Dentro del auto Rosalina no deja de indagar sobre la confusión de Jeon, y él simplemente disfruta verla sufrir.
—¿Cómo entraste al hospital?
—Converse con el de seguridad —responde ella con rapidez. —Ahora puedes por favor decirme qué parte te hizo sentir confuso —le recalca con ahínco.
—Eres demasiado chismosa, Ros —la acusa él.
—Sí, lo soy ahora habla, Jungkook —replica la rubia molesta.
—Bien, no te enfades.
—No estoy enfadada —objeta ella mientras se cruza de brazos. —Y olvídalo, ya no quiero saber nada —musita, dirigiendo su atención hacia la ventana.
Jeon la ve de soslayo y sonríe, gira hacia la izquierda y luego sigue recto.
—Bueno, entonces ya no te mencionaré que Amber dijo que Jimin llora todas las noches. Tampoco voy a contarte porque la niña de la fundación que se llama Emma, dice que el compromiso es falso y que Won Park es malo —borbotea el pelinegro tan rápido como puede.
Los ojos de la alemana se ensanchan y de inmediato se gira en el asiento.
El surcoreano se desvía a la izquierda y entra despacio al estacionamiento subterráneo del hotel en que se hospedan.
—Espera, dí las cosas en orden para entender mejor.
—No hay nada que entender, y tú dijiste que ya no querías saber nada —la señala él mientras ríe de manera sarcástica.
—Déjate de tonterías, Jungkook —protesta ella con seriedad, provocando que él deje de reír—. ¿Qué es lo que sucede?
El pelinegro suspira, el auto está perfectamente estacionado, pero no salen. Él recarga su cabeza en el asiento y ya decidido abre su boca para contarle todo con lujo de detalle a su amigo. Lo primero que le dice es lo de Amber y por último lo de Emma.
—Entonces si él llora todas las noches es porque te ama y quiere estar contigo —expresa la chica emocionada.
Él solo la mira por el espejo del retrovisor y niega con lentitud.
—Amber es su amiga y ex pareja del padre de Jimin. No puedo creerle por completo.
—Pues no le creas a ella, creele a la niña —objeta Rosalina. —La abuela dice que los ebrios y los niños siempre dicen la verdad —agrega con voz de sabelotodo.
—Ros, no me digas que…
—¿Por qué te cuesta creer tanto las cosas, Jungkook? ¿Por qué te sientes confundido?
—Porque confíe en él, Ros. Confié y perdí todo, ahora estoy levantándome de nuevo y no lo sé, nada es lo mismo si no lo tengo a él.
Ella extiende su brazo izquierdo y coge la mano derecha de él.
—Jungkook, sé que es difícil de creer que el compromiso es falso y que el señor Park es malo. Pero quiero que sepas que he visto la manera en la que ese chico te mira y amigo, te puedo asegurar que eso es amor.
—Basta, Rosalina. él dijo que no debo preocuparme por su padre y tampoco por él, porque es obvio que mudará a Italia —recuerda dolido mientras finge una sonrisa y luego cierre sus ojos por unos segundos. —Como si el que se mudé de país y se mantenga lejos de mí lo sacará de mi corazón. Él está haciendo su vid, se casará pronto y yo..., solo tengo que sacarlo de mi interior y olvidarlo —gesticula entre dientes.
—Tal vez deberías investigar y…
—No, no haré nada —la interrumpe él mientras suelta su mano.
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Élite
RomanceDonde Jimin es hijo de un multi millonario y Jungkook un boxeador en ascenso. Su historia empieza luego de aquella cena de presentación en la élite. ¿Quieres ser parte de la élite? ¿Qué tan dispuesto estás a dejarlo todo? Para ser parte de la élite...