LA ACADEMIA

CAPÍTULO 35

Revisamos al completo la casa, como sospechamos, los señores Coronado escaparon después de haber fallecido el hijo de los famosos.

El jefe mandó una orden de búsqueda y captura. Entonces tuve el permiso de regresar a La Academia. Ya no tengo nada que hacer en la escena del crimen, la casa de los famosos actores.

Subí a mi propio coche y conduje hacia el instituto. Había atasco, ningún coche se movía y me estaba desesperando. Ya van tres de mis estudiantes que han fallecido, tengo que evitar más muertes, son mis trabajos.

Toqué la bocina como todos sin saber qué es lo que sucedía. Harta de esperar bajé mojándome por culpa de la lluvia y corrí hacia el origen del atasco.

Dos personas estaban tiradas en medio de la carretera, justamente en el paso de peatón. Los de alrededor estaban espantados y ningún coche se atrevía a cruzar la sangrienta carretera, por eso todos estábamos atrapados.

Interrogué a los de alrededor que vieron el accidente. Un coche pasó por encima de ellos sin ninguna intención de parar y aceleró escapando.

Revisé las pertinencias de las dos víctimas del atropello, a ambos los conocía. Tengo que volver lo antes posible a La Academia. Primero Will, después Mei y luego Borja. No puedo permitir que sigan así. Y ahora Isa está en dirección.

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CRIS MARTÍN

Esperé impacientemente sentado en la esquina de clase. Estaba tardando mucho. No creo que los profesores tengan mucho que hablar con él. Deberían de ser sus padres los que mandaron a conserjería avisarle. Si se hubiera ido del instituto me habría avisado por lo menos.

El resto dejó de hacer lo que estaban haciendo. Todos nos sentamos en el suelo esperando recibir un profesor para decirnos qué hacer en esta situación confusa.

Dirección se llevó a Isa y tampoco regresa. El director no parecía muy feliz, de todas formas, él nunca le sonrió a mi amiga ya que siempre la llamaba por alguna cosa mala que haya hecho. ¿Qué habrá hecho esta vez y no me haya enterado?

Por fin se abrió la puerta de clase. Nos levantamos enseguida para recibir al profesor de educación física. Tenía un enorme moratón en el ojo y a su lado estaba Isa con el puño rojo. Ella le había pegado.

La dejó con nosotros y se fue a enfermería. Volvimos a quedarnos en silencio. Ella se sentó a mi lado y apoyó la cabeza contra la pared después de soltar un suspiro. Miró hacia Álex que tenía sujeta de la muñeca a Eda.

— ¿Te pasa algo con la delegada? — le pregunté en voz baja.

Negó con la cabeza.

— ¿Por qué te han llamado a dirección? — preguntó Izan.

— Por mala conducta. — contestó.

— Te llama el director por eso y le pegas a Ribaul. —se rió Judit — Sí que tienes ovarios.

— ¿Has visto al resto de nosotros? — hice referencia a los tres que faltan.

Volvió a negar, no tiene ganas de hablar. Algo le tiene preocupada porque no para de masajearse la sien y el puente de la nariz.

Apoyé mi cabeza en su hombro y suspiré al igual que ella. Borja me está preocupando demasiado y el sonido de mascar chicle de Ester me molesta más la cabeza, es el único ruido que hay en clase.

Entró de golpe Noa al aula y todos sonreímos alegrados de tenerla aquí porque estamos muy asustados realmente.

— Se cancelan las clases. — explicó — No hasta que todo se calme. — tomó un minuto de silencio — Lo siento, chicos. No sólo ha sido Will, también Mei y Borja.

Eda volvió a estallar en un llanto. Isa intentó acercarse para consolarla, pero Álex la apartó. Izan abrazó a Judit porque tampoco pudo contener las lágrimas. Ester abrió la boca de la sorpresa. Y yo...

— ¿Estás segura?

Noa asintió cabizbaja.

Agradecí que Isa me sujetara porque casi me desmayaba. Si ya me sentía débil por no haber estado comiendo nada, la noticia me dejó en shock.

Intenté asimilarlo todo. ¿Por qué habían fallecido? ¿Por qué Borja? A Will lo asesinaron seguramente los gángsters, ¿pero los otros dos que fueron llamados por megafonía? ¿El próximo nombre que avisaran era para ejecutar nuestra muerte?

Me asusté cuando me llamaron a mí. Si todo iba a ser como yo pensaba entonces es hora de mi muerte. No tengo miedo, ya pasé por cosas peores. Crecí en un hogar con el techo roto, con unos padres que se mataban horas trabajando para traer la comida a casa, pasé hambre durante tantos años, Joel me rompió el corazón y ahora se murió mi novio. Ya no me da miedo nada. Sólo quiero saber cómo es esa muerte, seré una carga menos para mis padres.

Isa me deseó suerte y Noa me acompañó a conserjería, donde estaban esperándome unos agentes de la policía. ¿Qué sucedió?

La profesora Palacios no pudo seguir acompañándome. El director la amenazó con quitarle el trabajo de tenernos bajo su tutela si no acudía de inmediato a dirección porque Isa golpeó a nuestro profesor de educación física. No sé cuándo dejará su manía de molestarle.

Los agentes me querían llevar a ver a mis padres. No sé a qué se referían realmente, porque no deben de tener ningún motivo para detener a mis padres, ellos por más pobres que fueran en su vida robarían o incumplirían las leyes.

Recibí un mensaje en el móvil. Huí de la policía con la excusa de ir a recoger algo de mi dormitorio y escapé por la ventana de este.

Ya en la calle encendí el móvil y miré el texto del número desconocido.

I'm_sexy:
Siento lo sucedido, no era mi intención pero tuve que hacerlo.

Había una foto adjunta al mensaje. Pero las gotas de la lluvia tapaban la pantalla del móvil y únicamente alcancé a ver un fondo muy rojo como la sangre además de los rostros de mis padres.

Quería limpiar la pantalla del teléfono con mi chaqueta. Pero antes de que pudiera hacerlo sentí un grave mareo que estaba notando desde hace días y caí al suelo.

Intenté ponerme de pie. El móvil cayó a la alcantarilla. Quise recuperarlo, mis padres me lo regalaron con sus ahorros de hace veinte años, ni ellos mismos tienen uno y me lo compraron a mí.

Debo de averiguar quién es el extraño usuario, Isa nunca ha confirmado ni negado ser la identidad tras el nombre por más que le insistí.

Debo de ver la foto para saber qué es lo que les ha sucedido a mis padres.

Mis dedos no alcanzaban el fondo de la alcantarilla y el agua se filtraba llevándose cada vez más lejos el objeto.

La lluvia golpeaba cada vez con más fuerza y el mareo no ayudaba. Me tumbé un rato en el suelo para descansar un rato, quizás si cierro los ojos un ratito me pondré mejor.

NOTA DE LA AUTORA:
Los últimos capítulos que quedan son para la narración de los personajes que no han narrado estos diez capítulos. Así que ya no queda nada.
Gracias por leer, cuídense.
Chauu  <33