tomamos fotos y disfrutábamos cada cosa de la fiesta.
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