LA ACADEMIA

CAPÍTULO 36

El cuerpo fue encontrado al lado de la alcantarilla, en la calle trasera del instituto. Envuelto por la lluvia y desplomado como un muñeco frágil. Su muerte fue a causa de un colapso vascular por una desnutrición severa.

Esto explica su cansancio en todas las clases, motivo por el cual se queda dormido en todas las asignaturas.

Lo había llegado a sospechar, sin embargo, no sabía acerca de la grave situación económica por la que pasaba su familia. Mi dinero no les era suficiente a toda la familia.

Transportaron el cuerpo sin vida junto a los de sus padres. Ordené que pusieran estos junto a los otros tres, todas estas muertes deben de estar relacionadas aunque este último haya sido por problema propio.

Son mi trabajo, por tanto haré lo que haga falta para averiguar qué es lo que hay detrás de todo esto. Ya van cuatro y mi desesperación por salvar al resto aumenta.

Llevo como ocho tazas de café en todo el día y ya es de noche. Muchos oficiales han regresado a sus casas, por lo tanto, me quedé junto a unos pocos en el cuartel para seguir con la investigación.

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ESTER VALVERDE

* * *

Terminé de ponerme el top y bajé a la entrada para calzarme por último las zapatillas. Al mirarme en el espejo vi lo provocadora que iba. Así es como le gustan a los hombres que vaya vestida.

Tomé el bolso para colgarmelo en el hombro y salí de casa. En la entrada sentado encima de su moto me esperaba el amigo de Will. Normalmente iban todos juntos, pero esta vez vino solo y la moto únicamente para nosotros dos.

Subí encima del asiento y le abracé por detrás para sujetarme. Adrede pegué mis pechos a su espalda y rodeé su cadera con las manos muy cerca de su pantalón.

Arrancó la moto con fuerza y me llevó de citas. Todo muy bonito, hasta que llegó la hora de irnos a dormir en un hotel que pagué con el dinero que les pedí a mis padres.

Iba todo muy bien, pero recordé las malas experiencias que tuve. Él notó mis nervios e igual no se detuvo. Intenté quitármelo de encima, pero no sentía mis fuerzas. Mi cuerpo era tan débil que él me usaba a su antojo como una muñeca. Cerré las piernas aunque él me obligaba a abrirlas de nuevo. Entonces se bajó los pantalones y se acercó a mí.

* * *

Pegué un brinco del susto despertándome de golpe, todo había sido un sueño, más bien una pesadilla. Yo aún tenía mi pijama,  nadie me lo había arrancado. Incluso estaba en el dormitorio de La Academia, no en un hotel a solas con un hombre. Isa tenía los ojos cerrados a pesar del grito que se me escapó.

Me pasé una mano por la frente para limpiarme el sudor y bajé de la litera en busca de mi cantimplora para beber agua. Con la luz del móvil iluminé el cuarto y me dirigí al escritorio para tomar la botella.

Tragué grueso cuando recibí una foto. Era muy similar a la que me mandó después de haberlo hecho conmigo. Esta vez estaba depilada como si estuviera invitándome a volver a hacerlo.

Sentí unos brazos que me tocaron el hombro por detrás y le pegué un codazo en la cara para defenderme. Como pude corrí entre la oscuridad hasta la puerta para darle al interruptor y encender la luz.

— ¡Joder! — se quejó Isa en el suelo mientras se tapaba la cara con la mano — ¡Apaga esa mierda!

Miré a mi alrededor, él no estaba aquí. Fue la maldita bollera quien me asustó. Le había pegado a ella.